La Trampa del Amor

CAPITULO 44.

Después de aquella noticia todos los presentes se habían quedado sorprendidos y sin palabras, sobre todo Giancarlo que después de casi gritar que sería padre, paso a un estado casi catatónico. Luciano había permanecido a su lado, poco a poco y gracias a su mujer, comenzaba a entender todo lo referente a las relaciones e intuía que para su hermano se venían complicaciones sobre todo después de ver como Alessia lo rechazaba.

Amelia junto a Giorgio habían insistido en quedarse a cuidarla, dándole así oportunidad a Giancarlo irse a descansar, pero él seguía terco en quedarse y más ahora que sabía que Alessia esperaba un hijo suyo, lo que si hizo fue ordenar habilitar su recamara con todo lo que ella podría necesitar para pasar su embarazo en reposo, el médico había sido muy puntual al mencionar que su embarazo estaba en un punto critico y ella debía tener muchos cuidados y no estar expuestas a ningún tipo de estrés.

Luciano hablaba diariamente con Emily y la ponía al tanto de todo lo sucedido, extrañaba mucho a sus hijos y su mujer, pero sabía que aún no podía dejar a sus hermanos, porque no solo Gian le preocupaba, si no también Arianna, a quien había observado y denotaba que la estaba pasando mal.

Una enfermera llego hasta la zona de descanso donde todos esperaban y les informó que el doctor le daría a Alessia las nuevas noticias, fue Giancarlo quien se puso de pie como resorte, quería estar al lado de su mujer cuando le dijeran que serían padres, una sonrisa se dibujó en su rostro, deseaba abrazarla y besarla, la había extrañado tanto y ahora que sabría la verdad, ella no podría oponerse a estar junto a él.

Cuando llegó a la habitación, el médico estaba terminando de revisar a Alessia, Gian le sonrió, se notaba su semblante completamente distinto a las veces anteriores, ella desvió la mirada y se concentró en lo que galeno le preguntaba.

-Bien Alessia, tengo varias noticias para ti y creo que todas son muy buenas – dijo el hombre sonriendo

-Solo quiero irme a casa – dijo ella en voz baja, Gian se acercó y se colocó del otro lado e intentó tomar su mano, pero ella la quito

-Después de revisarte y realizar los análisis correspondientes, tengo varias noticias que darte – ella levantó la vista – primero su embarazo si bien es cierto que es de alto riesgo, ya podemos darle de alta, claro esta que debe seguir las recomendaciones y en casa tener todos los cuidados.

-Así será doctor, ya en casa esta todo dispuesto para mi mujer – dijo Giancarlo con visible alegría, Alessia no dijo nada, Gian quiso de nuevo tomar su mano y esta vez ella no se alejo

-Lo siguiente que debes saber es que al realizarte los estudios, hubo algunos datos que no concordaban, así que si lo recuerdas ordene que se volvieran a hacer y confirmaron los resultados de los primeros

-No entiendo doctor ¿hay algo malo con mi bebé? – pregunto por primera vez, sonaba tan extraño la palabra bebé

-No ordene que se te hicieran de nuevo por estudios por eso – el doctor se acercó – mira cuando llegaste, mencionaste que un embarazo producto de una violación – ella se tensó y las lágrimas comenzaron a bajar.

-Amor – Gian quiso abrazarla, pero ella solo negó con la cabeza y él soltó un suspiro

-Alessia no encontramos indicios de alguna violación – ella frunció el ceño y permaneció callada – por eso quise que se volvieran a revisar

-Pero... Fabian... ese hombre dijo que... que...

-Supongo que lo hizo para jugar con tu mente, con tu voluntad, tu dijiste que no recordabas ese suceso

-Así es yo no supe... él me dijo muchas cosas y... y yo le creí – ella comenzó a sollozar más fuerte y Giancarlo la abrazo consolándola

-Amor... tranquila... aquí estoy... mi vida... estoy contigo – le decía al oído