Travesuras de Dragones II

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Pov Draco

- ¡Draco! -me levanté sobresaltado, sentí dos pesos extra en mi pecho y en mi estómago. Miré adormilado hacia abajo y vi a Blaise utilizando mi estomago como almohada y sobre mi pecho estaba durmiendo babeando Justin - ¡Draco, hijo, levántate! ¡Tenemos que alistarte para la reunión! -eso me sobresalto, dándole golpecitos en la cabeza a mis dos amigos, los levante.

-Q-que... ¿Qué paso? -Justin se levantó mirando a todos lados con el sueño impreso en el rostro.

-Aún quiero dormir... -Blaise se abrazó a mi estómago.

-Blaise debo de irme, mamá me está llamando -dije bajito. Blaise a regañadientes se apartó y se sentó sobre el colchón.

Me levante y mire a todos lados, mis amigos dormían profundamente sobre las colchonetas y los almohadones. Excepto Blaise y Justin que estaban irritados de ser levantados tempranos.

-Draco... -Volvió a llamar mamá desde afuera de la tienda de acampar de Lady Zabini.

-Ya voy mamá -dije.

Me coloque mis zapatos mientras mis otros dos amigos se volvían al mundo de Morfeo. Al salir, madre estaba afuera con el rostro impaciente y ojos preocupados.

-Vamos, tu padre no tarda en llegar y debemos de prepararte -madre tiro suavemente de mi mano y me llevo a nuestra tienda de acampar.

En el camino no pude evitar pensar en lo que hice ayer con mis amigos. Durante casi toda la semana me la pase bien junto a ellos incluso llegamos a dormir juntos, como lo es hasta ahora, en una sola tienda de acampar. Para poder contar historias de terror y jugar hasta que diera la media noche.

La señora Zabini no tenía ningún problema en recibirnos a todos en su tienda, las chicas incluso estaban animadas de poder pasar tiempo de calidad con los chicos.

Solo que ahora me daba cuenta que el tiempo al lado de ellos era cada vez más corto y mi corazón dolía al pensar que ya no los vería.

-Ve a bañarte -entramos a la tienda. El señor Lovegood estaba tomando una humeante taza de café -. En tu cuarto he dejado el traje listo, bajas para que te pueda peinar cuando estes listo.

-Si, mamá.

Fui al cuarto de baño a asearme, el agua salía caliente. Madre se aseguró de dejarme todos los productos de aseo personal porque había desde los aceites esenciales para el cuerpo hasta la crema tratamiento para el cabello. No me detuve a disfrutar de un baño lujoso y me bañé rápido para poder cambiarme.

-Draco tu padre ya llego -justo en ese momento salí del baño y fuera de el estaba mamá -. Ve a cambiarte, tu padre te espera abajo junto con su secretario.

-Ya mamá.

Fui rápido al cuarto y me coloque el traje que usaría para recibir a los embajadores. Los pantalones eran oscuros al igual que el chaleco de botones, parecía un traje sencillo de gala, pero cuando me puse el largo abrigo, vi que tenía franjas de plata en las mangas y el cuello, en la espalda el blasón del dragón enredado con un grifo oscuro en una danza mortal. E el interior del mismo abrigo, en hilos de tejer rojo y plata estaba el grifo grabado con dos espadas carmesí cruzándolos. Realmente, Madam Malking se lució al confeccionar dicho traje.

Sali de mi habitación y baje rápido de las escaleras, al ver a Cedric sentado en el comedor junto con el señor Lovegood casi me caigo de las escaleras.

- ¡Draco! -padre exclamo preocupado. Papá me sostuvo para que no rodara por las escaleras -hijo debes de tener cuidado -me amonesto. Mire a papá, todo avergonzado.

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⏰ Última actualización: Jun 02 ⏰

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Draco Malfoy y el mundo mágico IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora