Una mujer maravillosa

100 10 3
                                    


Por la noche ......

Lucia abría los cajones del tocador, una y otra vez, buscaba dentro de cajas en donde tenia joyas guardadas

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Lucia abría los cajones del tocador, una y otra vez, buscaba dentro de cajas en donde tenia joyas guardadas.

— ¿Estas buscando algo mi amor ? — preguntó Gabriel al ver a Lucia buscando desesperada

— Estaba buscando una cadenita con un dije que me regaló mi papá desde que era niña, pensé que la tenia guardada, pero no está.

— ¿Hace cuanto no la vez?

— Creo que tiene........... años — dijo Lucia recordando confundida, no sabia por que el ver una cadena en el cuello de Celeste es tarde le había hecho recordar la suya.

— ¿Te parece si mañana le pedis a Paula o a Lucrecia que te ayuden a buscar?, ahora, vení acá, que te quiero abrazar

Lucia cerró los cajones, se subió a la cama y se acurrucó junto a su esposo, quien mientras leía un libro le estiro un brazo para indicarle que se acurrucara junto a él, sin embargo, después de unos minutos Gabriel la notó distraída.

— ¿Que pensas mi amor? — le preguntó sin dejar de ver su libro

— Nada, importante — le aseguró Lucia con una sonrisa cálida.

— Conozco esa carita, cuando vos estas pensando en algo miras a un punto fijo

Lucia suspiró, su esposo la conocía muy bien.

— Estaba pensando en ........... Celeste

Gabriel soltó el libro que estaba leyendo, giró un poco para quedar totalmente frente a ella.

— ¿En Celeste? — preguntó Gabriel extrañado

Lucia asintió

— ¿Qué pasa con ella?

Lucia esta vez hizo un gesto con los hombros y de la nada lagrimas involuntarias salieron de sus ojos castaños.

— Me da pena, verla tan chiquita, vos me has contado que ha pasado por tantas cosas sola, y yo, no se, siento algo que no puedo explicar.

Gabriel sonrió, comprendía el sentimiento de su mujer.

— Mi vida — la abrazó. — Yo también sentí lo mismo desde que la conocí, pero no tenes porque ponerte así. — le decía mientras le acariciaba la espalda

— Ni siquiera se por que siento esto en el pecho, es como si algo me quemara por dentro cuando me imagino lo que ha sido su vida, sin una madre y un padre que hayan velado por ella. — explicaba Lucia en un sollozo ahogado

— Si, lo sé, pero tiene un abuelo maravilloso que le ha dado todo su amor

— No es lo mismo Gabriel; No entiendo por que siento esto por ella —

Regresa a mis brazos... ❤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora