Draco Malfoy y el mundo mágico II

Solo un abrazo...

Pov Draco

Todos en Hogwarts estaban enterados de lo que ocurrió la noche anterior, o casi todo. Al final del curso, escuché muchas teorías acerca de cómo se desencadenaron los eventos sucedidos la noche anterior, pero ninguna se acercaba a la verdad...

Spungen estaba furioso por lo de Buckbeak, era infantil que siguiera haciendo una rabieta. La mayoría lo ignoró, por una noticia más impactante se había desencadenado en la comunidad mágica de Londres. El juicio de Sirius Black, las autoridades habían decidido reabrir el caso. El jefe de aurores Rufus Scrimgeour había presionado al señor ministro para reabrir un juicio y profundizar en las investigaciones.

Aunque todo había tenido un final feliz para el protagonista principal, para mí fue como un despedida. Mis amigos estuvieron conmigo todo el día, papá había querido llevarme antes a casa pero todos unidos fueron hablar con mi padre, para pedirle que solo me dejara quedar los últimos días que quedaban del curso.

Papá al principio se rehusó, pero al ser la última semana tuvo que ser flexible ante el pedido de la manada de niños que le rodeaba.

Blaise y Pansy estaban felices, rebosando de felicidad. Terry y Anthony querían llevarme a Hogsmeade. Ernie y Wayne habían planeado comprar muchos dulces y ver películas infantiles lo que quedaba del día. Las chicas querían hacer un picnic con los demás chicos que la apoyaban. Colín estaba deprimido, los días que no le preste atención, la pequeña Tory lo había acompañado a la biblioteca y a sus clases, también se había enterado que el hermano de Colin asistiría el próximo curso a Hogwarts.

-D-Draco... ¿E-en verdad vas a marcharte? -el pequeño Colin tenía los ojos rojos, no podía culparlo. Mis propias acciones me habían colocado en esta incómoda situación.

-Lo siento, Colin -me acerque y me le di un suave abrazo, el niño parecía apunto de llorar. Me separé y lo tomo de las mejillas -. Debí ser más cuidadoso, se que me extrañaras mucho pero también tendrás la compañía de todos. Los chicos aquí te apoyaran bastante y si alguien te molesta, no dudes en decirnos. 

Colín asintió triste. Astoria le dio unas suaves palmadas en la espalda.

Para alegrar aquellos tristones del grupo, fuimos a todos los lugares a los que querían, primero a tomar un picnic con las chicas, luego a Hogsmeade hacer algunas compras, jugamos un poco de casino y al final fuimos a ver películas a la sala de los menesteres.

Ciertamente, no era lo único que me apenaba del final del curso, también estaba la partida del profesor Lupin. Mi corazón sentía una profunda pérdida como si algo importante se hubiera ido y desaparecido para siempre, fue esa sensación monstruosa que sentí cuando mi mamá se marchó de casa, mi papá se volvió indiferente. Por un momento pensé en lo que me dijo la profesora Trelawney y solo quería gritar y llorar, porque todo salió mal. 

Los chicos hicieron de todo para disfrutar nuestros últimos días juntos, desde salir a Hogsmeade hasta jugar como niños en el gran lago. 

Los resultados de los exámenes salieron el último día del curso. Todos habíamos aprobado todas las asignaturas. Hannah estaba asombrada que el profesor Bookman la hubiera aprobado en Historia de la Magia. Algunos habían indagado sobre si el profesor Bookman se apiadó de todos y les puso buena nota, pero su gesto brusco y frío durante las comidas indicaba que no fue suerte sino el esfuerzo de cada uno. Incluso me sentía impresionado que tuviera la más alta nota, a Granger la había escuchado quejarse de la nota intermedia que le puso el profesor Bookman, y eso... Que hubieron peores reacciones. 

Marcus y Miles obtuvieron las más altas calificaciones en ÉXTASIS. Peregrine y Lucian consiguieron varios TIMOS cada uno. Mientras tanto, la casa de Slytherin, en gran medida gracias al espectáculo de actuación que dimos en la copa de quidditch, habíamos ganado por tercer año consecutivo la copa de las Casas. Por eso la fiesta del final de curso tuvo lugar en medio de ornamentos verdes y plateados, y la mesa de mi casa fue la más ruidosa de todas, ya que solo nosotros lo celebrabamos los demás parecían compungidos y molestos por nuestra victoria. Potter parecía muy sereno, quizás la noticia de que su padrino estaba libre era lo único que lo alegraba, porque después la victoria de Slytherin les causó gran rabia a los demás, sobretodo a Ginevra Weasley y Percy Weasley.