Capitulo 5.

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                     Transformación.

Abro los ojos por los rayos del sol que entran por la ventana de mi habitación. Me senté en la cama y sonreí al ver que hay muchos globos negros y blancos. Hay bolsas de regalos al final de la cama y junto a ellos está el número 19 en globos color Negro. Me levanto y voy al baño, hago mis necesidades y me ducho. De ropa me puse algo sencillo, un pantalón negro y una camisa negra con el logo de una banda, mis tenis blancos no pueden faltar.

Dejé mi cabello secarse y abro los regalos. Lo primero que veo es ropa y más ropa, el regalo es de mi abuela porque siempre me ha regalado ropa o collares. En mis 15 años me dió un collar con un dije de media luna. Se me hizo raro cuando me dijo que la única que podía quitármelo era ella, y era cierto, esa misma noche traté de quitármelo y no pude. Recuerdo que también tenía algo escrito.

Aprende de la luna, que aunque se encuentre sola, nunca deja de brillar.

Al abrir el regalo de Nick me dieron ganas de llorar. Era un portarretrato con la foto de mis padres, estaban abrazados y mi mamá sonreía, en su cara se notaba lo feliz que estaba. Mi padre salió en la foto con los ojos cerrados.

Nick entró a mi habitación y sonrió al ver que estaba viendo su regalo.

—Es perfecto.—Dije y sin poder evitarlo lloré.

Se acercó a mí y me abrazó.

—Yo también los extraño.

Sequé mis lágrimas y el se alejó.

—Descubriré todo, lo prometo.—Dije y lo vi de reojo.—Ya que tú no me quieres contar.

—Te dije que no se nada.—Miró a otro lado.

Es fácil darse cuenta que esta mintiendo, cuando lo hace trata de mirarte a los ojos.

Mi celular sonó y me acordé que iría con Rose a la peluquería, no me haría nada de otro mundo. Siempre me ha gustado tener el cabello liso. Me despedí de Nick al ver a Rose acercarse y fuimos a la peluquería. Rose decidió aclararse un poco el cabello y le quedó hermoso.

Salimos de la peluquería y fuimos a mi casa. Al entrar vimos todo adorando, habían globos en el techo y estaban los 18 pegados a la pared, en la mesa habían varios cupcakes de chocolate y una torta de dos pisos. Rose saludó a mi abuela y luego se fue, tenía que hacer la maleta.

Todo para última hora.

Mi abuela nos comentó que invitó a sus amigas ya que nosotros no estaremos después de la transformación. Me parece buena idea que ella disfrute con sus amigas, desde que me contó todo la he notado preocupada.

Faltan pocos minutos para que comience la transformación y Nick se asegura de que las cadenas estén bien ajustadas.

—¿Estas lista?.—Preguntó mi abuela y asentí.

—¿Están seguros que no se escuchará?.

Nick asiente y sonríe para tranquilizarme.

—Nadie te escuchará, tranquila.

—¿Y si soy híbrida?, cuando me convierta en vampiro me volveré loca por la sangre.—Dije y mi abuela me dió un suave golpe en la frente.

—No digas eso, por eso mi contacto te ayudará.

Asentí poco convencida y Nick desordenó mi cabello.

—Tranquila, yo estoy contigo. Deja que la transformación pase. Estarás un poco desorientada.—Asentí.—Si te mueres vendo todas tus cosas.—Dijo Nick con seriedad.

Polos opuestos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora