¿Alguien está preparado para aceptar la muerte de los seres que ama?
Sharik viene de una etapa muy dura debido a la enfermedad y la posterior muerte de su hermano menor. Se siente solo en un mundo en el que prácticamente no encaja, solo apoyado por...
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—¡Es Kevin! —gritó Brandon y todos corrieron hacia el hangar. El bastardo comenzó a dispararles con todo lo que tenía.
—¡Corran! —. Eva lanzó algunos disparos y su hermano la tironeó para que avanzara. Se movieron a toda velocidad mientras la camioneta empujaba los escombros e ingresaba a la pista. Una pista libre en donde podrían hacer tiro al blanco si quisieran.
Con las fuerzas que les quedaban, visualizaron el avión que los conduciría a su hogar. Bastian estaba afuera haciéndoles seña. Con un agotamiento físico y mental enorme se movieron hasta allí cuando las camionetas ingresaron.
—¡Suban rápido! —. Brandon tiró del abrigo a Bastian quien se quedó estático y comenzaron a cerrar la puerta. Una lluvia de disparos cayó sobre ellos y el avión empezó a moverse antes de que incluso trabaran la puerta.
JB no iba a esperar a tenerlos encima, ya suficiente tenía con la puta tormenta que le haría de la vida un infierno hasta salir de allí.
—Bienvenidos a los últimos—ironizó encendiendo los controles junto al copiloto que apenas comprendía todo lo que estaba pasando. De seguro pensó que a Jake se le escaparon algunos detalles cuando lo contrató.
Kevin y su equipo corrieron para posicionarse delante del avión y empezaron a disparar.
—Vamos, hombre ¡Muévete! —gritó Kaz y JB retrocedió en la pista para girar y empezar la carrera de despegue.
—Malditos hijos de puta—dijo Kevin viendo como la victoria se le escapaba, Tobías, su compañero, lo agarró del brazo.
—Basta, hombre—reprochó—. Tenemos el dinero y Dejan está muerto. Se terminó.
—¿Terminar? —Kevin le dio una sonrisa malévola—. No, amigo. Esto apenas comienza...
Dentro del avión eran invencibles, Kevin lo siguió hasta donde pudo, corrió a su lado incluso hasta que este tomó velocidad y por fin voló. Había perdido a más de la mitad de su equipo en la misión, Brandon no iba a saborear la victoria mucho tiempo esta vez.
Era hora de recurrir a los viejos aliados...
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Sharik comenzó a llorar dentro del avión cuando por fin despegó. Eva presionó los labios para no hacerlo, habían perdido a compañeros de batalla, personas que también tenían familia y sufrirían por ello, como era el caso de Iñaki.
Kaz se acercó al muchacho y este se perdió en sus brazos. Fabien abrazó a su hijo y a Bastian, los dos muchachos respondieron el gesto de inmediato. Eva le sonrió a Brandon con sus ojos llenos de lágrimas y tomó su mano con fuerza.
—Creo que Roy tenía razón cuando lo decía—dijo con su voz que se entrecortaba—. Juntos siempre fuimos invencibles.
Sus manos se presionaron, Brandon la envolvió con su brazo sano y ambos sintieron que la paz llegaba, que el mundo por fin volvía a tener equilibrio, que las amenazas solo serían fantasmas que solo aparecerían, de vez en cuando, en sus sueños.
