Capítulo 54.

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***Leed la nota del final porfavor, gracias:)***

Sábado, 15 de Agosto.

POV. SARA

En el Argo II.

10:30 am.

Duele.

Mi cabeza duele como si pequeños duendes amartillaran mi cabeza con un martillo tres veces más grande que su cuerpo.

Me siento en el borde de la cama, y observo todo a mi alrededor, es una pequeña habitación, un camarote, las paredes son de madera oscura, al igual que el suelo y el techo, la cama en la que he dormido está pegada a la pared, y encima de esta hay un ojo de buey, también hay un escritorio con su silla, un pequeño armario de color blanco, una alfombra en el suelo y encima de esta un colchón con mantas, parece que alguien durmió en esta habitación conmigo, ¿Quién?Ni la menor idea, tengo una pregunta más importante rodando por mi cabeza.

¿Dónde estoy?

Intento recordar como llegue hasta aquí, pero mi cabeza no me deja ni recordar mi nombre.

Me pongo en pie, pero mi equilibrio falla y vuelvo a caer en la cama, mierda, mis piernas siguen dormidas.

'Venga Sara, levántate'.

Si bueno los ánimos de mi conciencia no ayudan mucho, pero vuelvo a ponerme en pie, esta vez lo consigo y con lentitud camino hasta la puerta que hay frente a la cama, me apoyo en ella, todo me da vueltas. Cierro los ojos e intento concentrarme en saber si hay agua en el exterior del lugar en el que me encuentro, cierro mis ojos con más fuerza aún, mi mano se cierra alrededor del pomo de la puerta, mientras que la otra la aprieto contra mi muslo, me concentro en el agua, hay cañerías bajo mis pies, son fáciles de romper, estan bastante dañadas, sigo el transcurso que llevan, todas se concentran en un mismo punto para desembocar en...No tiene un sitio fijo da vueltas y vueltas por todo el barco hasta volver a limpiarse. Creo que si debo beber agua de este vaso la analizaré antes de que entre en mi sistema.

Y después de un buen rato, lo sentí, sentí como las olas chocaban en la base del barco, oí el agua rugir bajo el buque de guerra, o eso creía que era por sus dimensiones. Saber que estoy en la mar, medio fuerzas suficientes como para decidirme a salir de la habitación y lanzarme al mar que rodeaba al barco y así poder sentirme mucho mejor, ventajas de que mi padre sea Poseidón, me curo con agua.

Giro el pomo de la puerta y tiro de el hasta que se abre, asomo la cabeza para ver si hay alguien, negativo, el pasillo estaba vacío. Salí completamente del camarote y comencé a caminar sin hacer mucho ruido, el corredor era estrecho pero bastante largo, había varias puertas, supongo que otros camarotes o el cuarto de baño, no se tampoco es que tuviera mucho tiempo para investigar.

Todo estaba en silencio, pero aún podía escuchar el murmullo del mar, continue caminando mientras que pensaba en como saldría de aquí, o como llege o...¡Oh no!, ¡¿DÓNDE ESTAN THALIA Y LOS ROMANOS?!, Mierda, mierda, mierda, ¿Cómo me pude olvidar de ellos?, ¿Estarán bien?

Joder, mi cabeza va a explotar no siga pensando o buscándole respuestas a todas mis preguntas. Parece como si mi celebro quisiera salirse de mi cráneo, bueno quizas exagere, pero solo un poco.

Dejo de pensar y me centro en salir de aqui e ir a buscar a mis amigos y...

Paro de andar al escuchar unas voces que provienen de una de las puertas del final, tengo que pasar por ahí para poder salir y zambullirme a lo más profundo del mar que rodea el barco, y ¿A qué no sabéis?, Sí, parece que hoy tampoco voy a tener a la diosa fortuna de mi lado, la puerta se encuetra abierta y es casi imposible que no me vean y/o escuchen su paso por delante de la puerta, ¡Puff!, Yo y mi mala suerte siempre unidas, es la única de la que puedo estar segura de que nunca me abandonará.

La hija de Poseidón [Sin editar]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora