47- La camilla que se pierde al final del pasillo (parte 1)

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Narro yo:

Andrea, Billy y Cristina llegaron al hospital minutos después. Era un centro de salud importante, y se habían dedicado a atender a los recién llegados de Jurassic World. Por los pasillos repletos desfilaban familiares nerviosos, heridos leves y camillas vacías y llenas.
Los murmullos y gritos de los médicos y pacientes invadían el ambiente y Andrea recordó con ansiedad uno de sus casos mas terribles: el atentado de las torres gemelas. Desbordados de víctimas, la habían mandado a atender un hospital y comunicar las malas noticias. Nunca olvidaría el sonido de la tragedia, que no había sido el golpe del avión contra las torres, sino los llantos de los familiares al reconocer el cuerpo.

Se estremeció al sentir un dejavú en aquel hospital, donde su amiga se tambaleaba entre la vida y la muerte.
Los tres amigos avanzaron hacia el mostrador, rompiendo con la multitud.

Andrea decidió que ella llevaría la delantera.

-Señora, disculpe- le dijo a una secretaria muy ocupada, que estaba al teléfono y anotando datos en la computadora a la vez.

-Sí, está aquí. No, no podemos confirmarle su estado, lo siento- la mujer hablaba al tubo- señor, por favor, tranquilícese. Tenemos ingresadas a cuatro mil personas en un hospital con la capacidad de la mitad. Y no sólo estan llegando aquí los heridos...

Andrea comprendía que estaba ocupada, pero en su situación le importaba poco.

-Señora, es un momento, por favor- la mujer la fulminó con la mirada y terminó de hablar por teléfono, para después teclear algo en su computadora.

-¿A quién buscan?

-Queremos saber si tienen a _____ Hammond ingresada.

La mujer soltó la computadora y se bajó los anteojos.

-¿Ah, o sea que no saben siquiera si está aquí? No estoy para hacerle los mandados señorita, averiguarlo usted.

Si Andrea no solía ser paciente bajo presión, ahora estaba rompiendo records.

-Es una mujer de cabello castaño, ronda los veinticinco. La ingresaron con una herida de bala en el abdomen, venía del parque...

-Tenemos miles de ingresados, no podría reconocer unos de otros.

-¿Hay muchos heridos de bala proveniente de un parque de dinosaurios?- increpó la agente, perdiendo la paciencia.

-Más de los que cree.

Cristina, que temblaba bajo los brazos de Billy, de repente recuperó sus fuerzas. Eran miles, pero el caos sólo permitía singularidades. Y ella era experta en singularidades.

-¡Billy, allá!- Cristina señaló una camilla perdiéndose en el pasillo, llevada por dos médicos.

En ella, una mujer pálida e inconsciente era trasladada.

Era ____.

Los amigos habían emprendido la carrera a través de la gente cuando Cristina frenó en seco.

Los médicos llevaban la camilla con parsimonia, como si se tratara de un cortejo fúnebre. No llevaban ni sueros ni material quirúrgico. Solo una camilla con una joven destrozada.

Y entonces, uno de ellos los descubrió observando, y con ojos de pena, alzó la sábana que cubría a ____ y la tapó hasta la cabeza.

Todo pareció ocurrir en cámara lenta. Cristina cayó de rodillas con un aullido lastimero mientras que Andrea se llevaba las manos al rostro, incrédula, paralizada. Y Billy... Era la primera vez en su vida que no tenía nada para decir.

Mientras el mundo seguía su curso, acelerado, fugaz, los tres amigos mantuvieron su mirada firme en la camilla hasta el último segundo. Debían grabarla en su mente, aunque fuese ese recipiente vacío que era su cuerpo.

Cuando esta cruzó las puertas del fondo del pasillo y se perdió para siempre, los tres amigos se fundieron en un abrazo.

Jurassic World (Dinosaurios&Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora