Epilogo

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Meses más tarde

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Meses más tarde.

—Estas segura Anne, podría quedarme.

Ella me frunce el ceño.

—¿Cómo podrías faltar a tu evento? La gente va por ti Val.

Tiene razón no puedo faltar al evento que tanto retrasamos por los dramas de mi vida. Gabriel y Henry se había esforzado lo suficiente para que todo salga de acuerdo a los planes. Apartar la galería había sido realmente un gran reto, invitaciones a la familia real, celebridades importantes, la prensa, algunos famosos estaban invitados, coordinar con demás artistas.

Tomo el vestido y entro a la habitación. Un vestido perla satinado era el indicado para la noche, el estilista de Joe es quien lo había conseguido para mi, desconozco el diseñador.

Calzo mis pies en zapatillas lo suficiente altas para aumentar mi estatura, mi cabello había sido perfectamente peinado por Maca, un par de brillos esparcidos por mi cabello. Y un maquillaje sencillo en los ojos pero un color rojo en los labios.

Por último tomó la linda capa a juego con el vestido, camino hasta la sala de estar donde Anne, su esposo y el Señor Quinn se encuentras junto a mis hijos.

—Te ves preciosa querida— Me halaga Anthony Quinn.

Le sonrió mientras me acerco a ellos. Una vez estoy frente me toma de la mano y acaricia el dorso de esta.

—Sé que a él le hubiera encantado estar contigo este día. —intenta reconfortarme ante su ausencia.

Supongo que después de todo no pude fingir lo suficiente bien para no levantar alertas sobre la ausencia de Joe.

Asiento con un nudo en la garganta, luchando contra las lagrimas pues arruinarían el maquillaje.

—Lo sé, y a mi me hubiera encantado que estuviera aquí.

Le sonrió, aclaró mi garganta y me estiro hacia las sillitas de carro en las que transportamos a los mellizos. Cada uno me mira atento y agita sus manos hacia mi, tomo la pequeña mano de cada uno y jugueteó con ellos haciéndolos reír.

En los últimos meses han crecido tanto que sus rasgos comienzan a asentarse mucho más, ahora puedo confirmar que mi hijo es una pequeña réplica de su padre, y mi pequeña es mi versión más británica.

Dejo un beso en ambos, marcando mi labial en sus frentes a lo que ellos ríen como si entendieran.

—Los veo por la noche.

Me alejo de ellos y los dos hombres los llevan fuera. Anne se queda conmigo.

—No te aflijas querida. —me habla Anne, toma en sus manos la cadena que llevo puesta con la sortija que me dio Joe —Él siempre está contigo.

—Lo sé.

Toma la capa de mis manos y me ayuda a engancharla en la parte trasera del vestido.

Ambas salimos de casa ella tomará rumbo a su casa junto a los mellizos, pasarán una tarde-noche con los abuelos. Y yo debo ir al evento.

Contigo siempre      Joseph Quinn Donde viven las historias. Descúbrelo ahora