¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
La prensa jamás estaría de acuerdo de que mataran a su ángel, a su única salvadora. Ellos no sabían a donde me había ido, ahora no les importaba, lo que querían era que me quede.
Las manos de Ethan limpiaban las heridas que tenía. Mi mano libre acariciaba mi abdomen inflado que resguardaba al niño que estaba creando. Mientras él siga vivo, todo estará bien.
—¡Instructora Shadia!—dijo Historia después de que abrieron la puerta para dejarla pasar—. Lo lamento mucho. Tuve que alejarme porque me lo pidieron. Debí suponer que era para hacer esto a escondidas de mí.
Me abrazó con fuerza. El moño la hacía ver más seria de lo que es. Es bonito saber que aún mantiene cierta inocencia de los años que más disfrutó. Parecía ser ayer cuando la vi llorar después de leer la carta de Ymir.
♕
—Es un gusto por fin conocerte—dije abrazando la rubia—. Me han dicho tantas cosas de ti y...
—Hay que evitar la hipocresía. —Al parecer toda felicidad abandonó su cuerpo hace mucho tiempo—. Sé que tienes que verte bien ante la mujer más fuerte que existe en el mundo.
—No, eso no es lo que intento, señorita...
—¡Shadia!—me llamaron, obligándome a voltear. Era el rey. Hice una reverencia, cuando se acercó— No hace falta, quería hablar sobre su apellido.
—Lo tengo, será Veenstra.
—Grandiosa elección. ¿Qué significa?
—Es por...
♕
Historia se alejó. Me hubiera gustado saber más. Vi al castaño preocupado por mí. No hacía falta. Si Historia estaba aquí, nada pasaría contra mí. "Confía en Historia, confía en mí". Sí, ella era una aliada, ¿de qué? No lo sé. Créanme que mis teorías son tan extensas y sin sentido como las de ustedes.
—No es tu culpa—dije frotando su espalda, se separó.
—Encima está embarazada. —Arrastró una silla para sentarse a mi lado—. No se preocupe que pedí que trajeran a sus hijos. Son unos niños preciosos.
—Lo sé. Juntos hacen un buen equipo para sacarme de quicio a veces. —Historia soltó una risa, miré a Ethan—. ¿Puedes traerme café?
—Estás embarazada. Tomarás té—dijo Ethan, chasquee la lengua. Es lo malo de conocer a doctores—. Vuelvo en un rato, nos vemos, diosa, su alteza.
—No sé cómo pueden decir que esos niños no son del capitán Levi—dijo cuando nos quedamos solas—. Sunna es su vivo retrato, aunque admitiré que Kore tiene el genio de su padre.
—Es porque no has visto a Sunna recién despierto. —Miré por la ventana al público que no quería irse. Seguro esperaban a verme salir viva o muerta—. Quiero ver a mi escuadrón.