Recordar [FINALIZADA]

Capítulo 11

ACLARACIÓN:

Antes de hacer este capítulo, busque información sobre el caso de Izuku, como no soy una persona que tiene experiencia en la medicina o alguna inclinación médica, puede que me equivoque.

Recordar que es una historia ficticia, que ocurre en mi imaginación.

Sin más, comencemos.

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Una enferma pasaba por las cuartos de los pacientes, para corroborar su situación, y grande fue su sorpresa cuando vio al chico que estaba en coma, sentado en la camilla.

Rápidamente llamo al doctor presente.

Le hicieron algunos exámenes, llamaron a los familiares del paciente, que tomaron la noticia con alegría y lágrimas.

Preguntas aleatorias, que respondió con duda y un poco atontado.

Inko Mirodiya fue la primera en llegar, básicamente corrió para ver a su hijo.

El doctor le preguntó.

—¿Quién es está señora?

El peliverde la vio de pies a cabeza cuando entró, movió su vista a los presentes, sacudió la cabeza en negación y la mirada esmeralda la miraba con extrañeza.

Inko apretó sus manos, mientras sus ojos se cristalizaban, miro al doctor y a la enfermera.

Es triste decir que no reconocía a su propia madre. Después de 10 o 15 minutos llegó Bakugo con algunos amigos.

—Señora Inko... — se acercó a la mujer para abrarzarla, él estaba feliz de ver a su amado nuevamente para volver a la normalidad, pero ella parecía estar preocupada, su mirada perdida, le llamo la atencion. — ¿Paso algo ?

La mujer lo miro a los ojos, cerrando los ojos.

—No recuerda... no sabe quién soy... - lágrimas salieron, Bakugo acarició los hombros de la peliverde, y la volvió a abrazar.

Si no recuerda a Inko que es su madre, a mi...

¿Me recordará?

El rubio cenizo, se preguntó, mientras se aleja de la mujer y caminaba a su cuarto, tocando su anillo.

Ahora entraría él para verlo.

La mirada carmesí brillo ante la vista, Deku estaba sentado, mirando, pero su mirada se sentía extraña.

—Deku... — susurro acercándose.

— I-Izu... Izu — le respondío, intentando decir su nombre. — no — sacudió su cabeza.

En esos momentos tenía que ser fuerte, tanto como para la mamá de Deku y para él.

Suspiro a sus adentros y salió.

Asintió ante las miradas de todos.

"Izuku Mirodiya perdió la memoria."

El doctor le recomendó al paciente que hiciera reposo en los siguientes días y después buscarían ayuda, para su hablar, su caminar o alguna circunstancia.

Su recuperación podría ser de meses.

Ante la insistencia de Rei y Enji, que fueron a casa de Natsuo, Shoto no tuvo más opción que volver a su departamento con Inasa.

—La verdad no quiero que te vayas. — le dijo Natsuo, viéndo al bicolor con una maleta, teniendo en frente de él.

—¿Volverás? — pregunta la hermana, interesada en la respuesta.

Desvía la mirada heterocromatina.

— Yo tampoco me quiero ir, pero será por unos días...— mira a Fuyumi— ... tengo que decidir sobre algo...

—Bueno...— responden ambos.

Después de despedirse de sus hermanos, la ruta a su departamento es larga.

Cuando llegó, lo primero que vio es a Inasa, viendo la tele con una vestimenta comoda. No dudo en abrazarlo y lo siguiente que hizo, sólo lo hizo abrir los ojos.

El pelinegro lo estaba besando en los labios, pero no lo alejaba, el chico correspondió el beso abriendo su boca y permitiendo que siguiera, cerrando los ojos, al igual que Inasa.

—¿Esto significa, que aceptas ser mi novio? — pregunta apenas se separan, acariciando las mejillas del bicolor.

—Yo... — murmura.

Habrá pasado media hora desde que pasó el beso, Inasa salió enojado sin mirar atrás y Shoto estaba alistando más ropa para ponerla en otra maleta.

La respuesta que le habia dado no era para nada satisfactoria.

Suspiro y guardo la ropa, ese día se quedaría a dormir, se cambió de ropa e hizo la cena.

Inasa volvió con mal humor, se fue directo al cuarto, ignorando al bicolor.

—Inasa, ya está lista la cena — dijo tocándo la puerta del cuarto.

—No, no quiero. Ya cené. — contestó.

Shoto decepcionado se fue a comer. Guardo en un taper lo que sobró y se fue a dormir.

Al día siguiente, desayunaron juntos.

—Me disculpo por mi comportamiento de anoche. — apenado habla Inasa, con la taza en mano.

—Esta bien... Sólo dame tiempo, Inasa. — lo mira.

—¿Entonces, podría ser un "Si"? — pregunta.

—Inasa... — susurra.

—O... se podría decir que estamos saliendo... — insiste.

—Es-esta bien.— responde

Inasa se levanta y se acerca al bicolor, extiende su mano a su mejilla y procede a besarlo en los labios, está vez es sólo un pico, para después salir rápido del lugar.

El pelinegro vuelve vestido de traje, nuevamente se va pero volverá rápido, eso asegura.

Shoto tomó un sorbo de su café y le escribe a sus hermanos.

"Me quedaré unos días más en el departamento"

Continuará...

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Bueno....

Estare escribiendo, pero esta historia la subire de a poco ¿Por qué?
Porque quiero que sufran conmigo... Sii... Soy mala...