🌹The Archer and the Doll I 🌹
Cuando la vio a lo lejos, pensó que era una muñeca de esas de porcelana que se había escapado de alguna caja de música o quizá alguna mariposa perdida en los bosques de Georgia, una preciosa mariposa en medio de todo e...
Este no es un cap común y corriente, sino una parte para dedicar a Norman. Que el día 27 de septiembre obtuvo su estrella en el paseo de la fama. Y es una forma en la que, desde aquí, le puedo agradecer por todo lo que Daryl y él han hecho por mí.
Sí ya sé, es algo cursi. Pero estoy segura de que, como buena Walker y Normista, no soy la única que siente que Norman ha logrado hacer cambios en su vida. Cuando estaba terrible la pandemia fue cuando tuve la oportunidad de acercarme a la serie de nuevo, maratonearla y luego maratonearla con mi hermana.
Eran tiempos difíciles y la muerte nos respiraba en la nuca a todos, estuve encerrada más de un año sin salir (aunque debo admitir que no me sentí mal ni nada, afortunadamente el encierro fue muy placentero y terapéutico para mí) se extrañaba el mundo exterior. En especial porque antes de la pandemia era como Daryl, el lobo solitario del grupo. Que siempre va con sus cosas y le gusta además estar sola.
Pero viví antes de la pandemia muchas cosas que me estaban ahogando, se me juntaron todas y yo sentí que todo iba a explotar. Entonces la pandemia llegó a nosotros y la verdad todos mis miedos se volvieron nada en comparación con el temor que se vivía fuera. Fui afortunada, tuve alimento, mis clases en línea, acceso a internet y, aunque sí nos contagiamos (en enero de este año) logramos salir adelante.
Daryl me enseñó a salir del agujero donde estaba y posteriormente Norman con toda su historia. Me inspiraron tanto como Jared (Leto) me inspiró también. Daryl es un personaje complejo que tuvo una grandiosa evolución desde su inicio, que roba el corazón y te asombra por lo decidido que es lo que a mí me sorprendió (más que verlo en una motocicleta, la escena de la bazuca, el tanque que destruyó del Gobernador, la explosión para detener a los Salvadores) fue su resiliencia.
Todo lo ha perdido y ganado, ha visto morir a tanta gente pero sigue levantándose. Sigue cuidando a su familia, a su pequeña Judith y a todos en el grupo. Jamás duda cuando alguien necesita su apoyo siempre está dispuesto a darlo sin esperar que se le agradezca o reconozca. Se ha levantado de cosas que yo no podría. Y ha sido así desde la primera temporada, tomó su destino y lo usó.
No siguió la sombra de su familia disfuncional, ni los patrones racistas y violentos de su hermano, sino se convirtió en alguien más, algo más. Alguien de vital importancia en el grupo.
Eso me enseñó a mí. Y fue lo que me cautivó desde que lo veía desde aquel 2010 desvelándome para ver los capítulos de estreno y fue lo mismo que me atrapó en esos años cuando pude volver a la serie.
Creo que Daryl Dixon es el ejemplo perfecto de que, aunque alguien la pase mal o esté en su peor momento, no significa que estará perdido para siempre. Que puedes elegir hacer algo con tu vida, con lo que te tocó. Que puedes tomar lo malo que te pasa para aprender y salir adelante.
En especial me enseñó a salir adelante con un corazón roto, por todo lo que debió pasar y no fue así, Norman y Daryl me enseñaron a sobrellevar las cosas y ver la infinidad de posibilidades que pueden ocurrir. Aunque no sea lo que se planeó desde el inicio, no es el fin del camino y hay posibilidades de que vengan cosas igual de buenas o mejores como cuando el grupo perdió la prisión pero llegó a Alexandria, un lugar que convertirían en su hogar.
Es gracias a Daryl y Norman que hoy Archer está escribiéndose. Y que el segundo libro esté ya en proceso de investigación. Se merece esa estrella y todos los premios del mundo. SI hay algo que me gusta del arte de Norman es que nos enseña que lo bello no es perfecto, sino que la oscuridad y lo poco convencional puede ser igual o más hermoso que lo que tenemos idealizado como tal.
En su fotografía imprime la pasión y personalidad propia de Norman Reedus y nos enseña a ver el mundo desde otras perspectivas que no sea todo ideal o perfecto como en tiempos de los griegos. Que quizá en los lugares más escondidos, oscuros y tal vez olvidados, hay historias hermosas por ser descubiertas, capturadas. Rincones en que nadie más estaría o que no se han animado a ver por seguir en una vista de túnel.
Y quise dejar este pequeño registro de ese día aquí, en Archer, el primer libro de la saga TAyTD como una forma sencilla de agradecerle a Norman por lo que hizo por mí. Esta historia no me iba a dejar de perseguir hasta que la plasmara aquí, en mi computadora o en el papel. Me alegra haber vuelto a conectar con TWD y su complejo universo.
¡Felicidades Norm! Desde aquí, una pequeña escritora te felicita esperando que el camino siga siendo igual de bello como ahora, aunque no siempre sea fácil.
-Elena.
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