Después de arreglar todos los asuntos con la policía, al fin iban a poder regresar a Florencia. Giancarlo estaba afuera de la habitación donde permanecía Alessia, su mirada perdida en algún punto de la alfombra, no sabía como sentirse respecto a lo que acaba de suceder con Alessia, tenía sentimientos encontrados, más bien se sentía perdido sin poder pensar con claridad. Su hermano Luciano lo veía desde unos metros atrás, desde que había hablado con Alessia él había estado actuando extraño y aunque le había preguntado un par de veces, la respuesta había sido la misma "necesito pensar".
"-Hermano ¿cómo están? ¿cómo esta Alessia? ¿Qué ha pasado? – Arianna había llamado a Luciano ante la preocupación de no tener noticias de ellos.
-Hola princesa – Luciano soltó un suspiro cansado – tranquila Alessia ya esta con nosotros y esta recuperándose
-¿Qué pasa Luci? ¿Algo anda mal? – pregunto ella preocupada
-Princesa, nuestro hermano nos necesita, te necesita, lo que se viene no será nada fácil y debemos ser su soporte – dijo Luciano afligido
-Luciano por Dios no me asustes, dime ya que pasó
-Alessia esta ya con nosotros, pero no esta bien, ese maldito la daño y ahora nuestro hermano se siente perdido sin saber que hacer, como ayudarla o como sentirse él ante esta situación – Luciano hablo con tristeza
-No sé si pueda ver a Gian a los ojos, le falle, pude salvarla y no lo hice...
-Ya basta Ari, no fue tu culpa, estabas en peligro también, ya deja de responsabilizarte, ahora nuestro hermano nos necesita fuertes, eres su melliza y lo conoce mejor que nadie, somos su fuerza y se lo vamos a demostrar... regresaremos esta misma noche, solo estamos esperando terminar unos tramites con la policía, estaremos allá en la madruga o al amanecer, llevaremos a Alessia directamente a un hospital, allá te daré más detalles.
-Esta bien, hermano, los amo mucho"
Luciano había hablado con su hermana minutos atrás, ya que ella desesperada no lo dejaba en paz y tampoco había sido capaz de hablar con Gian. Luciano se acercó y se detuvo a su lado, recargándose en la pared sin hacer ningún comentario, espero unos minutos antes de hablar.
-Ya esta todo arreglado, solo esperamos que Donato termine todo con la policía y podremos irnos – Gian no dijo nada – llevaremos a Alessia a un hospital para que la revisen como se debe y después a la mansión, ya di ordenes para adecuar tu recamara con todo lo que ella pueda necesitar...
-No, ella no ira a la mansión – dijo con tristeza
-¿Qué?... ¿pero de que estas hablando hermano? Ella te necesita, tu debes estar a su lado, más ahora que ella esta embazada – Luciano replico confundido
-Ella no quiere estar más conmigo
Los ojos de Gian se llenaron de lágrimas que comenzaron a rodar por sus mejillas, sus puños estabas blancos por la fuerza aplicada, Luciano lo miro sorprendido, pero no dijo nada, solo lo abrazó como cuando eran pequeños y Gian se lastimaba con alguna cosa o se caía, lo consolaba y le decía:
-Hermanito, sabes que siempre voy a estar contigo, te amo.
Gian se refugio en los brazos de Luciano y entonces se permitió soltar sollozos, su alma dolía y su espíritu estaba flaqueando, estaba dándose por vencido, se estaba derrotando antes de comenzar la batalla, todo aquello que había soñado vivir al lado de Alessia estaba destruido y él no sentía fuerzas para luchar, aunque por dentro sabía que debía hacerlo si de verdad la amaba.
No hubo más palabras, Luciano le daría su espacio, pero definitivamente debían charlar, necesitaba entender a su hermano para poder ayudarlo. Luciano le pidió a Franco encargarse de todo, ya que Gian no volvió a hablar con Alessia. Al llegar a Florencia, inmediatamente ella fue llevada al mejor hospital de la ciudad, obviamente con el doble de seguridad custodiándola, además de algunos agentes de la policía que aún estaban tras Fabian, quien había logrado escapar apenas en el enfrentamiento que se había llevado a cabo.
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La Trampa del Amor
ChickLit-¿Qué carajos paso? - se encontró con su ropa regada, algunas botellas de alcohol y un preservativo tirado a un lado de cama. Comenzó a buscar en sus recuerdos y lo último que se le venía a la mente era beber como desquiciado cuando vio a aquel homb...