⌞𝓛𝓮𝓿𝓲⌝
Año 852
Pase mis manos por la madera vieja y dañada. La humedad, el polvo, los años afectaron este pequeño cuarto. Por mucho tiempo, lo vi como el lugar más grande y asombroso del mundo.
Abrí la puerta donde se guardaba la comida más común en esos primeros años: avena. Amaba la avena en ese entonces. Lo único que nos alcanzamos a comprar con lo poco que ganaba ella.
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Me agarró de la cintura para impulsarme. Alcancé la bolsa con avena y me dejó en el suelo. Este era mi aporte en la preparación del desayuno porque no me dejaba usar la cocina.
—¿Cuándo podré hacerlo solo?—pregunté subiéndome a la silla.
—Cuando tengas el tamaño de un poste—dijo ella con un tono risueño.
—Falta mucho para ese momento. Cuando tenga el tamaño podré pelear contra todos los malos. —Lancé puños al aire, luchando contra un enemigo invisible. Mi mamá me tomó de las manos para detenerme.
—Prométeme que nunca vas a pelear. —Frunció sus cejas y la sentí preocupada—. No quiero que algo te pase...
—Lo prometo.
֍
Le mentí. Terminé siendo un soldado. Lo siento, mamá, falte a mi promesa.
Salí del cuarto abandonado y prendí un cigarro. Desde que Shadia se fue no he dejado de fumar. Tres cajetillas a la semana. No dejo de escuchar su voz en mi cabeza diciendo que está mal. También escuchó su voz diciendo que ella lo hacía y está bien.
Se supone que dejé de hacerlo porque así no la orillaba a recaer en una adicción pasada. Con ella lejos no era necesario.
Han pasado dos meses desde que mi esposa se fue dejándome solo una carta y muchas preguntas. Quería verla y preguntarle por qué hizo todo eso, qué es lo que necesita, qué puedo hacer para ayudarla.
Me he sentido culpable de su partida y no entiendo qué hice mal... Esta es la etapa en la que me culpo.
Caminé hasta llegar al hospital. La gente me conocía por Shadia y me tenían respeto por ella. En este momento, eran conscientes de que su jefe era yo. Recibí varios saludos que respondí con un leve asentimiento de cabeza. No podía perder mucho tiempo. Estaba llegando tarde a la reunión.
—Tardaste demasiado—dijo Michael abriendo su portafolio—. Empecemos, ¿tienes pluma?
—No lo haré—dije sentándome en el sitio del director del hospital.
—A ver, quedamos en que firmarías para cederle este lugar a Ethan Aleek porque tú lo pediste—dijo Specter con un poco de molestia—. ¿Qué sucedió?
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Dɪsʀᴜᴘᴛɪᴠᴇ Cʜᴀɪɴs ✥ Lᴇᴠɪ Aᴄᴋᴇʀᴍᴀɴ
Fiksi Penggemar3° ᴘᴀʀᴛᴇ ᴅᴇ ʟᴀ ᴛʀɪʟᴏɢɪᴀ ꜱᴀɴɢᴜɪɴᴇᴍ ʜÆʀᴇᴅɪᴛᴀᴛᴇᴍ • 𝙎𝙤𝙮 𝙚𝙡 𝙫𝙚𝙣𝙚𝙣𝙤 𝙙𝙚 𝙡𝙖 𝙝𝙪𝙢𝙖𝙣𝙞𝙙𝙖𝙙. 𝙎𝙤𝙮 𝙡𝙖 𝙘𝙪𝙧𝙖 𝙙𝙚 𝙡𝙖 𝙝𝙪𝙢𝙖𝙣𝙞𝙙𝙖𝙙. 𝙎𝙤𝙮 𝙪𝙩𝙞𝙡𝙞𝙯𝙖𝙙𝙖 𝙥𝙤𝙧 𝙡𝙖 𝙝𝙪𝙢𝙖𝙣𝙞𝙙𝙖𝙙. • Los doctores... ¿Qué somos? ¿Servim...