41- La última Raptora en pie

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Narro yo:

Claire corrió con dificultad, una idea en su cabeza y esperanza en su cuerpo. Tal vez así lograría compensar el daño que había hecho, o alguna parte de él. Sólamente sabía que, si no llevaba a sus sobrinos de vuelta a casa, jamás podría volver a descansar.

Ni siquiera muerta, pensó, y aceleró su carrera.

Una vez frente al portón de la jaula, se comunicó con el joven de informática.

-Abre la jaula- ordenó, intentando que su voz sonara firme.

-Claire... ¿Estas segura?

-¡Por Dios, sólo se un hombre una vez en tu maldita vida y abre la jodida jaula! -gritó ella, antes de que las dudas disiparan su plan.

Y entonces, cuando oyó el sonido que alertaba a todo el parque que la bestia estaba por liberarse, abrió la maleta qje llevaba y encendió una de las bengalas.

La alzó hacía el cielo mientras su luz comenzaba a iluminar unos ojos feroces que acechaban en la oscuridad, a paso lento.

Cuando lo tuvo cerca, con el corazón a mil, Claire comenzó a correr.

Mientras el Tiranosaurio Rex la perseguía, Claire deseó no haber llevado tacones.

Narra Owen:

Los ví caer uno a uno. A Delta la atravesó con sus colmillos y lanzó hacia un ventanal cercano. Me alejé con los sobrinos de Claire de esa escena.

Entonces se puso peor.

Narra ____:

Echo, Delta y Charlie estaban muertas. Sólo quedábamos Blue y yo, mi particular hermanita menor. ¿Cómo habíamos llegado a esto? Hasta hace unas horas anhelaba encontrarla, recordaba sus momentos de pequeña lagartija, sentía que debía cuidarla de todo mal. Y ahora... ahora ella se lanzaba a garras abiertas contra el enemigo. Ahora ella también me protegía. Ahora éramos iguales.

Le dirigí una mirada en medio del terremoto y, en unos minutos que em I-Rex se tomó de recreo tras librarse de nosotras, pude intercambiar algunas palabras con ella.

-Sólo quedamos nosotras- dije, observando la amenaza blanca que volvía al ataque.

-Los de tu especie arruinaron a los míos- dijo, con un lenguaje rudimentario pero claro.

-Soy de tu especie, Blue- respondí- Rex también. Y nosotros arruinamos tu vida sin quererlo.

No parecía prestarme atención.

-Debo salvarlo- declaró, y miró en dirección a la recuerdería- él es el motivo por el que no quiero vengarme. Él es nuestra revancha. Un humano con humanidad.

Sospesé sus palabras y supe que, de no ser porque un inoportuno meteorito acabó con todo, los raptores serían la especie dominadante, y nosotros nos reduciríamos a unos simples simios.

-Al ataque, entonces- repliqué- por los humanos con humanidad.

Nos lanzamos sobre el Indominus, una a cada lado. Todo pasó en una fracción de segundo. El animal se sacudió y me encontré cayendo al vacío.
Luego, un golpe duro. Muchos mas golpes. La herida me ardía junto con miles más.

Oí el rugido de la última raptora en pie, y luego, oscuridad.

Narra Owen:

Blue y ____, con un rugido cono estandarte, se lanzaron contra el animal. Eran dos. De cien kilos cada una. Luchaban dispuestas a dejar sus vidas.

Él era uno. Pesaba veinte veces más que ellas dos juntas. Luchaba para matarlas, y para eso había sido creado.

En un movimiento extrajo a ____ de su cuerpo y, con un latigazo de su cola, la catapultó contra los escombros. Temblé con los ojos posados en la destrucción. Ella no se levantó.

Y luego siguió Blue. Mi Blue. Como si ee una pulga se tratara, el Indominus la recogió de su lomo con los dientes y la lanzó hacia el vacío.

La perdí en la esquina, asomando la cabeza por la ventana como un imbécil.
El I-Rex clavó sus ojos inyectados en sangre sobre nosotros.

-Atrás- le murmuré a los niños- ¡Atrás!

Jurassic World (Dinosaurios&Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora