HUIDAS Y MENTIRAS (#1)

29.

"'Cause our traitors never win"

THIAGO.

—¿Ya has investigado algo sobre lo que te pedí? —inquiero apenas lo veo entrar a la sala de entrenamiento, los encargados de hacer el servicio debieron dejarlo entrar cuando se marchaban. Mis cejas se arquean esperando que el italiano me responda y mientras eso sucede sigo pegándole al saco de boxeo—. Sabes lo importante que es esa información para mi.

—Lo es —concuerda mirando a punto blanco de la pared, le da una calada a su cigarro y automáticamente se viene a mi mente cierta castaña que estaría frunciendo el ceño con solo aspirar el olor—, por eso mismo estoy aquí. Y debo confesarte, mio amico, que cada día me sorprenden las casualidades de la vida.

Me limpio el sudor que escurre en mi frente con el dorso de la mano.

Lo veo negar la cabeza antes de volver a seguir mi rutina.

—En el transcurso de los años he aprendido a las malas que nada es una casualidad —le recuerdo—. ¿Qué encontraste? Por la cara que tienes me afirma que no es nada bueno y si la información relaciona a Grace Blythe todo se vuelve peor.

—Me temo que lo es —sisea. Siento como enfoca sus ojos verdes en mi, trato de no prestarle tanta atención a su silencio prolongado. No sé si lo hace a propósito, pero estoy empezando a desesperarme y comienzo a considerar que si el guante se desvía a su rostro en lugar de dar contra el saco podría motivarlo a hablar—. Solo dime, ¿por qué sigues confiando en la OSSMIC si han demostrado ser una organización llena de bastardos mentirosos con intereses propios?

—No todos son así. —Me atrevo a defender a las pocas cabecillas que son dignas de estar en la milicia—. Mi padre nunca fue como ellos, Quincey.

—Sin embargo, cometió el error de confiar plenamente en ellos. —Me recuerda, utilizando cierto tono rígido—. Jerome esta donde esta por su culpa y lo sabes, entonces te vuelvo a preguntar ¿por qué sigues trabajando para ellos?

—Tu lo has dicho —espeto cortante. Hablar sobre su muerte es tocar una fibra sensible, me afecta tanto el tema que opto por colocarme inmediatamente una máscara de hielo—. La OSSMIC nos ocultó muchas cosas y si estoy cerca de ellos es para vengar la muerte de mi padre.

Mis movimientos incrementan a tal punto que mi adrenalina me supera. Ejerzo más fuerza contra el saco, desquitando todo el dolor que me envuelve al nombrarlo. La herida sigue abierta aún con tanto tiempo transcurrido. La muerte de un ser querido es algo que jamás se supera, se transforma en un inmenso dolor que nunca logra irse del todo, sino que es aquello que terminas aprendiendo a sobrellevar porque terminas aceptando que no volverá.

—Lo mismo sucede con mi lugar en la élite, solo formo parte de ella para ganarme mi reputación como el cazador de la mafia —menciono antes de que él tenga la intención de hacerlo—. No soy el bueno en esta historia ni lo seré si busco vengarme yo mi mismo.

—Y dudo que tengas intenciones de cambiar de parecer. —Alza la cabeza, pidiéndome que lo siga. El humo que brota logra alcanzar mis fosas nasales cuando camina por mi lado, definitivamente Claire ya hubiera apagado ese cigarrillo sin importarle un carajo de quien se tratara—. No vas a creer lo que encontré, Hux.

Una última ronda de golpes y doy por finalizado el entrenamiento. No realizo la rutina completa. Por la mañana ni siquiera tenía ánimos de abandonar la cama y me costó mucho levantarme. Cuando creí que la resaca sería lo único que arruinaría mi día, decidí tomar mi móvil para distraerme del dolor mientras los remedios hacían su efectividad y me encontré lo peor en las redes sociales.