Capítulo 59 - Mina de Hierro (4)

26 6 0
                                    

Al escuchar las palabras de Jimin, los ojos de Thomas temblaron. Incluso dudó de lo que había oído, pensó que podría estarlo imaginando.

Sospechando de las intenciones del Marqués, Thomas dijo con indiferencia. — ¿Ah sí? Estoy seguro de que el Marqués, su esposo se alegraría mucho de oírlo. Usted no sólo se preocupa por la casa, sino también de las operaciones de su Mina. Realmente envidio al Marqués. —Thomas se rió, pero realmente no le era agradable el interés que Jimin tenía.

Thomas podía hacer lo que quisiera porque Yoongi le había dejado las responsabilidades de todas las operaciones de la Mina, pero si la propiedad de la Mina cae en manos de Jimin, él se quedaría sin nada. Naturalmente, sus ojos se llenaron de cautela.

Jimin, quien se dio cuenta del destello receloso de Thomas, sostuvo su propia mejilla con elegancia, coincidiendo el movimiento con un pequeño rayo de luz que emitió un brillo deslumbrante junto a su gran anillo de diamante metido en su dedo cubierto por los guantes de terciopelo. Estaba vestido con un estilo excesivo, nunca se habría puesto algo así normalmente, sin embargo, también era buen cebo para llamar la atención de Thomas y dar una apariencia específica. Ante el movimiento y el destello del diamante, Jimin sonrió con arrogancia.

—Tiene razón. A mí esposo no le interesan las Minas, por eso... ¿No debería pertenecer a alguien que reconozca su valor? ¿Opina eso, señor Bradley?

—... ¿Qué? —Parpadeó con desconcierto. —Disculpe, ¿De qué está hablando? No lo entiendo...

Jimin miró fijamente a Thomas, ampliando su sonrisa, luciendo encantador. Esa ampliación lo aprendió de Hoseok, y parecía darle frutos.

Inclinó su cabeza perezosamente, susurrando después con un destello en sus ojos color miel. —Creo que puedo hacerlo mucho mejor si me convierto en el propietario de la Mina. Tanto en lo que se refiere a sus operaciones como a su rentabilidad, y tal vez... ¿También mostrar mucha amabilidad a los empleados que me ayudaron?


Los ojos de Thomas se abrieron de par en par ante la sorpresa tras haber escuchado la sugerencia de Jimin, no podía captar fácilmente que él había dicho eso. 

Jimin lo miraba con atención, esperando una respuesta positiva, para continuar con su actuación, no era su fuerte pero no encontraba otra manera para distraerlo.

Se alejó de la etiqueta, e inclinó su cuerpo hacia delante posando sus codos en su muslo alzado al cruzar sus piernas, susurrando cauteloso hacia Thomas. — ¿Mh? ¿Qué le parece, señor Bradley? ¿Está dispuesto a ayudarme? 

—Es... tan repentino. No estoy seguro de cómo responder. —No pudo evitar que la vergüenza se viera reflejada en su rostro. 

Había venido aquí como encargado de la Mina de Yoongi por orden de Gregor, pero repentinamente estaba interviniendo el hijo del mismo diciendo que quería la Mina de su esposo. Era vergonzoso ver el descaro de esta familia. 

Ver a Thomas en medio de una burbuja pensante, justo como necesitaba, decidió dar un paso atrás. Suspirando, volvió a sentarse recto sobre el sillón. —Creo que necesita tiempo para pensarlo, señor Bradley. 

Asintió rápidamente. —Sí, señor. Lo siento mucho, pero no puedo darle una respuesta ahora mismo. 

Él, que sudaba mucho a simple vista, mordió el anzuelo. Jimin sólo asintió simple en respuesta, habiendo después un incómodo silencio entre los dos. 

—Entonces, señor Bradley. ¿Le he escuchado decir que es del Oeste de Deilun? —Posó dos dedos en contra de su sien, tras apoyarse del respaldar.

—Así es, señor, ¿Acaso conoce usted Deilun? —Respondió a la pregunta ajena con una sonrisa confiada  

Por segunda vez - YOONMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora