Kasia.
Todo estaba tan oscuro que apenas alcanzaba ver hacia donde iba, lo único que escuchaba eran mis pesados pasos rompiendo ramas secas en el suelo y mi respiración agitada al correr.
El brazo me sangraba demasiado y la pierna me dolía con cada zancada que daba, las lágrimas impedían que viera el camino y la sensación de ser perseguida no me dejaba en paz un solo segundo.
Corría y corría por el bosque tratando de huir de lo que fuera que me estuviera persiguiendo, tratando de encontrar una salida a este maldito laberinto del infierno, pero parecía que estuviera dando vuelta en círculos, todo parecía igual.
Me detuve sin poder seguir más, la pierna parecía que dejaría de responderme en cualquier momento y los pulmones me ardían pidiendo a gritos poder tomar aire.
Debía parar, aunque eso me costara la vida, porque seguir era algo que mi cuerpo en este estado físico no me iba a permitir más.
El aterrador ruido de unas ramas ser quebradas detrás de mí invadió todos mis sentidos poniéndome en alerta, sujetándome del árbol a mi lado volteé tratando de ver quién me seguía, con mis manos temblorosas limpié mi rostro lleno de lágrimas e intenté ver a través de la oscuridad que invadía el bosque.
No veía nada sin embargo cada parte de mi cuerpo me gritaba que corriera, que estaba en peligro y que si seguía en ese lugar terminaría muerta.
Así que ignorando cualquier dolor intenté avanzar pero algo en el suelo me hizo tropezar y caer, debajo de mi cuerpo había algo, mis manos sentía algo suave.
___¡¡¡¡Ahhhh!!!!___grité con horror al comprobar con mis ojos que lo que tenía debajo era un cadáver, y no cualquiera, era Iker.
Había sangre por todo su cuerpo, sobre todo en su cuello, y sus ojos estaban aterradoramente abiertos, gritando retrocedí arrastrándome hacia atrás con mis manos, más lágrimas salían de mis ojos.
Y todo fue peor cuando del árbol colgaba Isabela, sin vida, con una soga alrededor de su cuello.
___¡¡¡Ahhhh!!!___grité sin parar hasta sentir mi voz abandonarme.
___Noo___grité al sentir como mi cuerpo se abalanzaba hacia el frente.
___Tranquila Kas, fue solo un sueño___me dijo Iker sobando mi espalda, la camioneta en la que veníamos había frenado de repente haciendo que mi cuerpo se fuera hacia adelante, pero Iker me había sostenido antes de que me lastimara.
Tardé unos segundos en darme cuenta que aquello había sido una horrible pesadilla, que Iker e Isabela seguían vivos y que estábamos huyendo en una camioneta de un desconocido.
Isabela estaba sentada al lado de Iker mirándome con miedo mientras que en la mirada de Iker solo había preocupación.
___¿Qué pasó? ¿Ya hemos llegado?___ dije al tomar el control de mis sentidos nuevamente y haber salido de ese shock en el que me dejó esa pesadilla tan aterradora.
___Si, esta es la gasolinera más próxima___dijo Iker poniéndose de pie y ayudando a Isabela a bajar de la camioneta.
Mis ojos divisaron justo a nuestro frente una gasolinera, ya estaba amaneciendo por lo que no había muchas personas más que los mismos trabajadores del lugar.
Me puse de pie y caminé hacia el final de la camioneta, Iker desde abajo me tomó de la cintura y me ayudó a bajar evitando lastimar mi pierna herida que seguía doliendo pero menos que antes.
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Eres tú
ActionMi nombre es Kasia Müller, tengo veinticuatro años y soy alemana. Pertenezco a una asociación llamada Elite de la cual muy pocos conocen y que se ha convertido en mi trabajo desde que tengo dieciocho, aunque fui educada por el líder lo cual convirt...