Prologo

2.8K 118 3
                                    

Mi nombre es Katniss Abernathy, soy la hija mayor de uno de los más reconocidos agricultores del distrito 12, Haymitch Abernathy. Todo lo que tenemos nos fue heredado por mi abuelo, al cual me parezco demasiado; cabello castaño, ojos grises, un gran amor por los animales y un deseo enorme por proteger a los que más amo. 

Según mi abuela Sae mi papá no me odia, sino que tenerme cerca, a mí porque me parezco a mi abuelo, y a Prim porque se parece a mi madre, le causa mucho daño.

Desde que cumplí los 12 años, me mando lejos a estudiar al capitolio, pero fue por un error que cometi, no por él. Al principio fue difícil, no solo extrañaba a mi familia y amigos, sino que también anhelaba volver a la naturaleza que me ofrecia mi distrito, a la libertad de poder montar todo el día, sin más que el sol de compañía.

Hablando de sol, el que de verdad lo es, es mi tío Finnick, él es mucho menor que mi padre, cuando mi madre nos dejó él se encontraba estudiando en el distrito 4, estudiaba para ser veterinario, la noble profesión que tenía mi abuelo y que yo también deseo seguir. Sin embargo al huir mi madre; él se enteró que mi padre no solo se volvía un alcohólico sino que también nos había descuidado a nosotras y a la hacienda, no lo pensó dos veces y volvió al 12. Junto con el vino mi tía Annie, la cual huyo de sus padres por amor, por amor a mi tío; ellos hacen una hermosa pareja, se aman, y es por eso que siempre dudo de si el amor existe, cuando los veo lo creo, pero cuando después veo a mi padre, me da miedo alguna vez sentirlo, volverme tan débil como él, haber entregado el corazón y que me lo destrocen como a él. Ellos cuidan de mi hermana Prim cuando no estoy, ella se ha vuelto como una hija para ellos.

Prim, mi patito, le digo así porque en la hacienda tenemos un lago, el cual la separa de la propiedad de los Mellark, ahí nadamos todos los veranos y cuando el tiempo nos lo permite; a ella le encanta nadar, es la mejor en eso.

Mi madre, la cual huyo con el "supuesto amor de su vida" nos dejó botadas como un estorbo. No es necesario decir que siento un gran resentimiento hacia ella, no entiendo cómo nos pudo dejar por un hombre. Mi abuela Sae aun la recuerda con cariño y me dice que para ella fue un gran dolor dejarnos, que algún día volvería y nos contaría como fueron las cosas en realidad, cuando le pregunto a que se refiere con ello, solo calla, no me cuenta nada.

Lo que si me cuenta es que ella tuvo la fortuna de casarse enamorada de mi abuelo. Los dos eran pobres y él se esforzó por que eso cambiara, fue el mejor en la escuela y por eso le fue concedida una beca para ir a la universidad, tuvo que irse al 11. Mientras mi abuela lo esperaba con ilusión; hasta que lo logro, logro recibirse y volver, es a base de trabajo y dedicación que pudo hacerse de unas tierras, era uno de los pocos veterinarios de la región, entonces pasaba mucho tiempo afuera, es por eso que mi padre no lo queria, porque no estuvo con él en momentos en los que lo necesitaba. Todo empeoro cuando ya tenían la hacienda y vivian cómodamente sin que mi abuelo viajara tanto, y mi abuela sorpresivamente concibió a mi tío Finnick. Él era la luz de los ojos de mi abuelo, estuvo toda su infancia con él y eso incremento el odio de mi papa.

Cuando mi abuelo trato de enmendar las cosas y pedir perdón, ya era tarde, Haymitch era todo un hombre, la niñez ya había pasado. En un intento desesperado por agradarle, logro que el papá de mi mama le diera su mano para su hijo, lo cual lo hizo cambiar. Cuando se casó con mi madre lo hizo enamorado y se empezó a hacer cargo de la hacienda "Preciosa", según mi tío, bautizo a la hacienda así por mí, ya que siempre fui como un diamante ante sus ojos.

Mi abuelo murió poco antes de que mi mamá nos abandonara, yo habré tenido unos 8 años, murió por un accidente con un caballo, lo golpeo en el pecho, cuando este trataba de ayudarlo con una pata rota. Antes de morir me hizo prometerle que cuidaría de la familia, sabia lo parecida que era a él, sabia que era una tarea que podía dejarme, nunca dejaría que nada les pasara, además insistio en que buscara mi felicidad en todo momento y que no dejara que nada me corrompiera, ni siquiera las situaciones más adversas. Se lo prometí, ¿que más podía hacer? Le prometí ser feliz y cuidar de todos, en ese momento dejo de respirar, fueron momentos muy duros para todos, nunca voy a olvidar el brillo de sus ojos tan parecidos a los míos reflejarse en mi mirada por última vez.

Mis padres discutían mucho, lo recuerdo, él le reclamaba por un hombre y ella se defendía diciendo que nunca lo había engañado, sin embargo... bueno ya saben lo que paso.

Aún recuerdo el día en que nos dejó, yo habré tenido unos 10 años y mi hermana Prim unos 6. Estaba en el bosque con mi mejor amigo, Peeta...

Y mi amor por ti, aquí perdurara-Primera temporada (FINALIZADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora