NUESTRO CAMBIO | Kookjin

Veintitrés

Después de cenar, Hana se había ido a su habitación dejando a jungkook y  seokjin solos terminado el proyecto.

Ambos sentados uno al lado de otro, con su laptop, terminando su parte.

Seokjin formaba un triangulo con sus muslos sentado cómodamente, ya el castaño esta por terminar sus diapositivas volteó a ver al azabache este estaba rígido sentado mantenía una posición bastante tensa por lo que seokjin comenzó hacerle un masaje en el cuello, sintiendo como poco a poco el estres que jungkook acumulaba en los músculos de la parte superior de la espalda se iba disminuyendo y el azabache iba dejando la incomoda posición en que estaba dejo recaer la cabeza en el sofa cerro su Mac y suspiro de tranquilidad.

— He terminado, Kim — dijo el azabache.

— ¿Sí?, bien Jeon. — respondió el castaño.
— Mmh si —
— Gracias, Jeon — dijo el castaño.

Jungkook se volteó para ver a Kim,  ahora los dos estaban sentados mirándose mutuamente estaban levemente cerca, las manos de Seokjin aun estaban en el cuello de jungkook.

— ¿Gracias, porqué? Fue mi culpa que tu libro se estropeara — dijo el azabache en susurros.

Seokjin no sabía porque el otro empezó a susurrar supuso que era porque su madre dormía, así que él también siguió susurrando.

— Si, es verdad pero solo fue uno,  pero me compraste la trilogía y yo,  ammm, no lo se... Solo gracias. — dijo finalmente.

— Bueno, digamos que fue un pequeño inconveniente en la compra pero supongo que para tí no es inconveniente. — dijo jungkook, mirando al castaño intensamente.

Su cara era de vergüenza, no sabía porque pero la manera en que Jeon, comenzó a verlo le dio nervios y su rubor fue visible porque pudo ver como las pupilas de Jeon se agrandaban.

— Si — dijo el castaño.

Los movimientos de las manos de Kim, dejaron de ser masajes en el cuello en el momento en que Jeon lo miro de aquella manera y sus dedos empezaron a ser nerviosos por lo que se detuvieron, segundos después continuó pero pasaron a ser caricias suaves con la llema de sus dedos empezando a subir a los mechones del cabello de jungkook.

Jungkook cerró los ojos y se dejó hacer al gusto de Kim, los masajes que al principio pidió que detuviera porque le incomodaban ahora se encontraba disfrutándolos.

Seokjin miraba a Jeon, parecía un cachorrito pidiendo mas cariños, sus ojos estaban cerrados, sus labios entre abiertos hacían ruiditos de gusto, sus suspiros eran tranquilos.

— Kim — ¿si Jeon?.

La voz de jungkook ahora era un tono mas gruesa cosa que hizo que seokjin empezará a ponerse en radar.  Si,  seokjin no era idiota y sintió la manera en que jungkook cambió el tono de su voz.

— Tengo que irme — dijo el azabache.
— Vale — respondió el castaño.

Pero ninguno de los dos se movió jungkook seguía sentado sin abrir los ojos, solo había susurrado aquello y seokjin seguía con las manos en los mechones de jungkook.

— Entonces vete — dijo el castaño.
—Si, no dejas de hacer eso no puedo — dijo el azabache tomando las manos de Seokjin.
— Solo vete y ya — Mmnh.

Jungkook tenía las manos de jin con las suyas de un momento a otro seokjin toma las de jungkook y empieza hacer caminitos con las llemas de sus dedos, jungkook vuelve a cerrar los ojos disfrutando de la atención, — tus manos son muy grandes — dijo el castaño.

Jungkook no respondió solo asintió aun con los ojos cerrados,  — Este tatuaje de aqui me gusta — decia seokjin mientras iba tocando la zona y revisando las manos de jungkook mientras hacía caminitos por la piel con las llemas de sus dedos.

El castaño sintió el como el azabache cortaba la poca distancia que había entre ellos dos, hasta quedar frente con frente.

Jungkook respiraba con dificultad, dejó las manos de Seokjin fuera de las suyas, tomo el rostro del castaño en  sus manos con delicadeza.

— Me estas volviendo loco, detente — dijo el azabache en ronroneo mientras mantenía su frente sostenida en la frente del castaño, su mirada era penetrante y pudo ver la confusión en los ojos de Kim.

Sin resistirse un segundo más tomo los labios de Kim con los suyos y al principio el castaño mantenía los labios cerrados sin saber como reaccionar pero unos segundos después abrió los labios lentamente.

Y jungkook estaba en la gloria de un momento a otro dejo de estar en el sofá para tocar la el cielo, seokjin en sí olía a fresas, sus labios estaban tibios aun tenía el sabor del postre de platano que Hana los había hecho comer, pero la suavidad de sus labios,  esos labios esponjosos y gordetes lo estaban volviendo idiota con sus manos sostenían el rostro de Kim pero el castaño tenía sus dedos lejos de él y él los quería devuelta en él, esos dedos que lo habían vuelto un majo de nervios, él los quería en él otra vez.

Con una mano atrajo la mano de seokjin a sus mechones, el castaño lo entendió a la primera y con sus dedos comenzó hacer cariñitos en la cabeza de jungkook pasaba las llemas de sus dedos desde el cuello pasando por la nuca llegando a los largos mechones de cabellos negros de jungkook y repetía la acción suavemente como si estuviera acariciando la cosa mas suave del mundo y jungkook empezó hacer ruiditos, empujó su lengua dentro de la boca de Kim y este abrió más sus labios para que jungkook hiciera con él, lo que quisiera jungkook envolvía la lengua de Kim con la suya, segundos después seokjin empezó a morder suavemente sus labios.

Jungkook sonrió, en medio del beso al ver como kim suspiraba y el castaño tomó el labio inferior donde jungkook tenía un bonito lunar mordiendo levemente, jungkook abrió mas la boca y volvió a tener los labios de Kim bajo su mando y este simplemente se dejaba hacer.

Por la falta de oxígeno jungkook fue soltando poco a poco los labios de Kim, jadeando por la falta de aire en sus pulmones, rozando la nariz de Kim con con la punta de su nariz aun jadeando abrió sus ojos y se encontró con los de Kim aun confundidos.

— Te dije, que te detuvieras Kim.
— Perdón — pidió el castaño sin entender porque se disculpaba.
— Me orillaste a esto. — dijo el azabache. — No te obligue a nada Jeon. — dijo el castaño quitando sus manos del cuerpo de jungkook y dejando espacio entre ellos.
— No me gustan los hombres Kim, soy hetero ya lo sabes así que deja de jugar a lo que sea que estés jugando y mantén tu distancia conmigo. — dijo el azabache secamente. — Quítate — dijo Seokjin mientras apartaba bruscamente a jungkook y salía del sofa.

— Cierra la puerta cuando te vallas.

Fue lo último que escucho jungkook del castaño, seokjin pasó al lado del azabache y abandono la sala,  poco a poco subiendo las escaleras su tobillo aun dolía pero podía caminar bien,  con un poco de dificultad pero caminaba.

Holaaa, hasta aquí el cap de hoy.

Espero les esté gustando.

Gracias por leer esto xd.

Nos leemos bonites.

~Marlys~