Regresa a mis brazos... ❤

¿No cree que este seria buen momento?

Los cinco entraron al área de urgencias, el doctor los guiaba por los pasillos, Cata hasta delante seguida del anciano, después Lucia y Gabriel detrás de su mujer.

El doctor los llevó hasta una sala de espera privada.

— Están preparando a Celeste en el cuarto de enfrente, primero van a pasar dos y después dos, no van a poder entrar pero la van a poder ver detrás del cristal — les indicó el doctor

Todos asintieron

— Yo voy a empezar a preparar todo con la anestesiología y para la cirugía, en seguida vienen unas enfermas para ayudarlos a prepararse para que puedan pasar a ver a la niña

Todos de nuevo asintieron y el doctor salió de la sala.

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Mientras tanto, afuera de emergencias, Benjamín, Flora, los chicos y Diego esperaban.

— Vamos Nico, come — decía Benjamín

— No, no tengo hambre — se negaba Nicolás

Diego se acercó al chico

— Nico, yo se que estas preocupado, todos lo estamos, pero lo único que podemos hacer en estos momentos es estar tranquilos y fuertes para lo que se necesite — le explicaba Diego

— ¿Creen que Celeste salga bien? — les preguntó el joven preocupado y Martina los miró también.

Aunque Martina y Nicolás ya eran unos jovenes y entendían perfectamente la situación aún esperaban el consuelo de los adultos.

Benjamín miró a Diego y Flora los miró a ambos, los tres adultos sabían el riesgo inminente de la cirugía.

— Por supuesto, Celeste es una niña muy valiente — le respondió Diego dando palmadas en la espalda de Nicolás

— Claro, además tenemos que ser positivos para mandarle todas nuestras buenas vibras a Celeste — dijo Benjamín y Flora asintió.

— Buenas tardes — se escuchó una voz acercandose

Macarena había llegado junto a Isabella al hospital.

Todos las miraron pues ninguno las conocía más que Diego.

— Macarena, ¿que haces aquí? — le preguntó Diego mientras la saludaba

— Nos enteramos que la nenita eh ........ Celeste se puso mal así que mi sobrina y yo quisimos venir a ver si necesitaban algo — explicó la mujer

— No, eh, te agradecemos mucho pero no podemos hacer más que esperar, al parecer Celeste tiene una enfermedad cardiaca congénita y están preparando todo para operarla — le explicaba Diego a Macarena

— ¡Uy que pena!, pobre nenita — soltó Macarena falsamente

Mientras ellos hablaban, Nicolás miraba a Isabella embobado, la rubia lo notó y le lanzó una cara de fastidio, todo esto bajo la mirada de Martina quien con su codo le dió un golpe a Nicolás para que dejara de ver a la rubia.

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Tomás y Cata fueron los primera en entrar a ver a Celeste, después de unos minutos fue el turno de Lucia y Gabriel, quienes bajo la guía de una enfermera llegaron frente a un ventanal de cristal de un cuarto que tenia la puerta cerrada, a través del ventanal no se podía ver nada pues unas persianas lo impedían, soló se escuchaba ruido de personas dando indicaciones y el sonido de aparatos.