Las Gemas Gemelas

Los años te han cambiado,mellon

_Algunos años han pasado,mi señor, aunque ya no tengo por qué llamarte así.

Legolas no lo podía creer.Se había quedado de piedra al ver ante él de nuevo aquella cara que durante cientos de años lo había acompañado en tantas aventuras.

Merideth los miraba boquiabierta.

_Es...es una..._tartamudeó, confusa.

_Tauriel...¿qué estás haciendo aquí?_le preguntó el príncipe, dejando de sujetarla.

La elfa, ahora con la cabeza descubierta, mostraba una larguísima melena roja, apenas trenzada en la cabeza.

Era una guerrera, nada que ver con las elegantes galadhrim, aunque era muy bella y sus ojos de color verde claro irradiaban luz y vida.

Alasmmel bajó el arco también. Tauriel había sido su capitana durante mucho tiempo y la conocía bien, aunque no tanto como Legolas, quien había pasado mas tiempo con ella...hasta que Thranduil la desterró del reino.

_Os vengo siguiendo desde que salísteis de Lorien_les dijo poniéndose de pie_.Últimamente frecuento mucho por esa zona.Os vi con ellas y me pregunté dónde ibais_dijo, señalando a Merideth y Leah, que la miraban atónitas, pero sin acercarse_.

_¿Por qué huías?_le preguntó Legolas_¿Por qué simplemente no te acercaste a nosotros?

Tauriel desvió la mirada hacia otro lado.

_Porque no sabía cómo lo tomarías_respondió ella, en voz baja_.

Merideth miró al elfo.Su cara revelaba un gran desconcierto... ¿qué estaba pasando alli? ¿Quién era esa tal Tauriel que lo había sorprendido tanto?

La elfa recogió sus dagas del suelo y las colocó en su espalda, al igual que hacía Legolas.

_Estás igual_le dijo el príncipe, ya algo más centrado_, me alegro de verte de nuevo y saber de ti_.

Tauriel se acercó mas a él y le estudió la cara.

_Tú también... aunque tu expresión es distinta.Los años te han cambiado, mellon.

_No es bueno encerrarse durante milenios dentro de uno mismo sin ver más allá_respondió él_.

Tauriel sonrió de buena gana.

_Al fin te diste cuenta.Supongo que te habrá ido bien.

Legolas le devolvió la sonrisa.

Encendieron de nuevo el fuego y los ahora tres elfos se reunieron frente a él, hablando animadamente.Leah y Merideth se unieron también, ésta última a regañadientes,y los escucharon hablar.

_No te las he presentado_le dijo Legolas a Tauriel_, ellas son Merideth y Leah.

Leah saludó a la elfa y le ofreció un poco de lembas.

_Gracias_dijo ella_, estoy muerta de hambre.El frío de la montaña y...las carreras por la nieve abren mucho el apetito.

Merideth saludó con un simple y seco 'hola'.

_¿Dónde has estado todos éstos años?_preguntó Alasmmel._Habrás tenido tiempo de hacer y ver de todo.

_He estado un tiempo por aquí, por allí... cuando salí del Bosque Negro estuve una buena temporada en Erebor, con los enanos_dijo, echándole una breve mirada a Legolas_, me acogieron como a uno de ellos, pero no soportaba verme encerrada, entre sus paredes de piedra y me marché a Lorien.Galadriel fue buena conmigo y estuve allí muchos años, bajo su favor.Decidí luego partir hacia otras tierras, y estuve vagando y buscándome la vida.Conocí muchas culturas y gente diferente a nosotros.Después de la guerra del Anillo volví a Lorien, me enteré que partirían hacia Valinor y quise irme con ellos,pero ella me dijo que se quedaría un tiempo indefinido en la Tierra Media por un asunto algo complicado y postergó su partida.Aún no sé que clase de asunto fué, ni si ha sido solucionado.