ʚ 𝐒𝐚𝐧𝐨 𝐒𝐡𝐢𝐧𝐢𝐜𝐡𝐢𝐫𝐨 ɞ

12.2K 550 40
                                    

Advertencia: ninguna

Estaba defraudado, dolido y ciertamente desanimado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Estaba defraudado, dolido y ciertamente desanimado. ¿Por qué? Es bastante sencillo: era su rechazo número veinte.
No entendía porque tenía tan mala suerte conquistando chicas, ¿qué tenía él de malo? Quizá era demasiado guapo para ellas y tenían miedo de tal vez ser la envidia de más de la mitad de mujeres que habitan en Shibuya. Sí, debía ser eso.

Y aunque intentara convencerse de ello, seguía sintiéndose fatal, en verdad ansiaba tener una bonita y duradera relación. ¿Es por que fue un pandillero reconocido en sus años jóvenes? Se supone eso les gusta a las chicas ¿verdad? ¡¿Qué había de malo en él?!
No importaba cuántas veces Takeomi y Benkei le dijesen que ya llegaría la indicada y que sólo tuviera paciencia. Ya había tenido suficiente.

Shinichiro ahora mismo iba a encontrarse con un viejo amigo que no veía hace un par de semanas, Fukiwara ________. Le vendría bien despejarse charlando con él, a lo mejor daba mejores consejos que ese trío de amigos. Siempre era agradable pasar tiempo con el de puntas blancas, era atento, tenía buenos temas de conversación y sobretodo era gracioso.

Analizando la situación de Fukiwara comparada con la de él, ________ tenía muchísima más suerte con las chicas, sin embargo jamás lo vió con una, ni siquiera lo escuchó hablar de algún interés en alguna. Cosa que en el fondo lo hacía enfadar.
El de ojos magentas tenía a decenas de mujeres babeando por él, incluso peleándose y ni siquiera tenía la vergüenza de voltear a verlas. Que envidia.

Definitivamente Dios tenía a sus favoritos.

Dejando el tema de lado. Había llegado al parque donde sería su reencuentro, estaba anocheciendo y el cielo estaba tintado de colores cálidos mientras el viento se volvía frío.
Debido a la hora el parque estaba prácticamente vacío, a excepción de una persona que estaba sentada en los columpios, no fue complicado para él distinguir que se trataba de Fukiwara observando los colores del cielo.
Se acercó con cautela por la espalda tomándolo por sorpresa de los hombros, haciendo que se sobresaltara y pegara un gritito.

─ ¡me asustaste, Shin! ─dramatizó llevando la mano a su pecho. El ojinegro soltó una carcajada.

─ lo siento, ________, te veías muy perdido ─trataba de reprimir las risas por la fulminante mirada de su amigo.

─ estaba pensando. Y como preguntes que si pienso te golpearé ─entrecerró sus ojos amenazante, el Sano volvió a reír─. Anda, ven y siéntate ─palmea el columpio vacío a su lado.

Haciendo caso a lo pedido, Shinichiro rodeo el asiento de metal para sentarse en él.
Como siempre la conversación fluyó de forma natural y agradable, como solía ser todo el tiempo en compañía de ________.

En algún punto de la plática empezaron a recordar aquellos agradables tiempos donde pertenecían a los Black Dragons, partiendo narices de un lado a otro. Claro, siempre y cuando se lo merecieran.
Para el pelinegro fue inevitable recordar cuando conoció a Fukiwara, le estaba partiendo la cara a unos sujetos luego de querer sobrepasarse con una chica de la cual no recuerda su nombre, ni siquiera su rostro, pero eso fue lo que le atrajo haciéndose su amigo. Ambos fueron fundadores de su amada pandilla, a pesar de haber abandonado aquel oficio seguían siendo muy buenos amigos.

________ se hizo cargo de algunos negocios familiares para apoyar a su padre que se encontraba en un mal estado debido a su edad. Esa fue la principal razón de abandonar el mundo de las pandillas.

Con el cigarro entre sus dedos dejó salir el humo que había inhalado hace diez segundos en un pesado suspiro llamando la atención del muchacho de ojos magentas.

