𝕯á𝚖𝚊𝚜𝚘 [También en Inkitt]

[38] 𝙲𝚛𝚎𝚎𝚛 𝚢 𝚐𝚊𝚗𝚊𝚛

[𝚃𝚊𝚛𝚎𝚔]

—Buenas tardes, compañero de juegos —saludo al lobo nada más cerrar la puerta que da al sótano. Conforme bajo me voy poniendo los guantes negros, observándolo desde mi posición y claramente su temple no durará demasiado. Mi mirada se queda en la bandeja vacía—. Vaya... ¿te lo has comido todo cómo un cachorrito bueno?

—Estaba vacía...

—Claro que estaba vacía, pero seguro que en tu mente te imaginabas un banquete delicioso y privado. Sin embargo... —Salto los últimos escalones, yéndome directamente hacia él para quedarme de rodillas—... esto es la realidad. Y en la realidad no comes si no me das la información que quiero. Lo entiendes, ¿verdad?

El lobo gruñe un deje bronco y cascado. A lo sumo le he dado un poco de agua y cada dos días un trozo de pan. Nada más.

—Bien, ya sabes la pregunta a la que quiero obtener respuesta. ¿O te la tengo que recordar?

Vuelve a gruñir de la misma forma, a lo que yo le pego un bofetón para callarle.

En nuestro mundo, hay tres clases de sangre: 

• La primera habla sobre un componente genético que está centrado en las aptitudes física, pero no las intelectuales. Los lobos en esta categoría suelen quedarse en la categoría de Delta, ya que los rangos superiores a este son más exigentes. Es por esa razón que las manadas tienen muchos más Deltas, Gammas y Sigmas que Betas; aparte de machos comunes.

• La segunda habla sobre el mismo componente pero con una variante, el cual genera normalmente un pequeño extra al lobo. El porcentaje no es tan bajo como la última categoría, pero tampoco tan alto como la primera. Aquí es donde los Betas destacan. Suele deberse a que poseen una cualidad física sobresaliente a los de la primera categoría, tanto que no se le puede igualar; está implícito, sale natural y con poco esfuerzo. Normalmente se achaca a una fuerza hercúlea, una agilidad felina pese a que seamos enormes y pesados, o se tiene la posibilidad de endurecer los músculos de la cara.

• La tercera, y última, es la más compleja. El porcentaje es tan pequeños que la separación entre Alfas y "categoría especial" puede deberse a una teoría que, en cierto modo, se pasa a la práctica. Son "potencialmente prometedores y con posibilidad de ser Alfas en el futuro". A primera vista esto puede sonar presuntuoso, pero es una realidad: Todos los lobos que quieran ser Alfas, deben de pasar unas pruebas muy concretas y presentar su fidelidad al Consejo. 

Ya sé que Keyth es de la tercera categoría, pero Dámaso es quien me confunde. Apesta igual que un Beta, pero al mismo tiempo tiene mucho potencial para ser un categoría especial como Rowen. 

Según mis investigaciones, Dámaso no es hijo biológico de ninguno de sus padres, sino que Dante lo adoptó de un Garden donde sólo ingresaban cachorros abandonados por madres humanas o solitarios de bajos recursos. Pero no hay nada. No he encontrado ninguna ficha de adopción, el Garden hace años que fue derribado para construir una guardería humana con un parque infantil, los pocos nombres que encontré como relevantes han desaparecido del mapa; y no entiendo por qué Bones quiere un escuadrón de Alfas. 

—Que te jodan... —murmura con voz ronca—. No te debo nada, poli de mierda...

Suspiro y descuelgo la porra del cinturón, dándome golpecitos en la mano.

—Está bien. Ya veo que eres un macho muy fiel y se enorgullece de tener su hombría intacta —paseo, dando pasos cortos para quedarme a su espalda. Puedo percibir la piel de gallina en su cuerpo desnudo y el vello erizándose, a lo que le susurro—: Pero... lo que tú no sabes es que yo no soy el poli bueno ahora mismo. Puedo ser muy, muy, muy malo... ¿Quieres qué te lo demuestre ahora mismo?