Jurassic World (Dinosaurios&Tú)

77- Volver a ser yo

Narra ___:

-Has perdido la cabeza, finalmente- oí del otro lado del teléfono. Inconscientemente sonreí.

-¿Te sigo sorprendiendo, a esta altura?

-___, el uso que estás haciendo de la fórmula ya es lo bastante arriesgado y experimental, lo suficiente como para que cualquier científico se horrorizara. Yo estoy tomando ese riesgo por ti porque es algo que ya hice una vez, pero esto que me estás pidiendo es imposible.

-Mi madre estuvo expuesta a los químicos unas pocas horas durante el incendio de los laboratorios- intenté deducir- y tuvo una transformación completa.

-Porque ya tenía el suero en su sangre, los gestó a tu hermano y a ti.

-¡Yo también tengo el suero en mi sangre!- insistí- ¿No te acuerdas eso que me explicaste sobre  cómo no se puede cambiar el ADN, los fenotipos y genotipos y todo ese palabrerío...?

-Lo que le pasó a tu madre fue una tragedia, y una reacción descontrolada del químico- declaró Hyding, firme pero nervioso- intentar replicarlo sería jugar con fuego y meter las manos de lleno para quemarse. No voy a hacerlo.

-Hyding... Edward- me corregí- no te lo estaría pidiendo si no fuera de vida o muerte. Tengo la posibilidad de salvar a mi hermano, pero tiene que ser en estos días. No tengo tiempo de esperar tres meses a que la transformación esté completa. Y así como estoy ahora, inválida, no puedo hacerlo. Creo... creo que puedes entender como me siento.

Un silencio largo en la línea.

-No puedo dejar que muera- continué yo- debo hacer todo para salvarlo. Aún si en el proceso me pongo en riesgo a mí misma, que ya lo estoy haciendo ¿Qué más da jugársela un poco más?

Más silencio. 

-¿No harías tú lo mismo si pudieras salvar a tu hijo?- no soy de dar estos golpes bajos, pero no puedo rendirme, no cuando estoy tan cerca- ¿No harías cualquier cosa?

Un suspiro del otro lado. Finalmente, la voz del científico.

-Cómo voy a arrepentirme de esto...

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El cielo hoy está claro y celeste, casi como si no hubiera un volcán a punto de estallar a sólo kilómetros. Por suerte, ese es destino para otro día, dentro de muy poco, espero. Tengo la sensación de que puedo tocar el celeste del firmamento con mis manos, claro, eso no es muy difícil considerando que estoy sobrevolando el océano, un poquito más cerca del cielo que de costumbre. 

Aprecio el paisaje un poco más, mientras dure. Hoy no habrá más cielos celestes ni mares azules. 

Hoy toca descender hasta el infierno.

"-¿Cómo lo haremos?

-Dame unos días.

-No tengo días para ofrecerte, Hyding.

-Dos. Dos días.

-¿Y una vez que hayan pasado? ¿Nos encontramos en tu laboratorio, o...?

Una risita nerviosa del otro lado del teléfono. Me recorre un escalofrío.

-No, ___, esto no es un simple suero. Para hacer todo esto de manera rápida, debemos recrear las condiciones en las que tu madre se transformó.

Fuego, gases, una explosión. Me estremezco. Todavía puedo echarme atrás.

-¿Y en dónde hacemos eso?- pregunto.