One Shots- Famosas y Tu

Melissa Benoist

-Narras tu-

estaba en mi casa viendo una película, hoy podía descansar sin hacer nada y eso planeaba hacer, tenia un par de días libres durante el rodaje de la tercera temporada de Supergirl en la que participaba ya que mi personaje se encontraba en el hospital y aun no se sabia si iba a sobrevivir por un par de capítulos, por lo que no tenía que grabar los siguientes días.

El sonido de varias notificaciones saturo mi teléfono por lo que lo tome para revisar que pasaba y al entrar a Instagram me encontré con varias fotos donde estaba junto a Chyler besándonos, vaya la velocidad con la que se difunden las fotos y teorías es increíble.

Dejé mi celular a un lado, no tenía caso contestar ningún comentario o foto en donde se me etiquetaba ya que pronto la mayoría de las teorías que recorrían la red se vendrían abajo por lo que decidí seguir viendo la película.

Había pasado cerca de una hora cuando alguien toco mi puerta, no quería pararme por lo que solo grite. - ¿Quién?

-soy yo, Melissa.

-está abierto, pasa.

Mel entro a la casa, pero se quedó parada junto a la puerta cerrada. - Hola Mel, ¿Cómo estás?, ¿Qué te trae por aquí?

-algo triste y quería venir a verte.

Melissa seguía sin moverse, pero su tono si sonaba triste, ¿Qué habrá pasado?

-ven, siéntate conmigo. - di unos cuantos golpes en el sillón cerca de mi para que se sentara y pudiéramos platicar. Mel se acerco y se sentó encima de mi con cada pierna a un costado de mi abrazándome por el cuello muy fuerte y escondió su cara en mi cuello, no me dio tiempo de decir nada y solo la abrace por su cintura para que no se cayera, aunque como me estaba abrazando dudo que eso pasara.

- ¿Qué pasa Mel? - Pasaron varios minutos y ella no me respondía y por mas que yo giraba mi cabeza para tratar de verla ella no sacaba su rostro de mi cuello.

-Mel, me estas preocupando, ¿Qué tienes?, habla conmi...- comencé a sentir como gotas de algo corrían por mi cuello y el pecho de Mel comenzaba a moverse muy rápido, estaba llorando. - ¿Por qué lloras cariño? - frote mis manos en su espalda para confortarla y pudiera dejar de llorar.

-es que... es por...- comenzó a hablar pausadamente por sus sollozos, no dije nada hasta que terminara de hablar. - es tu culpa, estoy tris... triste por t... por ti.

No sabia que pasaba, que yo recuerde no le había hecho nada, pero por ahora lo mejor era no decir nada, solo tratar de calmarla, seguí acariciando su espalda y comencé a dejar besos en su frente meciéndola un poco. - shh shh shh. - después de un par de minutos dejo de llorar y sentí que la presión de su abrazo disminuía, pensé que quizá podríamos hablar.

- ¿ya te sientes mejor? - asintió con su cabeza. - ¿quieres hablar? - silencio. - ¿quieres que te baje? - negó un poco con su cabeza.

-esta bien Mel, entonces... ¿te quieres quedar así un rato más? - no me contesto, pero me volvió a abrazar fuerte y escondió de nuevo su cabeza en mi cuello, parecía una niña pequeña. - está bien entonces no diré nada. - la película que estaba viendo aun se estaba reproduciendo por lo que tome el control aun lado de mi y apague la televisión y volví a poner mi brazo en la espalda de Mel para acariciarla.

No sabía cuánto tiempo había pasado, pero me sentía somnolienta, el sentir el calor del cuerpo de Mel, junto con las caricias que le hacia a su espalda comenzaron a provocarme sueño, sentía que Melissa respiraba muy bajito, al parecer se quedo dormida, tal vez el llorar la canso, sentía que mis parpados pesaban y recargue mi cabeza en el respaldo del sillón tratando de no quitar mis manos de Mel para que no se cayera.