━━━𝐂𝐀𝐑𝐄𝐋𝐄𝐒𝐒 𝐖𝐇𝐈𝐒𝐏𝐄𝐑
━━━🧸🎧🍄ANDY HARRINGTON, la hermana pequeña del famoso Steve Harrington, se ve involucrada desde el año 1983 en una aventura algo peligrosa junto a un grupo de edades diferentes que les seguirá durante demasiado t...
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━━━━EL DÍA ANTERIOR A HALLOWEEN, Andy estaba algo nerviosa. La noche anterior, al volver del concierto de Ataúd Corroído, tuvo que terminar un trabajo de Historia que había dejado para última hora. Acabó de madrugada y eso le había pasado factura: ahora tenía unas ganas de dormir que podían con ella y unas ojeras que había tenido que tapar con un poco de maquillaje para no lucir igual que un zombie.
Ella no era una chica irresponsable en el tema de los estudios, pero definitivamente no era la chica que mejores notas sacaba. Era una estudiante promedio que solía hacer los trabajos algo tarde porque siempre pensaba que todavía tenía tiempo.
Estaba claro que eso no siempre acababa saliendo bien.
—¿De qué es ese maldito trabajo? —Preguntó Dixie, que le había recogido esa mañana para ir al instituto, pues Steve se había marchado antes a casa de los Wheeler.
Habían aparcado en el aparcamiento que había justo frente al instituto de Hawkins y Andy no paraba de hablar en voz baja repitiendo lo que tenía que exponer ante toda la clase. Otra cosa que había restado horse de sueño la noche anterior fue el estudiarse de memoria ese mismo trabajo, pues también había una exposición.
—De la caza de brujas de Salem —Respondió suspirando—. Sé que yo fui la que eligió el tema del trabajo, y seguramente estaría aún más nerviosa si tuviera que hablar sobre algo que no entiendo, pero es que el profesor Higgins es tan estricto y yo he hecho este trabajo con tan poco tiempo que estoy cien por cien segura de que me va a humillar delante de todos.
—Bueno... siempre puedes decir que... no sé —Dixie lo pensó bien, colocando un mechón de su corto cabello (le llegaba por encima de la mandíbula)— que te has quedado afónica o algo así.
Andy la miró frunciendo el ceño.
—¿Pero qué dices?
—¡Sí! Estás mala y te duele tanto la garganta que no puedes hablar.
Andy no pudo evitar reír un poco y negó con la cabeza para después pasar sus dedos por las sienes para intentar calmarse.
—No, qué va. Tengo que lidiar con esto y asumir las consecuencias de mis actos. Quién sabe, si me ridiculiza ante toda la clase eso podrá hacerme aprender para la próxima vez.
—Ese hombre es un cabrón. No se merece ridiculizar a nadie.
—Tengo la teoría de que le odiaban en el instituto y que quiere vengarse de eso con nosotros —Murmuró Andy guardando su hoja donde había escrito la redacción en su bandolera—. Pero ya no puedo darle más vueltas.
