𝗦𝗜𝗡𝗚𝗟𝗘 | 𝙚𝙣𝙯𝙤 𝙛𝙚𝙧𝙣𝙖𝙣𝙙𝙚𝙯 ©

O21

• 1 año después •

glimpse of us...

Eva's pov.

—¡Julián dale que te están esperando los chicos! — Grité bajando del auto con las valijas en las manos y corriendo hacia las escaleras mecánicas. — ¡Apurate que se nos va boludo!

Estábamos corriendo con apuro hasta el avión que nos estaba esperando exclusivamente a nosotros, Julián fue convocado para jugar en el mundial Qatar 2022 y decidió llevarme con él, estábamos muy emocionados por vivir la experiencia y más que ilusionados por ganar la tercera copa. Julián se había quedado dormido entonces tuvimos que correr hasta dejar el aliento, pasamos nuestros pasaportes y corrimos hasta el avión que aún no había despegado.

Ni siquiera llegamos a hacer el check - in y simplemente subimos al avión recibiendo puteadas de los jugadores de la selección.

—Siempre los Álvarez eh. — Dijo Otamendi desde el asiento principal y ayudándonos con las valijas. — Entre los dos no hacen una, wacho.

—En mi defensa, Julián se quedó dormido. — Reí escusandome y comencé a pasar por los pasillos mientras saludaba a las familias de los jugadores.

Julián tenía su asiento en el fondo así que con dificultad pasamos, pero al mirar al frente noté la presencia divina de alguien que me dejó congelada en mi lugar. Julián me empujó tratando de que reaccionará pero no podía, ambos nos habíamos quedado perplejos al vernos el uno con el otro. A su lado estaba Olivia y una mujer más, ella era castaña y de ojos verdes quien le estaba dando la mamadera a Olivia.

Fue mala idea mía no haber leído la lista de los convocados para el mundial, también por confiar en Julián de que eran los mismos de la Copa América, la cual ganaron contra Brasil 1 - 0. Agaché la cabeza intentando huir de su mirada y pasé por su lado como si no lo conociera, pero este mantuvo su vista en mí causandome más nervios todavía.

Me senté en nuestros asientos asignados y me escondí en mis auriculares con la vista pérdida en la ventanilla. Julián me codeó llamando mi atención, me quité el auricular izquierdo y lo escuché.

—Perdón, no sabía cómo decírtelo. — Dijo inclinandose un poco y alzando los hombros en forma de inocencia.

—Está bien, después de todo son mejores amigos ustedes. — Dije para volver a colocar mi auricular y mirar hacia la ventanilla.

Mis ojos se aguaron rápidamente al recordar ese momento, él había rehecho su vida junto a otra persona como se lo había dicho la última vez que nos despedimos. La nostalgia me ganó y sólo pude pensar en cómo había estado durante ese año en el que no nos vimos, yo terminé mi carrera como kinesiologa gracias a que en Inglaterra son menos años y comencé a ejercer mi trabajo en el Chelsea. Aunque intentaba mirar a la ventanilla del avión evitando cada rastro de él, no pude contenerme a mirarlo desde lejos, notando que él hacía lo mismo.

Todo recuerdo que tengo de él es como le había roto el corazón en mil pedazos, de sólo recordar eso me siento culpable y quiero volver el tiempo atrás para saber si elegirlo sería diferente. Ahora que trabajaría como kinesiologa de la selección sería más raro todo, esperaba que no pero si él se lastimaba, la que tendría que estar ahí para cuidarlo iba a ser yo.

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El viaje fue bastante largo en el cual me dormí la vida, por fin habíamos llegado a Qatar y al hotel más lujoso que existía en el país. Me mantuve distante al resto de los jugadores por razones obvias, no quería estar cerca de él después de todo lo que había pasado entre ambos.