Capítulo 20 * Sentimientos confusos

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Jimin vio a Jungkook acercándose y entró en pánico, su corazoncito ya estaba medio comprometido y si dejaba que Jungkook lo besara sabía que el único lastimado sería él, que tontamente se haría ilusiones donde no había más que curiosidad por el otro lado, antes que Jungkook se acercara más, Jimin le puso una mano sobre su pecho deteniéndolo.

Jungkook lo miró extrañado, además estaba un poco ebrio, se notaba en sus ojos caídos y soñolientos, Jimin estaba en mejores condiciones, su papito le había enseñado a beber para evitar que sufriera accidentes.

- Jungkook...mejor no, estas ebrio y en realidad no quiero hacerlo- le dijo Jimin mirándolo serio, su corazón se arrugó un poquito, si fuera otro tal vez se habría aprovechado de la oportunidad, pero era Park Jimin y el no iba a hacerlo, Jungkook era hetero y quería seguir siendo su amigo y olvidarse de lo que estaba empezando a sentir, era lo correcto.

-¿ Porqué enano?- preguntó Jungkook mirándolo.

Jimin suspiró y le hizo un cariñito en el pelo.

- Mañana, cuando estés sobrio, me lo agradecerás- le dijo Jimin sonriéndole con ternura.

Jungkook lo quedó viendo y luego se encogió de hombros.

- Ok enano, pero igual quería probar, pero respeto lo que dices- dijo Jungkook parándose con dificultad, trastabillando, y se puso a reír porque lo encontraba divertido.
Jimin se sonrió y lo ayudó a llegar al dormitorio donde lo dejó acostado, Jungkook se durmió apenas cayó en la cama.

Jimin le sacó sus zapatos y sus calcetines , luego lo acomodó, lo tapó con una manta y se retiró a su habitación, donde se durmió también al instante.

Al otro día se encontraron en la cocina, Jimin le tenía listo un café y un sándwich, también un vaso de agua con un ibuprofeno para la resaca que sabía tenía en esos momentos.

Jimin le sonrió como siempre.

Jungkook lo miró y había cierta incomodidad de parte de él al hacerlo, tomó la pastilla y la tragó con el agua.

- Dentro de un rato te sentirás mejor- le dijo Jimin empezando a desayunar.

Jungkook asintió y se tomó el café.

Al verlo tan silencioso Jimin decidió hablar para que el ambiente entre ellos no se pusiera raro.

- Jungkook...respecto a anoche, no te sientas incómodo...estabas borracho y yo también, además no pasó nada, ¿ lo olvidamos y amigos como siempre?- le dijo Jimin sonriéndole.

Jungkook pegó un suspiro.

- No sabía como mirarte sin sentir vergüenza, disculpa enano- dijo Jungkook rascándose su cabeza y dándole una sonrisa tímida.

- Recuerda, no hay que ver las cosas tan complicadas cuando no lo son, ¿ amigos entonces?- le dijo Jimin.

- Amigos enano- dijo Jungkook y ahora le sonrió agradecido y con ganas.

Jungkook en realidad no había procesado bien todo aún, pero aún ahora no sabía porqué le había pedido eso al enano, ¿ de verdad había querido besarlo?, si era sincero consigo mismo, la verdad era que todavía tenía ganas, pero Jimin fue más maduro e inteligente, había parado todo a tiempo, sino no sabría como comportarse con él ahora.

La camaradería de ambos se restableció y llegaron a la empresa con Jimin burlándose de su poca tolerancia al alcohol.

Ese día Jungkook nuevamente tenía ensayo de canto y baile, así que Jimin quedó solo por la mañana, organizando las cosas pues por la tarde visitarían un café que promocionaba la imagen de Jungkook en sus vasitos de cartón, sería una sorpresa para los clientes ya que firmaría sus vasitos.

- ¿ Puedo?- apareció Rose sonriéndole.
Jimin le sonrió de vuelta y le hizo una seña para que entrara.

- Hola Rose- dijo Jimin amable.

- Hola Jimin ¿ estás solo?- preguntó mirando alrededor.

- Sí Jungkook tiene ensayos por la mañana- le dijo Jimin sonriéndole.

-¿ Jimin?, ¿ Jungkook...le caigo mal?- preguntó apenada.

- No Rose...él...a él le cuesta a acostumbrarse a las personas- le dijo Jimin mintiendo un poquito para no hacerla sentir mal.

Rose suspiro y su cara se iluminó con una sonrisa.

- Me alegra tanto saberlo...Jimin a mí...me gusta mucho Jungkook...¿ crees que tenga alguna oportunidad?- le dijo rose mirándolo ansiosa.

Jimin nunca se esperó esta confesión, y se sintió culpable por sentir celos de la chica.

- No lo sé Rose, no somos tan íntimos- dijo Jimin mordiendo su labio.

- Pero se ve que te aprecia y se siente comodo contigo, ¿ podrías ayudarme?- preguntó Rose esperanzada.

- ¿ Y cómo?- preguntó Jimin asombrado.

- Bueno...puedes hablarle de mí y conseguirme una cita...del resto me encargo yo- le dijo Rose sonriéndole.

- No sé Rose...

- Por favor, por lo menos inténtalo, en serio me gusta mucho- le dijo Rose.

Jimin suspiró.

- Lo intentaré...pero no prometo nada- dijo Jimin.

Rose pegó un gritito y corrió a abrazarlo.

- ¡ Gracias!- dijo Rose besando su mejilla- me voy ahora y gracias de nuevo- sonriendo salió del lugar.

Jimin no sonreía, se sentía triste, en el fondo sabía que estaba siendo utilizado.

Tal vez esa era la solución y así se curaba de una vez de estos sentimientos que lo estaban invadiendo, así que haría lo posible por conseguirle la cita que tanto quería Rose, no por ella, sino por él y su inestable estabilidad emocional ahora que Jungkook empezaba a ser demasiado importante para él.

Tomada la decisión se obligó a sonreír como siempre lo hacía.

Por la tarde fueron sólo el y Jungkook más unos guardaespaldas, Nam-joon tenía otras cosas por hacer así que se quedó en la empresa.

Realmente fue una sorpresa para los clientes ver aparecer el famoso idol que hizo una reverencia al ingresar, siendo recibido por el dueño que lo llevó hasta una mesa luego de decirle a la clientela que podían acercarse y que Jungkook les autografiaría sus vasos y que además podían sacarse fotos.

Jimin se sentó en la mesa junto a Jungkook y vio admirado como Jungkook amablemente atendió a todos aquellos que se acercaron para sacarse fotos y que les firmara sus cafés.

Jungkook siempre lo sorprendía, ponía tanta dedicación y cariño a cada uno de los aspectos de su trabajo.

Luego de terminar se despidieron del dueño y se dirigieron al automóvil con los guardaespaldas tras ellos en un vehículo aparte.

-¿ Te divertiste enano?- le preguntó Jungkook sonriendo.

- Mucho, además estoy enguatado de café- dijo Jimin riéndose y tocando su pancita.

- Te va costar dormir por la noche enano- dijo Jungkook divertido.

- Lo más probable- dijo Jimin y ambos se rieron.

Jungkook lo miró y su pecho se sintió cálido al verlo sonreír, de verdad ese enano se estaba metiendo profundamente en su ADN.

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