─ ¿pasa algo? ─

─ ¿cómo puede ser posible que teniendo a tantas chicas detrás no puedes salir con una? ─la pregunta confundió un poco a ________.

─ ¿a qué viene eso? ─

─ hoy volvieron a rechazarme, con esta serían veinte veces. Te envidio y odio por ser tú y no tener una pareja teniendo tantas pretendientes ─dió una profunda calada a su cigarrillo.

─ pues se pierden bastante, eres un buen chico, Shin ─se balanceó un poco en el columpio, ignorando lo último que dijo su compañero.

─ ya lo sé, lo que no entiendo es porqué nadie quiere salir conmigo ─hace una mueca triste tocándose la cabeza.

─ tal vez las chicas no son lo tuyo ─soltó sin pensarlo mucho mirando al cielo ya oscuro, sorprendiendo al otro.

─ ¿hablas de salir con... chicos? ─pregunta aturdido cerciorándose de pensar lo mismo, el de puntas blancas no respondió─. Dudo mucho que pase, no creo que sea diferente. ─

─ yo lo haría. ─

Shinichiro volteó para mirarlo con sorpresa, topándose con la mirada magenta tranquila sobre él. Rió nervioso revolviendo su cabello.

─ hablo en serio. ─

─ yo también lo hago. ─

Hubo un corto silencio entre ambos donde el ojinegro pensaba en cómo sería una relación con ________. Si siendo amigos era un primor, ya podía imaginárselo siendo un meloso total teniendo a su pareja.

─ te propongo algo ─interrumpió los pensamientos del contrario ganándose su atención─: intentemoslo, si te gusta y te sientes bien ya sabes que hacer; sino, simplemente dejaremos el tema de lado y te buscaremos una bella damisela. ¿Qué te parece? ─sonríe con confianza al finalizar de relatar su maravilloso plan.

─ ¿contigo? ─

─ conmigo, dudo que Wakasa o Takeomi quieran hacerlo. ─

Pareció pensárselo. La idea le parecía algo tonta teniendo en cuenta que son amigos, por otro lado podría averiguar si es cierto lo que Fukiwara le decía y las mujeres no eran lo suyo.

─ podríamos hacer el intento. No se dañará nuestra amistad por esto, ¿verdad? ─

─ por supuesto que no, si no funciona seguiremos siendo buenos amigos ─eso en verdad relajaba a Shinichiro─. Entonces... ¿se podría decir que ahora somos una pareja? ─pregunta algo tímido, quería verse más firme pero claramente no salió como esperaba.

─ supongo que sí ─el pelinegro sonrió enternecido por la actitud de ________.

─ bueno, entonces, tengamos una cita. ─

─ ¿eh? ¿ahora? ─

─ sí, conozco un restaurante de ramen cerca de aquí que está riquísimo ─se mostraba más animado─. Vamos. ─

Se puso de pie esperando a que su "novio" hiciera lo mismo. Shinichiro sonrió. Tiró el cigarro al suelo y lo pisó para apagarlo, poniéndose de pie al instante para seguir al muchacho de característicos ojos magentas.
________ tomó su mano jalandolo aún sonriente. Fue turno del Sano de ponerse nervioso.

Su decisión de experimentar podría verse como si de verdad le urgiera tener una pareja. Pero es que no podía desaprovechar la oportunidad de intentar algo con quien alguna vez estuvo extrañamente enamorado.

Era increíble como después de tantos años ________ fue capaz de volver a encender ese amor que alguna vez sintió por él.

Era increíble como después de tantos años ________ fue capaz de volver a encender ese amor que alguna vez sintió por él

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Belttom_

𝐌𝐚𝐲𝐨 𝟐𝟎 𝟐𝟎𝟐𝟐

𝐎 𝐍 𝐄 - 𝐒 𝐇 𝐎 𝐓 𝐒 | 𝘛𝘰𝘬𝘺𝘰 𝘙𝘦𝘷𝘦𝘯𝘨𝘦𝘳𝘴Donde viven las historias. Descúbrelo ahora