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« Estaba sumamente nervioso, sus manos sudaban, su corazón bombardeaba con rapidez y sentía sus piernas temblar. Kokonoi le miraba atento, esperando aquello tan importante que tenía que decirle. Tomó un respiro profundo.
─ bien... ¿Qué tienes que decirme, Inupi? ─preguntó con calma, aunque por dentro se estaba impacientando.
─ quería confesarte algo, y- es que... me gustas, Koko, desde hace ya bastante ─el pecho le dolía por la potencia en que su corazón latía, mientras sus mejillas se teñían de un suave rosa.
Hubo pocos segundos de silencio dónde no se atrevió a levantar la mirada para enfrentarlo, la mudez del lugar se vió rota por una ligera risa por parte del azabache.
─ ay, Inupi, no me digas que creíste que podía enamorarme de ti ─sin duda era la reacción que menos esperaba.
Sintió vacío─ yo... ─
─ escúchame, yo no podría estar contigo. ─
─ pero- ¿y ese beso que me diste en la biblioteca? ─estaba conternado, de pronto su respiración se hacía pesada.
─ lo único que tengo de ti es el recuerdo de Akane, te besé porque me recordaste a ella no por que me gustaras. Así que grabate esto en la cabeza: jamás podría estar con un niñato tan inocente como tú. ─
Dió media vuelta sin decir nada más y se fue. Dejándolo con el corazón hecho trizas. »
El escenario no dejaba de rondar por su cabeza una vez tras otra sin parar, como un disco rayado. Y cada vez que lo recordaba más le dolía, más le pesaba en el pecho y sus ojos se llenaban de lágrimas mientras su nariz le picaba.
Iba de camino a casa de la única persona en la que podía confiar ahora, sólo quería llorar desconsolado y que alguien le dijera que estaría bien. Nunca se había sentido tan débil desde que Akane murió. No podía odiarla, ella no tenía ninguna culpa de que sus sentimientos hayan ido más allá de lo que estaba permitido, él sabía que era un riesgo confesarse, pero decidió arriesgarse pensando que tal vez podía suceder después de ese beso.
Koko tenía razón, era tan inocente e ingenuo.
Mordía su labio inferior reteniendo sus sollozos, no quería hacer una escena en la calle, suficiente con ir con lágrimas en los ojos. Afortunadamente no tardó en llegar a casa de ________ y se sintió aliviado, aceleró su paso ya ansioso por liberar toda esa carga emocional que viene ahogándolo.
Tocó con insistencia la puerta.
─ oh, hola, Inupi- ─frenó de golpe al ver su estado tan roto.
El rubio no respondió, sabía que si lo hacía su voz saldría rota y finalmente sus lágrimas caerían sin control. Por su parte, el ojimagenta borró su sonrisa contenta y atrajo al más bajo dentro del departamento. En silencio se dirigieron directo al sofá, sentándose uno al lado del otro.
─ uhm, ¿pasó algo, Seishu? ─pregunta por fin, preocupado.
El susodicho sin poder retenerlo más rompe en llanto, abrazándose con fuerza al torso del otro, escondiendo su rostro en su pecho mojando su camiseta. Su cuerpo temblaba después de cada sollozo, hipaba pero no hacía ningún ruido. Los brazos de Fukiwara le envolvieron en un cálido abrazo, reconfortante. Acariciaba su cabello y espalda con suavidad en forma de consuelo.
─ por favor dime, ¿qué tienes? quiero ayudarte ─pide, recargando su propia cabeza en la contraria.
─ me- me declaré a Koko... él sólo se rió y me dijo que en mí sólo ve a Akane ─gimoteó, aún dolido─. Que nunca estaría con un niño tan inocente como yo. ─
Su voz se quiebra y sus manos se cierran con más fuerza sobre su camiseta, volviendo a ocultarse y continuar llorando. También el abrazo se vuelve más firme, se siente protegido, pero eso no quita que se sienta tan destrozado.
El silencio reinó nuevamente entre ellos, sólo oyendo como sorbe sus mocos. Poco a poco se va calmando, concentrándose en el subir y bajar del pecho de su amigo que no ha parado sus caricias.
─ ¿por qué? ─preguntó al aire, confundiéndolo por un momento─ ¿por qué no me haces caso a mi? A mi me gustas desde que éramos niños ─confesó en un murmullo.
Inui abrió los ojos con sorpresa a la par que un calor invadía su rostro. Permaneció en su lugar, asimilando lo que ________ acaba de decir. ¿Pensaba que se había quedado dormido? Pronto siente que un beso es depositado en su cabeza con delicadeza. La calidez brota de su pecho, la diferencia entre los dos es muy notoria.
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Sólo paso a decir, que buscando imágenes de Inupi me recordó muchísimo a Shoto jsjs. Estoy un poco como Koko, él viendo a Akane y yo a Todoroki. Pobrecito mi Seishu :( Belttom_ ♡
𝐉𝐮𝐧𝐢𝐨 𝟓 𝟐𝟎𝟐𝟑
Pd. Puede que más tarde publique otro, haré un esfuerzo pero no prometo nada. Pd2. El secreto de hoy:
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