Regresa a mis brazos... ❤

Lucía es mi vida entera

Los dos hombres entraron al despacho de la mansión.

— Sentate — pidió Gabriel

Diego no muy convencido accedió y Gabriel se sentó en la silla principal tras el escritorio.

Hubo un silencio incomodo y después de unos segundos Gabriel inició con la conversación.

— Diego, yo se que ........... todo esto es una sorpresa para todos, no solamente para vos, si no para todos, créeme, y si te soy sincero, jamás pensé que mi mujer y vos se reencontrarían.

Diego quien miraba hacia otro lado, volteo a ver fijamente a Gabriel, ¿como sabia de él?, ¿acaso Lucia le había contado sobre su relación?. Tenia que haber sido así, después de todo, ahora sabia que Gabriel era el hombre por el que Lucia lo había dejado hace 16 años.

— ¿Como que no esperabas que Lucia y yo nos reencontráramos? — Diego no se quedó con la duda. — ¿Lucia te contó sobre mi? — preguntó curioso

— Por su puesto, después de todo, fuiste muy importante en su historia y siempre lo vas a ser, los une algo que jamás va a poder romperse. — le aseguró Gabriel

Diego no entendía de lo que hablaba su oponente, aunque el amor que se tuvieron él y Lucia fue extremadamente grande, no había sido suficiente como para unirlos.

— Bueno, evidentemente no fue tan grande, te eligió a vos, ¿no? — le respondió Diego con algo de rabia.

Gabriel notó el sarcasmo en la voz de Diego.

— Te entiendo, créeme, yo en tu lugar no hubiera sabido que hacer, estoy seguro que jamás me hubiera podido resignar a perder a Lucia, no podría vivir sin ella. — le aseguró Gabriel.

Diego sintió un golpe al corazón, evidentemente al que tenia enfrente era un gran oponente.

— Mira Gabriel, no se que te tanto sepas, pero ya que estamos hablando, yo quiero ser sincero con vos, lo que tuvimos fue algo especial, yo como vos también pensé que jamás la volvería a ver, Lucia fue el gran amor de mi vida, y que me haya dejado en la forma que lo hizo no significa que la haya dejado de amar, pero evidentemente han pasado muchos años y vos sos su marido y eso siempre lo voy a respetar, simplemente quiero hablar con ella, quiero respuestas.

Gabriel estaba analizando cuidadosamente cada palabra a palabra que decía Diego.

— Y yo estoy seguro que también ella las necesitas, pero ....... por ahora tenes que darle tiempo, lo que ella perdió fue mucho más grande que vos el día que te fuiste.

Diego movió la cabeza confundido.

— ¡Para!, ¿El día que me fui?, pero si ella fue la que me dejó a mi, a ella fue a la que no le importó nuestro amor.

Esta vez Gabriel era el que estaba confundido y que no entendía en su totalidad.

— Creo que hay algunas cosas que no están del todo claras. — le aseguró Gabriel confundido. — ¿Vos no sabias que Lucia siempre creyó que vos la abandonaste cuando te enteraste que ella ............ — paró antes de terminar pues notó que Diego cada vez estaba más confundido con sus palabras.

— ¿Qué ella que? — preguntó Diego esperando que Gabriel terminará de decir lo que estaba diciendo.

Gabriel lo pensó bien, al parecer, la historia que que él creyó por años estaba mal empatada y quería asegurarse de la versión del hombre antes de seguir con la conversación.

— Diego, Tal vez te parezca absurdo, pero, ¿me podes decir según vos que fue lo que pasó hace años?.

Diego suspiró, no se sentía realmente cómodo contándole su historia al ahora esposo de la mujer que amó, sin embargo, accedió.