expelled; magcon ✨ EDITANDO.

08.

Nash.

Sacudieron mi cuerpo salvajemente saltando por la cama donde yo hacia dormido. Lance una patada al aire, o más bien a Hayes que era el culpable de mi ahora mal humor. Me levanté de la cama y fui al baño dando un portazo. No soportaba el hecho de que Cameron tuviera novio. Si hace unos dos días me dijo que gustaba de mi. Es increíble. Salí del baño y tome mi celular revisando mis redes sociales y los mensajes que tenía. Por curiosidad vi mi conversación con Summer. Pero el mensaje que me había enviado ayer por la tarde de "Alguien tiene novio." no estaba. Había desaparecido al igual que el de Hayes. El celular vibro en mis manos.

Nuevo mensaje de; Matiu.

"Necesitamos hablar."

Dios, ¿ahora que hice? Sólo diré una cosa; no quiero más problemas. Acomode mi cabello con mis dedos nervioso, baje las escaleras lentamente y me detuve en la cocina. Mamá hablaba con una chica de estatura baja, comparada conmigo, castaña, de tez más blanca que yo, si, más que yo, y unos hermosos ojos mieles con largas pestañas. ¿Quien es ella? Nunca la había visto.

-Hola ma.- dije sin quitar la mirada de ella.

-Nash, se educado.- dijo mirando a la chica y después a mi.

-Hola, chica la cual no se su nombré.- dije besando su mejilla.

-Hola.- murmuro bajando la mirada avergonzada.

-Ella es Fa.- mamá la abrazo por los hombros.

¿Dijo "Fa"? ¿Qué clase nombre es ese? Evite reír por respeto a la linda chica que hacia frente a mi. Ella no tiene la culpa de que sus padres pensaran en su nombre mientras, ya saben, eso.

-Un gusto.- dije mordiendo una manzana y volviéndola a dejar en su lugar, mamá me golpeo.

-Dios, no hagas eso Hamilton.-

-¡Mamá!- gemí quejándome. Ahora la chica pensara que mi nombre es del asco. Pero es cool. Admitamos lo.

-Saldré con los chicos.- avise a mamá y ella me tomo por el brazo.

-Llevaras a Fa.- sonrió.

-Claro.- me encogí de hombros.

Tomo las llaves del auto, otra manzana y salgo de casa junto a Fa. El pequeño viaje hasta la casa de Matt fue aburrido, en ningún momento hablo y cuando lo hacia sólo decía "no, tal vez, si" y comenzaba a molestarme.
Baje del auto con ella detrás de mi y abrí la puerta con mucha confianza. Matt estaba con una corbata en la cabeza y saltaba por los sofás que había en la casa al ritmo de Fancy.

Este chico nunca cambia.

Me aclare la garganta haciéndolo caer de la sorpresa y vergüenza al ver a una chica a mi lado.

-Hola.- dijo besando la mejilla de Fa y haciendo el saludo de machos pechos peludos respetables, conmigo.

-¿Qué era lo tenías que decirme?- dije ya sentado en el sofá blanco que adornaba el living en C junto a una gran mesada de cristal donde habían dos potes de helado derretido y cuatro barras de chocolate. Le llego la depresión.

Verán, cada miércoles hace esto mientras ve películas de esas cursis junto a Burnie. Pobre perro. Esto se debe a que aún no ha conseguido novia. Y eso es lo más gracioso. Tiene a miles de chicas detrás de el pero dice que ninguna es como el la piensa.

La chica perfecta para Matt -al menos como el la describe- sería: extrovertida, nada tímida, grosera, amante de los dinosaurios, loca, graciosa y que sea igual que sucia el, en el buen sentido. Raros gustos, ¿cierto? Bueno, no tanto.

-¿Quien es ella?- pregunto mirando a Fa.

-No lo se. Estaba en casa con mamá y prácticamente me obligo a traerla conmigo, me cae mal, no habla.- hice una mueca y el río.

-Hagamos la prueba.- sonreímos maliciosos -Llama a los chicos. Veamos que tiene.- dijo caminando hacia ella.