Capitulo 37

1.3K 119 10
                                    

Narra Leo

Me desperté lentamente sintiendo unos brazos rodearme, era tan cómodo y cálido, tan agradable que no quería que nunca se fuera esa sensación. Me acomode en ellos y sentí una suave respiración , abrí lentamente los ojos y me di vuelta, vi a Alex durmiendo tranquilamente se veía tan adorable, lo miré detenidamente, él era hermoso, no se como no tenía a alguien a su lado.

-¿Qué haces?-me dijo con una sonrisa y yo me asuste y él abrió los ojos.

-Nada-le dije avergonzado.

-Pues me estabas viendo-me dijo mirándome a los ojos y yo aparté mi vista y lo oí reírse.

-Es que eres lindo-le dije y lo miré, él estaba con una sonrisa aún más grande.

-Pero tu eres lo más hermoso-me dijo dándome un beso en la mejilla-¿cómo dormiste?-

-Excelente-le dije con una sonrisa-¿y tú?-

-Maravillosamente bien-me dijo acercándose un poco a mi rostro, juntando nuestras narices-eres adorable-me dijo sin apartar su mirada de la mía, sentía mi corazón ir muy rápido, veía sus ojos fijamente, no quería pestañar ni una sola vez, sentía que si pestañaba me perdería de algo.

Sus ojos transmitían una sensación de calidez, amor y cariño. Era tan impresionante que tan solo su mirada me transmitiera esa clase de sentimiento. Sentí mi respiración agitarse, de un momento a otro todos mis pensamientos se fueron solo lo veía a él y a sus ojos, quizás suene estúpido pero en este preciso momento siento que esta es la mejor sensación que algún ser humano pueda sentir, quería quedarme allí por siempre mirándole pero como no faltan las interrupciones alguien tocó la puerta. Él se separó de mí y se sentó en la cama, yo hice lo mismo, le vi pasar sus manos por su cabello para luego suspirar y mirar la puerta.

-Pase-dijo y la puerta se abrió y apareció la señora Williams.

-Lo lamento, no le vi en su cuarto y quería preguntarle a Leo si sabía algo-dijo ella viéndome con una sonrisa.

-Pues aquí estoy-le dijo poniéndose de pie y me miró -en unos momentos les traigo el desayuno-me dijo con una sonrisa antes de desaparecer por esa puerta con la señora Williams.

¿Qué era lo que me sucedía? Estaba peor que colegiala enamoradiza. Miré mi vientre que se notaba un poco más y sonreí, era mis pequeños hermosos, ¿cómo serían? ¿se parecerían a mí o a su padre? En ese momento un balde de agua fría me cayó encima, aún seguía sin saber quien era su padre, ¿qué haría cuando estuvieran grandes y me preguntaran? En ese momento mis ojos se llenaron de lágrimas, todo eso pasaría si yo sobrevivía, si es que yo lograra seguir por ellos. Lágrimas empezaron a caer, ¿quién los cuidaría? ¿me extrañarían? ¿les dirían quien era su omma? ¿ellos me odiarían por no haber podido lograr estar con ellos? Miles de dudas me llenaban la cabeza, sentía cada vez mi llanto ir más fuerte y en ese momento Alex entró con una bandeja y al verme prácticamente corrió y dejó la bandeja a un costado sentándose a mi lado y abrazandome.

-Tengo miedo, ¿qué va a pasar si no logro sobrevivir luego de tenerlos?-le pregunté aferrándome a él.

-Eso no va a pasar-me dijo separándome un poco de él -Leo mírame-me dijo colocando sus manos en mi rostro haciendo que le viera-yo no voy a permitir que te suceda algo, voy a hacer todo para que tu puedas estar con ellos para que los veas crecer-dijo mirándome fijamente-haré todo por ti, porque te quiero-dijo antes de depositar un suave beso en mis labios.

Sentí el contacto era dulce sin presión alguna, solo duró unos segundos y no pasó del roce de estos pero sentía que algo en mí me decía que había quizás una esperanza lo miré y él me veía con una sonrisa, debía de estar yo muy sonrojado por aquel contacto, y claro todo era culpa de mis hormonas creo.

Enamorado de quien dice ser tu mejor amigo-Keo [VIXX yaoi/gay]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora