Mi muerte.
El dolor en mi garganta es horrible. Abro los ojos y decido ir al baño, sin embargo al dar dos pasos caigo caigo suelo, siento todo mi cuerpo dormido. Jared se levanta y corre hacia mi.
—Hey, ¿qué sucede?. ¿Qué tienes, hey.—Habla Jared agarrando mi rostro.
Trato de hablar pero nada sale, me cuesta poder hablar y es un dolor inexplicable.
—¡Chicos!.—Grita Jared.
En cuestión de segundos Luke y Nick entran a mi habitación, Nick se arodilla y me observa.
—No puede ser, ¿por qué está tan pálida?.—Pregunta Nick preocupado.
Traté de levantarme pero de nada sirvió, no podía.
—Ella no puede enfermarse, nosotros no podemos.—Dice Luke mirándome confundido.
Las chicas entran asustadas y Rose cuando me ve abre los ojos de par en par. Ambas se acercan y veo en cámara lenta su cuello, por alguna razón se me hace agua la boca y las empujo con fuerza para alejarlas, jared me ve confundido.
No puedo, no puedo, no puedo, no lo hagas.
Rose me ve asombrada y se que piensa lo mismo que yo, debe ser eso...
El collar ya no aguanta más.
—No ha completado su transformación.—Susurra Rose.
Todos se callan al escuchar lo que dijo la castaña.
—Tiene que morir.—Dice Emily.
—¿Cómo la matamos?.—Preguntó Nick.
Vaya creí que nunca vería esto, mi querido hermano planeando mi muerte.
—Hay que clavarle una estaca de madera en el corazón.—Dice Rose.
Abro los ojos par en par y niego como puedo al escuchar la palabra "Corazón".
No, de eso nada.
Emily me ve y sonríe divertida.
—Si señorita, usted va a morir.
Cuando ella habla así da miedo, parece una demente.
—Ire a preparar la estaca.—Dice Jared y todos asienten.
Antes de que todos se vayan Emily habla.
—Cuando despierte querrá sangre...
—No se preocupen por eso, conseguiré unas cuantas.—Dice Jared.
Me levanto cuando siento que estoy un poco mejor y maldigo cuando siento mis párpados pesados, después todo se vuelve negro.
Despierto en la mitad del bosque y me levanto como puedo. No tardó mucho en darme cuenta que estoy en el Green Forest y que mi casa debería estar cerca, me se este bosque de memoria. Cuando doy dos pasos una persona sale de su escondite y quedo asombrada al ver que es igual que yo.
Lo único diferente que tiene es su cabello que es negro azabache.
—Al fin puedo conocerte, Anastasia.
—¿Qué haces aquí?.—Preguntó aún asombrada.
Se sienta en un tronco.
La bruja hizo bien su trabajo, es idéntica a mi.
—Quería fastidiarte un rato.
Ruedo los ojos.
—Me largo.
ESTÁS LEYENDO
Polos opuestos.
FantasyNo eran nada iguales, pero se amaban como si fueran idénticos. Eran tan opuestos, tan distintos. El no era el chico que ella imaginó para ella, era todo lo contrario. Ella no era la chica que el siempre soñó, el destino se divirtió uniendo sus camin...