Después de enterarme que Joseph había participado en una serie de gran audiencia como lo es Stranger Things muy apenado me contó.
—Fue una locura. —dijo con una sonrisa.
Después de unos minutos se había relajado, a pesar de que aún estaba algo sonrojado. No era para nada mi intención hacerlo sentir incomodo.
—¿Por qué no me habías dicho? —le pregunté, intenté no escucharme molesta.
Subí mis piernas al sillón y tome postura de mariposa girándome un poco para quedar de frente a él.
—No quería que me vieras solo como Eddie Munson.
Negué con la cabeza. — No podría verte solo como un personaje, porque a quien tengo frente a mi es a Joseph no a ese tal Eddie.
De inmediato su rostro se giró a mi y me sonrió.
—Gracias —agradeció mientras sus ojos brillaban aún más— últimamente la gente solo se centra en ver a Eddie y no ven que detrás de él soy alguien diferente.
—Pues no sé cómo es Eddie Munson pero a mi definitivamente Joseph Quinn me parece encantador —le sonrió — ya hemos hablado mucho de mi, es tu turno, ¿Cómo te enteraste?.
Se giró a mi dirección flexionando una rodilla y recargando su brazo en la parte superior del respaldo del sofá. Sus ojos se mantenían en los míos.
—Estaba en mi departamento en Londres —comenzó a hablar. — tenía un par de semanas que había mandado el video para el casting, creí que no me llamarían, estaba un poco decepcionado si te soy sincero, pero Lea me llamo y solo dijo algo así como "¿Hablo con Eddie Munson de Stranger Things?" casi me desmayo, había obtenido papeles importantes en algunas series y otros no tan importantes pero es series muy buenas.
Hace una pausa recordando el momento.
»En ese momento lo supe, todo iba a cambiar, había visto la serie decenas de veces y sabía que o iban a amar al personaje o lo iban a odiar y yo me esforzaría en hacer que lo amaran. Pase las proximas semanas escuchando heavy metal, metallica, Black Sabbath, Iron Maiden, y muchas bandas de la epoca.
No pude evitar sonreír ante la emoción en su voz, cada palabra que salía de él demostraba cuanto ama lo que hace.
—Prometo verlo.
—Oh no, no, no es necesario. — De nuevo las mejillas enrojecidas.
—Quiero hacerlo, quiero ver tu trabajo.
—En ese caso yo también quiero ver tu trabajo — Dijo mientras levantaba una de sus cejas retándome.
Le di una pequeña palmada en la rodilla burlandome de él.
—No creo que sea posible— me reí un poco.
—Encontrare la manera de verte en acción —dijo muy seguro mientras su rostro hizo un gesto de superioridad.
No pude evitar reír fuerte por lo que dijo pues eso podría tomarse de otra manera. Rápidamente abrió los ojos en grande y rascó su nuca. Si bien algunas veces es coqueto me doy cuenta que también se sonroja muy fácil y puede ser timido.
Es tan tierno. Y caliente.
—Ya lo veremos Quinn. —esta vez lo rete yo, en definitiva vería su trabajo. —Continua por favor ¿Cómo fué? ¿Qué tal estuvo? ¿Que hiciste?.
—Todo parecía surrealista, cuando fui a la lectura del primer capítulo estaba muy nervioso, todos fueron muy amables, me integraron muy rápido, al principio fue muy raro llevar una peluca todo el tiempo pero después me acostumbré — paso los dedos de su mano entre su cabellera. —Cuando me llegaron los libretos me di cuenta que tenia que practicar con la guitarra electrica, todo eso me ayudo a darle un matice y personalidad a Eddie, de verdad lo disfrute, el dia que comenzaron con la elección de vestuario y me vi frente al espejo, comence a creerlo, ese mismo dia mientras caminaba por las calles de la ciudad pase frente a una tienda de pircings y tatuajes y vi un par de anillos que llamaron mi atención, esos anillos gritaban Eddie Munson y los compre. En cada uno de mis personajes intento darles algo mio y Eddie no fue la excepción. Todo fue genial pero la verdadera locura vino después de que se estrenará la temporada.
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Contigo siempre Joseph Quinn
RomanceÉl la promesa del año, actor reconocido. Ella una simple mortal. Él solo quiere ser tratado como un ser humano. Ella quiere un lugar seguro. Sus caminos se cruzan por azares del destino, son lo que el otro necesita. ¿Pero eso es suficiente para ma...