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Especial pelusa

Maldito traidor.

Mi nombre es Christopher Bangchan, hijo primogénito de el más grande mafioso en Italia.

Tengo dos hermanos menores, los cuales están bajo mi cargo cuando mi padre viaja a otros países a enlazar cadenas.

La razón por la que estoy hoy en día en esta casa es por causa de una emboscada.

La misión era sencilla, dejar la mercancía, recibir el dinero e irnos del lugar, pan comido.

Sino fuera por el estúpido de Fernando, ese hijo de puta cuando lo tenga en frente le pateare las bolas hasta dejarlo sin descendencia.

Fernando era mi empleado, el se dedicaba a armas las entregas cuando mi padre no estaba, lleva trabajando con nosotros al rededor de 10 años, no pensé que fuera un perro traidor.

La entrega estaba lista, la entrega iba a ser entregada por mi hermano más pequeño de tan solo 16 años, Jeongin.

Mi padre decía que para ser parte de la mafia tenemos que aprender desde muy jóvenes, lo sabíamos de sobra.

Recuerdo que mi primer misión fue a los tan solo 12 años de edad, tenia que dar la cara frente a los compradores máximos de la empresa de mi padre y si lograba convencer que extendieran sus compras a los nuevos productos realizados tomaría un cargo mas grande unos años después.

Lo logre, cuatro años después mi padre enfermo lo cual provoco que no pudiera realizar cualquier actividad que le tomara mucha preocupación o ritmo cardiaco.

Félix el hermano después de mi, entro a los trece años, la cual mi padre le otorgo el puesto de entrenador de armas y combates del clan Chan, era muy hábil para defenderse cuerpo a cuerpo y manejaba muy bien todo tipo de armas desde las blancas hasta las de fuego, es el mejor de todos.

Jeongin el menor de los tres, era nuestro muy y mejor intermediario, el cual con tan solo 16 años era muy hábil en las palabras y entregas, era la cabeza de la bodega, la cabeza de todos los repartidores en el clan y ningún producto salia sin antes ser supervisado por el mismo.

Félix era mis brazos, Innie era mis ojos y yo era la cabeza del clan, mi padre era el líder y mi querida madre era la boca de todos, si ella decía que nadie saliera no sin haber comido antes era por nadie saldría.

El día de la entrega todo iba muy bien hasta que note un punto muy raro, la entrega era en la embarcación del puente de Italia, se que simple vista nada era malo ya que habíamos tenido varias entregas antes en se lugar, el problema es que la mercancía excedía la cantidad dada en toda nuestra empresa, mi hermanito se aseguro de que cada uno de los productos estuvieran en buen estado mientras el segundo que la seguridad fuera la suficiente, Fernando se encargaba que todo la mercancía fuera subida y acomodada en el camión en lo que yo realizaba las facturas del producto.

Innie seria el responsable de la entrega pero al ser una cantidad tan grande yo mismo me ofrecí a realizar esa entrega sin saber que era una cuarteada, todo fue tan rápido, solo veía como Félix fue gravemente herido, Innie gritaba tras el comunicador por ambos, y Fernando escapaba del lugar.

Lo primero que ví al despertar fue un peluche de lobo sobre una cama de cobertores morados, una fotos de un adolescente sobre una cómoda de ropa, un par de peluches mas sobre ellas y mi pie encadenado a la base de la cama.

¿¡QUE DIABLOS ERA ESTE LUGAR!?

Empecé a abrir los cajones de la cómoda buscando algo que no fuera de color pastel encontrando unas sabanas negras y no se que mas del mismo color, colocándolas, gracias ¡Bendito seas, ser divino! pensé cuando encontré unas cortinas ¿o sabanas?, realmente no sabia que eran pero las coloque sobre las antiguas cortinas color rosa dejando un poco en oscuridad aquel cuarto.

Estaba cambiando las sabanas cuando una persona abrió la puerta; ambos nos quedamos quietos viéndonos fijamente, después solo asintió con los hombros y volvió a cerrar la puerta llendose.

Ok, eso había sido muy raro, continúe mi labor, hasta que termine y me senté sobre una silla giratoria esperando mi destino poco a poco.

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Habían pasado casi dos meses desde que empecé a vivir en esta casa, realmente era tan agradable , el chico cual me alimentaba, me trataba tan bonito y era muy apachurrable, si me la pasaba casi toda la tarde desde que llegaba de su escuela abrazadolo; no podía evitarlo.

Al parecer había sido todo un error, el quería una mascota, su padre regalarle su capricho, yo haber sido la cuartada y Fernando debía un favor, lo cual me levantaba muchas dudas pero las iría respondiendo poco a poco.

Appa Minho era muy liberal, no le molestaba verme encima de su hijo, encima me refiero a que se acostaba en el sofá y yo alado de el o encima mientras lo abrazaba, a veces me sentaba junto a él para ver los partidos.

Había días en los que me pasa el día entero con el tío Han en la cocina, sabia como llamarlo a cada uno ya que Minnie me había enseñado a como decirles, otros días me la pasaba con Binnie en el cuarto jugando a cualquier cosa pero mi tiempo favorito era pasar tiempo Minnie, de cierta forma me acostumbre a estar con el, dormir aveces con el, o no hacer nada pero junto a el.

Me dio 7 meses para dejarme libre, dice que no le gustaba tenerme aquí y que mi familia estuviera preocupada, aparte de ser dulce era un ángel.

Sin querer me había vuelto parte de la familia pero sin saber de que lado.

No podía negar, no podía negar que Lee Seungmin me gustaba, pero no solo física sino que también emocionalmente,

Cuando supiera cual era mi lugar en este mundo me odiaría, me odiaría cuando supiera las tantas cosas que pensaba hacerle.

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GRACIAS POR LA ESPERA, DE VERDAD ESPERO ESTÉN DISFRUTANDO MUCHO ESTA PEQUEÑA HISTORIA, ME ANIME A ADAPTARLA A MI MANERA YA QUE SE ME HIZO REALMENTE GRACIOSO EL AUDIO DEL VÍDEO, QUIZÁS TAL VEZ LOGRE HACER UNA ACTUALIZACIÓN POR SEMANA YA QUE TRABAJO CASI TODO EL DÍA (11 HORAS PARA SER EXACTOS) ME DIVIERTO HACIENDO LOS CAPÍTULOS, ESPERO DE VERDAD LES GUSTE, NOS LEEMOS PRONTO:)

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