Blindness- Markhyuck

LV

Donghyuck es conciente de que Mark es caballeroso, pero sobretodo es paciente, al tenerlo cada noche susurrandole al oído:

—No te preocupes si tardas miles de años en recordarme, yo te enamoraré y tus recuerdos no serán más que un presente.

Mientras entrelazan las manos.

No hay más abrazos, ni besos, solo caricias que Mark le da para que no se sienta incómodo.

Tal vez se siente un poco triste cuando el mayor le deja de dar caricias y palabras de amor.

Pero sabe que tienen que ir poco a poco.

Al menos hasta que Donghyuck deje de tener inseguridades, miedo y tristeza.

Tiene un recuerdo maravilloso:

Donde él se hace llamar Haechan, cuida de un guapo invidente, el mismo que le hace tocar las estrellas de distintas maneras...

Donghyuck se despeina con ambas manos, ríe y sus mejillas están demasiado calientes que se terminan pintando de rojo.

¡No puede creerlo!

Acaba de recordar a él y a Mark en una situación comprometedora.

Jala las hebras de su cabello cuando su cerebro le recuerda los tantos besos que compartió con Mark, además de que ambos estuvieron completamente desnudos, intercambiando sudor.

Grita por desesperación y vergüenza.

Pero sonríe cuando recuerda el tacto amable de Mark.

Descubre que el amor que tiene hacia Mark es puro, sincero y verdadero.

Ama a Mark, y para que su amor perdure, necesita quitar a estorbos de su camino.

Estorbo como lo es Minjun.

Mark lo quiere, pero después de tantas veces que compartió con Minjun en la cama, Mark se puede sentir asqueado.

Incluso él se siente asqueado.

Mark no lo querrá de esa manera.

Sucio.

Donghyuck está sucio.

Donghyuck se siente sucio.

Deja una nota en la nevera, para después salir del departamento del mayor.

Volverá más tarde.

♫︎♫︎♫︎

Regresaré más tarde.

Te amo.

-Haechan.

¿Cuánto es más tarde?

Casi está por amanecer, Mark lo espera pero Donghyuck no ha llegado.

Ya ni siquiera piensa si es una broma por parte del menor.

O tal vez debería comenzar a preocuparse por el más pequeño.

—Tranquilizate.— Jaemin habla detrás de él. —Vamos a su casa.

Vuelve a releer la nota.

Jaemin le traqulizar con algunos toques en su espalda, palabras que lo ponen más nervioso.

—Lo siento, soy yo el que debería tranquilizarte.— Jaemin niega tranquilo.

—No pensemos en eso por ahora.

Está tan nervioso, tan miedoso, tan intrigado por el moreno.

Apenas amanece se dirige a la casa del moreno, pero ni Jaemin ni él encuentran algo.

Su segunda parada es en la cafetería, un poco apenado Jisung entrega un sobre marrón.

A pesar de todo, he sido consiente por mucho tiempo que me engaño solo. Pienso que lo peor será lo mejor.

Yo no puedo fingir que amo a alguien que por estar en mis recuerdos me apegue a él. Sólo me atormeto muchas veces.

Últimamente no me siento cómodo conmigo mismo, mucho menos con personas externas.

Desde que te conocí sólo haz llenado mi vida de problemas, de conclictos que no tienen solución.

Adiós.

Me despido de ti como la forma más prudente que existe.

Estaré bien.

-Donghyuck.

Mark rompe en pedazos poco visibles aquella hoja, está enojado que tiene el rostro rojo de furia.

Los clientes de la cafetería lo miran asustados.

Jaemin, Jisung y Chenle lo sacan del lugar con vergüenza.

—Se fue.—patea su auto.

—Le diré a Jeno y Renjun, tal vez se sintió obligado.

Mark niega con enojo.

—Iré por un té para ti.

Jaemin en realidad entra a la cafetería para recoger los restos de la carta.

Por más que Jaemin no quiere mirar a la cara a sus dos novios, termina llamándolos a la cafetería.

♫︎♫︎♫︎

Llora y llora, va por la sexta taza de café y no termina por saciar su enojo.

—Dale tiempo, necesita tiempo, estaba presionado.

—¡Yo jamás lo presioné!

Jaemin continúa pegando los trozos de la hoja.

—¿Cuándo les dirás que estás embarazado?— Mark limpia sus lágrimas para poder prestar atención a su mejor amigo.

—¡¿Estás embarazado?!— Dos voces gritan.

Mark se hace chiquito en el asiento, Jaemin sonríe incómodo.