Capitulo veintitrés: Baby dragon.

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Atención mensaje al lector

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Atención mensaje al lector.

A continuación se presenta la mención de intento de suicidio, leer bajo su responsabilidad.

Abriendo un breve paréntesis aquí, solo quiero comentar si alguna o alguno de ustedes llega a sentir este sentimiento no duden en mandar un mensaje, siempre que pueda los leeré, no están solos. Como personal de la salud me siento responsable de hacer visible este tema para poder ayudar a más personas que lo necesiten, de ser necesario recuerden buscar a un profesional de la salud mental. Sin más los dejo con el capítulo.

••••

Mi mente intenta procesar la bomba de información que acaba de soltar Joe. Con el paso de las palabras podía darme cuenta lo mucho que comenzaba a dolerle recordar aquel acontecimiento.

—Joe, cariño —tomó su rostro entre mis manos en un intento de centrar su vista en mi —Agradezco que confiaras en mi para decírmelo.

—Yo nunca lo planeé —limpio las lagrimas  que caen por sus mejillas —Pero se siente bien por fin sacarlo.

Ahora solo me compadezco por Genevive, pues por lo qué pasó no debe ser algo fácil y menos a esa edad.

—Yo... lo siento mucho por ti y por Gen.

—Yo se que la dejé cargar con todo lo qué pasó, no fui de mucha ayuda en su momento y me he arrepentido de ello todos estos años.

—Eras todavía muy joven Joe.

Puedo ver la aflicción en su rostro.

—Sé que pude haber hecho algo más.

—¿Cómo qué?

Intento mantener mi voz lo más suave posible.

—No lo sé tal vez estar para ella en lugar de dejarla sola en el hospital.

—Tambien estabas sufriendo Joe, no puedes dejar de lado tu dolor por estará para alguien más. —lo veo jugar con los dedos de sus manos, su vista se mantiene baja— Además eso ¿qué habría cambiado?

—No lo sé, tal vez no me sentiría en deuda con ella.

—Todos cometemos errores Joe, y no por eso somos las peores personas del mundo, recuerda que eres un humano que vive y siente, no te castigues por no ser perfecto.

—En cambio tu si lo eres. —su vista va a mis ojos de nuevo.

—Estoy lejos de ser perfecta. —niego con una sonrisa.

—Para mi lo eres.

Me acerco a presionar mis labios sobre los suyos, lo siento suspirar y coloca sus manos sobre las mías que aún mantienen acunando su rostro.

Nos separamos.

—Aunque ahora entiendo el porque Genevive es tan sobreprotectora contigo —dejo caer mis manos sin embargo él las sigue sosteniendo —No estuvo bien lo que dijo, si su intención era lastimarme lo logro.

Contigo siempre      Joseph Quinn Donde viven las historias. Descúbrelo ahora