LUNA ROJA: INHERENTE AMOR

CAPÍTULO I: EL COMIENZO DE LOS PROBLEMAS

AVISO IMPORTANTE: ESTA OBRA ABARCARA TEMAS SOBRE SEXUALIDAD (COITO O COMPORTAMIENTOS O TENDENCIAS) EXPLÍCITOS, VIOLENCIA Y ESCENAS GROTESCAS DE GORE MUY DESCRIPTIVAS. ASÍ COMO TEMAS DE ORIENTACIÓN SEXUAL, DISCRIMINACIÓN, RACISMO, HUMOR OSCURO, BURLAS O COMENTARIOS OFENSIVOS A CREENCIAS RELIGIOSAS, ENTRE MÁS TEMAS SENSIBLES QUE PUEDEN ALTERAR AL LECTOR. NO SE PRETENDE IMPONER O CONVENCER AL LECTOR DE NADA QUE SEA TOCADO EN LA HISTORIA, TODO ES MERAMENTE FICTICIO CON EL FIN DE ENTRETENER. SI NO TE GUSTA NO DENUNCIES, NO QUIERO PROBLEMAS CON LA PLATAFORMA. NO SERÁN TEMAS RECURRENTES, SOLO ESPORADICOS, TÓMALO CON HUMOR.

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Se había enlobado por primera vez en su vida, la sorpresa y la euforia la llenaron, embriagándola con un ardiente candor realizado. Dedos se movía desenfrenado por la preocupación por Enid y Merlina. Merlina había sido secuestrada por la loca de Laurel y el psicópata Hyde de Tyler.

Enlobar era una transformación dolorosa que conforme se iban teniendo se acostumbraba uno y ya le era indiferente el proceso, pero para la pobre chica era como ser apaleada con tubos de metal gruesos y estos le rompían y molían los huesos. Tras unos momentos de dolor, la transformación termino, dedos brincó al hombro peludo de la chica y le chasqueó repetidamente para traerla a la realidad.

- ¿Dedos?

Este rápidamente le hizo señas; agradecido por verla cuerda, felicitándola por su enlobación y el último apresurándola para ir por Merlina y salvarla. Gruñó para indicarle que se pondría en marcha y dedos se aferró más a su pelaje áspero y corto, era obvio que su tardía aparición tendría repercusiones, nada que un buen tratamiento no solucionara, ya había planeado las cremas.

El camino inicio hacia la cripta pero Enid se detuvo en brusco, agudizó el oído, olisqueo desenfrenadamente, ladeó la cabeza y sus orejas me movían rápidamente. Dedos giraba buscando a Merlina pero estaba oscuro y silencioso, Enid gruñó y apenas le dio tiempo de agarrarse y la marcha le dio a entender que estaba cabreada a más no poder, entonces lo escuchó:

-Eres cómo una cucaracha. -la voz de Tyler se hacía cada vez más fuerte y clara.

-Ah, basta, los halagos no funcionan. -Merlina tenía esa voz sarcástica y apática de siempre. -Esto no terminará bien para ti.

Los vieron, y más a Tyler transformándose en el Hyde, similar a Enid pero con él la visión era desagradable y rancia como ver mierda convertirse en vómito, pensó dedos con rabia y sintió el pensamiento compartido de Enid pues aumento la velocidad. Entonces vieron lo que más les despertó el odio y la rabia de la visión; Tyler había tomado a Merlina y la estrelló contra un tronco roto y la chica trataba de mantener el miedo a raya pero sus ojos abiertos y su respiración agitada la delataban profundamente. Alzó la garra y la preparo para desgarrarle el vientre a Merlina, entonces Enid lanzó un salto desesperado para impedirlo, tacleo a su objetivo con tanta fuerza que ambos terminaron cinco o seis metros lejos de Merlina, que al verse fuera de peligro se deslizó por el tronco y quedó atónita al ver a su salvador. Un lobo flacucho pero con fuerza de espíritu la miraba con mechones azules y rosas, parecía sonreírle presumiendo su apariencia y en sus ojos el alivio de verla a salvo.

- ¿Enid? -su voz era alivio, confusión y orgullo.

Unos segundos que dejaron pasmada a Merlina, fueron segundos en los que una nueva sensación apareció, la misma que tuvo cuando beso a Tyler, pero era a la vez diferente... Una sutil diferencia que no podía nombrar, a pesar de que la busco en la biblioteca que tenía en su interior, la biblioteca que contenía conocimientos de toda índole, en una habitación pequeña con tomos polvorientos y descuidados yacían las emociones plasmadas en hojas amarillas y apolilladas; todas aquellas que olvidó o no experimento jamás pero que observó y anoto.