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until i found you.

Eva's pov.

Desperté junto a Enzo, me encantaba amanecer de esta manera con él y sabía que eso duraría toda la vida desde ahora. Dejé varios besos en su cara para despertarlo sin obtener el resultado, Enzo dormía como un oso en pleno invierno, a veces hasta me costaba el doble levantarlo para que se vaya a entrenar, mañana sería el partido de semifinal y parecía que a él le exigían el doble en la cancha.

Pensaba en como sería nuestro bebé, obviamente todavía no sabía si sería una nena o un nene, sólo me me podía imaginar a Oli jugando con él y Enzo amandolo con toda su vida. Acaricié su pelo logrando que por fin se despertará, este me miró y sonrió un poco escondiendo su cara entre las almohadas. Pensé que dormiría otra vez pero me tomó por sorpresa agarrandome de la cintura y subiendome encima de él.

—¡Enzo! — Le grité asustada y lo golpeé mientras me reía.

No dijo nada y simplemente se sentó en la cama dedicandome un beso, con él era feliz y no tenía palabras para definir lo buenos que eran sus besos. Sus manos se deslizaron por mi espaldas y se separó para mirarme a los ojos, aún los tenía un poco arrugados por que recién se levantaba.

—Te tengo una sorpresa hoy. — Dijo muy cerca de mis labios junto a una sonrisa de las que me encantaban.

—¿Qué sorpresa? — Pregunté acariciando su cara.

—Pero si te digo ya no es más sorpresa. — Dijo nuevamente alzando su voz grave mañanera, alzó los hombros en forma de no saber que decir.

—¿Implica salir del hotel? — Bufé sin ganas de moverme y este rio a mí pequeño berrinche.

—Sí, así que anda a cambiarte así vamos. — Volvió a besarme para que no pudiera rezongar ante su petición.

—¿Y si no quiero? — Desafié en medio del beso y este se separó con la mirada seria.

—Lo vas a hacer igual. — Dijo y de un giro me agarró de las piernas colocándome sobre su hombro para llevarme hasta el baño.

—¡Pará, bajame amor! — Grité entre risas, pataleé como pude y me bajó en el baño.

Cerré la puerta mientras me reía por la monada que había hecho, él sabía que con una sonrisa podía comprarme con todo. Me metí en la ducha con intriga ante su sorpresa, siempre me sorprendía con algo nuevo así que está vez no tenía idea de lo que pasaría.

Al salir de bañarme, me pusé la ropa interior y me paré enfrente del espejo mirando mi abdomen, aún no crecía por lo prematuro que era el embarazo pero, lo acaricié con lentitud e imaginandome como sería en un par de meses, sintiéndome emocionada por la experiencia. Sonreí un poco y terminé de cambiarme para salir con Enzo, hoy tendría el día libre debido a que es un día antes del partido y Oli quería quedarse con sus abuelos, ellos irían a la pileta del hotel así que no nos preocupabamos por nada.

Salí encontrando a Enzo con el celular recostado en el respaldo de la cama, al verme sonrió como si fuera instantáneo y se acercó a mí para llevarme a ese lugar donde quería, dejó un beso sonoro en mi mejilla para caminar por los pasillos del hotel de la mano.

Deseaba agarrar su mano durante toda mi vida.

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Autor's pov.

Eva y Enzo se dirigieron hasta aquel muelle en el cual ambos se prometieron amarse e intentarlo todas la veces posibles. Ellos tenían claro que por más que tantas personas se interpusieran entre ambos, ellos volverían a estar juntos.

𝗦𝗜𝗡𝗚𝗟𝗘 | 𝙚𝙣𝙯𝙤 𝙛𝙚𝙧𝙣𝙖𝙣𝙙𝙚𝙯 ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora