O18♡

15.5K 620 64
                                    

Eva's pov.

Desperté la mañana siguiente con Oli y Enzo durmiendo a mí lado, los observe por varios minutos con una sonrisa en la cara de felicidad, eran iguales y por eso los amaba a los dos.  Acaricié el pelo de Enzo intentando despertarlo pero no funcionó, estaba destruido después de todo lo que bailamos anoche y Olivia de igual manera así, que decidí levantarme a hacerles el desayuno.

Al bajar vi a Juli sentado mientras revolvia lo que parecía ser un café con leche, probablemente extrañé verlo así en el tiempo que estemos separados. Este estaba de espaldas, me acerqué lentamente y lo abracé colocando mi mentón en su hombro, sonrió y se agarró de mis manos.

—¿Qué haces levantado tan temprano vos? — Pregunté con voz baja para no despertar a Oli y a Enzo.

—No podía dormir. — Bajó la cabeza borrando la sonrisa que me había dedicado y revolvió nuevamente su café.

—¿Te peleaste con Emilia? — Asintió sin decir ni una sola palabra, sabía perfectamente que no hablaría por miedo a llorar.

Lo abracé aún más fuerte tratando de consolarlo, desde que me mudé con él sus peleas se habían vuelto más frecuentes, tanto que podían llegar a desconcentrar a Julián en los partidos o entrenamientos. No quería creer que fuera por celos de que yo estuviera en su casa, sería una razón más para que terminará de odiarla, pero por un lado, no puedo obligar a Julián que corte todo con ella, no estoy en mi derecho de hacer una cosa así.

Por otro lado, sentía que era mi culpa tener que ver a Julián discutiendo todo el tiempo con Emilia, esperaba a que me contará la razón por la cual pelean tanto pero simplemente nunca consigo respuesta de aquello. Frené la mano de Julián para que me contará lo que había pasado entre ellos dos, capaz podía darle algún consejo o ayudarlo.

—Es porque estas viviendo acá. — Susurró un poco audible, cerré mis ojos con pesadez sintiendo la culpa recaer en mí. — Pero a mí no me importa, aunque ella no quiera yo prefiero que te quedes conmigo.

Di la vuelta para sentarme frente a frente con él, entendía que le podía llegar a preocupar como estaría yo, pero no quería que dejará de hacer su vida sólo porque yo estuviera en ella. Mi hermano siempre fue de poner a los demás por delante y siempre se olvidó de él mismo, si bien no creía que Emilia fuera para él, lo hacía feliz y yo no podía arrebatarle eso, sería egoísta de mi parte seguir creándoles problemas en su relación, cada día se volvía más claro a donde iba a ir.

—Juli... — Agarré sus manos entre las mías y obligué a que me mirase a los ojos. — Yo creo que lo mejor va a ser que vaya con Enzo a Lisboa.

Se quedó pensativo y mantuvo un silencio dudoso antes de responder.

—Pero, ¿Vos querés eso? — Preguntó agachando la cabeza.

—Mi corazón me dice que debería irme con vos, — Le dediqué una sonrisa llena de tristeza. — pero mi consciencia me dice que irme con Enzo va a ser lo mejor para vos.

—Vos no sabes lo que es mejor para mí. — Negó con la cabeza y miró fijo a la mesa.

—Sí sé, yo no puedo seguir siendo un ancla en tu vida, Julián. — Dije con el dolor más fuerte que se podía sentir en el pecho. — Lo mejor para vos es que empieces a pensar en vos.

𝗦𝗜𝗡𝗚𝗟𝗘 | 𝙚𝙣𝙯𝙤 𝙛𝙚𝙧𝙣𝙖𝙣𝙙𝙚𝙯 ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora