Capítulo 58

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Izuku tenía preguntas pero con ninguna respuesta, estaba sentado en la cama mirando todo, las fotos, el collar, la grabadora (Shinso se habia encargado de pasarlo a ese aparato).

Miro el espejo de su habitación y guardo todo aquello en el cajón.

Se decia que no necesitaba saber que había pasado, aunque era mentira, por dentro se moría por escuchar la versión de Shoto.

Intentó contactar con el bicolor, pero tampoco recibió respuesta.

7 DE MARZO DEL 2023 —

El pequeño de 2 años, Koichi, corria a los brazos de su progenitor, que tenía atado su cabello donde se mezclaban los tonos rojos y blancos.

Shoto lo puso en su cochecito y lo llevo a pasear hasta que la tarde se asomaba y decidió volver a casa.

Shoto... Koichi Bienvenidos. — sonreí el pelinegro, con un cucharon en mano. Había aprendido a cocinar en esos años, gracias al bicolor.

Inasa... — le sonrie.

Papi... — el pequeño con cabellos blancos y ojos azules extendió los brazos al pelinegro.

Ambos adultos sonrieron.

Gracias por la cena, Inasa. — menciona el bicolor. — estuvo delicioso.

— Tuve un excelente profesor. — Inasa le sonrie, haciendo que Shoto se sonroje por el halago.

Bueno... si tu cocinaste, yo lavare. — comienza a llevar los platos.

Inasa lleva lo restante, deja las cosas en el fregadero, ve al bicolor poner en la esponja, el detergente.

Shoto... ¿no es momento que te comuniques con tus hermanos? — ve al mencionado detener la acción y lo ve.

Si... le dige a Fuyumi que la llamaría y nunca lo hice. — deja la esponja a un lado. — ¿Como estarán?

— Bueno... tenías tus motivos, no querías que tus padres supieran donde estabas... además... — mira al pequeño que se estaba durmiendo en la silla. — pensabas en tu hijo.

— Si. — siente que una mano le acaricia la mejilla, haciendo que voltea a ver aquellos ojos oscuros, se miran, y llega a sentir la respiración del alpha. Pone una mano entre ellos, alejándolo. — Inasa... creo ya hemos hablado mucho de este tema.

— Si. Lo siento. — se aleja. — Bueno... ¿entonces mañana llamas a tus hermanos?

No. — el pelinegro mira confundido al bicolor. — Iré a verlos y llevaré a mi hijo.

— ¿Qué? — se queda con la boca abierta. — pero...

— Inasa, te agradezco todo lo hiciste por mi y por mi hijo... — mira al alpha — está decisión la estuve pensando por mucho tiempo y siento que es momento de volver. — Shoto sonrie al final, haciendo que Inasa también sonría.

Recordar [FINALIZADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora