Recordar [FINALIZADA]

Capítulo 31

Shoto miro de reojo a quien le acariciaba la mejilla y lo saco de sus pensamientos, capaz hubiera deseado que fuera otra persona, tal vez alguien de cabello de verde pero era otra.

- No me toques. - dijo apartando la mano.

- Ven. Tengo que decirte algo. -dijo y agarro la mano del bicolor - O más bien que proponerte. - lo jalo hacia afuera, Shoto forcejeaba pero sin exito.

- Hiriko, Sueltame. - dijo entre dientes. Vio a algunas personas que lo seguían con la mirada pero no hacían nada.

Busco con la mirada a Kirishima, pero no estaba en la mira, una llamada en su celular lo entretuvo, Mirio estaba atendiendo a varias personas, Keigo estaba adentro en la cocina, Nejire se fue a buscar a Melissa, nadie podia ayudarlo en ese momento.

- ¿Qué es lo que quieres? - dijo con rudeza cuando cruzo la puerta principal.

-- Te lo dire... - miro a sus lados y habia un pasillo al lado, lo arrastró hacia allá, aunque era en contra de la voluntad del bicolor. - Dile a tu padre que no me rendire contigo, y menos teniendo como competencia a Shinso - lo estampó y lo acorralo contra la pared, mirandose fijo.

- En cierta forma, Shinso, es mucho mejor que vos, tu vives acosandome. - dice mirandolo enojado. El rubio agarra las mejillas con una mano.

- No dejare que ese sujeto te tenga, tu eres mio. - lo besa a la fuerza, Shoto mantenia los ojos abiertos y lo intenta alejar con las manos, como comienza a odiar Hiriko, puede notar la obsesión que refleja en cada acción.

- Dejame... - le mordio el labio y logro que se alejara, pero comenzo a lamerle el cuello, sintió asco. Y siguio empujandolo, pero parecia aferrarse más a él. - Dejame... Hiriko... te dige que me dejaras... - dice entre algunos suspiros, no queria darle el placer de que lo escuchará jadear, y cuando algún gemido quería salir se mordia el labio.

- Tu cuerpo... es tan sincero... - separa los labios del cuello blanquecino del bicolor y lo agarra de las mejillas que estan sonrojadas. - Eres tan hermoso... que solo tienes que pertenecerme a mi. - le tapa la boca con su mano, para que no grite y con la otra comienza a desabotonar la camisa, acariciando la piel.

El bicolor se siente debil, su cuerpo no coopera con lo que su mente quiere, hace mucho no tenia relaciones sexuales con alguien y menos querría que ser tocado por ese alpha.

Pero ese ambiente con los aromas presentes le nubla sus sentidos. Cierra los ojos, sabe que si hace una denuncia, no llegará lejos, porque siempre piensan que los omegas son los que provocan a los alphas, aunque en su mayoria sea al reves.

Cuando abre los ojos, salen lagrimas retenidas y mira a los costados, puede ver una figura que esta muy cerca, mirandolos, le extiende su mano, como pidiendo ayuda, espera que sea Kirishima.

Empuja al rubio, diciendo que pare pero hace oidos sordos y lo vuelve a besar a la fuerza. Cierra los ojos, escucho un golpe y despues más.

Lo siguiente que vio al abrir los ojos, fue que alguien estaba encima de Hiriko propinandole varios golpes en la cara. Shoto se acerco con miedo, y le toco el hombro.

Era Izuku, se sintio tan aliviado y seguro.

- Vamos. - balbuceo.

Hiriko aprovechó la distracción y golpeo al peliverde en el abdomen, despues en el rostro, un par de golpes siguieron, cuando el rubio ya no tuvo fuerzas se quedo tirado en el piso, mirando furioso a ese sujeto peliverde, que estaba parado a unos pasos.

- Vamos. - Agarro del brazo al peliverde. - Izuku... vamos. - lo jalo con fuerza pero no se movia.

- No. - dijo limpiandose la sangre del labio. Miro al bicolor y no pudo evitar mirar más alla, volteo rapido. Un aroma a menta intenso que comenzaba a expandirse por el ambiente hizo que Shoto abriera ojos, y que se estremeciera, su omega interno ronroneaba quería que ese alpha lo dominará.

- Izu-Izu- chan. - jadeo. - Ven... -dijo en un susurro. A veces el peliverde es tan terco. - Vamos. Hay que curarte las heridas. - de nuevo, veia que no causaba efecto, el peliverde miraba a Hiriko con rabia. Y grito. - ¡Izuku! ¡ Mirame ! Est...- el bicolor tomo de las mejillas del peliverde, obligandolo a que lo vea, pero no penso que pasaria lo que estaba pasando.

Izuku lo habia rodeado con sus brazos, mientras le daba un beso bastante apasionado y posesivo, Shoto conocia al antiguo Izuku, y sabía que cuando se portaba asi, que era pocas veces, era cuando estaba celoso.

El bicolor se dejo llevar al sentir los labios de quien fue su primer amor, cuando se separaron, se miraron a los ojos y quien devolvio el beso esa vez fue Shoto, enredando sus dedos con los cabellos rebeldes de Izuku.

Se separaron por segunda vez, sentia las respiraciones agitadas de ambos, el peliverde estaba cerca de sus labios.

- Su aroma esta impregnado en ti.- le susurra. - ¿Puedo morderte? - acariciando la mejilla del bicolor.

Shoto sabia a que se referia y se puso nervioso.

El peliverde esperaba ansioso la respuesta de parte del omega, lo abrazo y comenzó a lamer la oreja. Shoto cerró los ojos, el calor de su cuerpo aun no se habia ido, enredo sus dedos en los cabellos rebeldes.

Shoto tampoco queria tener el aroma de Hiriko encima suyo, pero si aceptaba cierta peticion, podria causar problemas.

Continuará...