Polos opuestos.

Capítulo 17.

                  Agente 008.

Los rayos del sol entran por la ventana y abro los ojos un poco, frunzo el ceño al ver la ventana abierta y recuerdo haberla cerrado antes de irnos al club. Alguien está atrás de mi y me sigo haciendo la dormida, poco a poco voy sacando el cuchillo que esta debajo de mi almohada, tengo un montón escondidos en todos lados. La persona no se mueve y eso me preocupa, me muevo rápido y me monto encima de la persona, pongo el cuchillo en su cuello y maldigo en voz baja al ver a Jared dormidom

—Mierda, casi lo mato.—Susurré y le quité el cuchillo.

Le doy un golpe suave en la frente frente el se despierta con el ceño fruncido, le vuelvo a dar otro y sonrío.

—Lo siento,me emocioné.—Digo riéndome.

Al verme se sonroja.

Verdad que sigo encima de él.

Me quito y me siento en dónde estaba dormida.

—Me asustaste.

—No, tú me asustaste. Estaba a segundos de matarte.—Digo cruzandome de brazos.

—¡¿Qué!?.

Señalé su cuello y el se lo toca, cuando le puse el cuchillo en su cuello apreté un poco sin querer y le hice un pequeño hueco. Al ver el poquito de sangre en sus dedos niega con la cabeza.

—¿Qué haces en mi habitación?.—Pregunté.

—Antes de irme vi a dos sombras merodeando por aquí.

Abro los ojos asombrada.

—¿Y qué paso?.

—Los deje inconscientes, eran sombras de bajo nivel y duraron tiempo en poder irse. Ellos están por encontrarte, tu entrenamiento tiene que empezar ahora.

—Por más que quiera tengo que esperar al contacto de mi abuela.

—¿Sabés cómo se llama?.—Preguntó.

Recuerdo haberlo escuchado hace días por parte de Nick, pero se me complica recordarlo.

—Creo que dorian o Dom. Algo as.

El abre los ojos como platos.

—¿Dominick?.

—Creo que sí, ¿por?.

Desordena un poco su cabello.

—Le dicen la bestia.—Al escucharlo decir eso, frunzo el ceño.—De mil personas que ha entrenado, solo una soporto el duro entrenamiento. Quedó como el primer destacado.

—¿De mil personas solo una?, ni que fuera la gran cosa.

El sonríe.

—No estas entendiendo. —Dice y se levanta de mi cama.—Duré dos años para controlar mis habilidades.

—¿Y?.

—Tienes que controlar todas tus habilidades en 8 o 9 meses.

Me puse a pensar en las habilidades que puedo tener, soy una híbrida.

—Estas bromeando.—Dije y me reí, sin embargo Jared no me siguió la risa.—¿Es en serio?.—El asintió y sonrió.

Después de eso bajamos a desayunar y a la hora del almuerzo los chicos decidieron cocinar ellos para nosotras descansar de la cocina, yo me incluí y no he tocado la cocina. Nick me pidió que lo acompañará para comprar lo que faltaba.

Odio esperar, aunque eso ustedes ya lo saben.

De tantas cajas de macarrones que hay, Nick solo agarra dos cajas y son diferentes. Se les queda un buen rato con el ceño fruncido y las mueve.