Judas; Dabi x OC x Hawks.

XXIV.II

— ¿Y Saori?

— Ella está ayudándome en la agencia — respondí —. Por unos días me estará ayudando.

— Comprendo. Dime, ¿cuál es el motivo de nuestro encuentro?

— Quisiera hablar con usted — asintió — ¿Saori sabe la verdad? — negó.

— No he tenido la oportunidad de hablar bien con ella — bajó la cabeza —. Últimamente ha salido demasiado contigo que son escasas las veces que la veo en la UA. ¿A qué se debe tu pregunta?

— He tenido una conversación con ella — lo miré con suspicacia —. Sabe que EraserHead es su tío — suspiró pesadamente —. Y, creo que ya va siendo hora de que le diga la verdad. Le digo esto porque recientemente la he visto muy estresada y, quizás, si usted le dice la verdad... No sienta tanta molestia en su corazón.

— Tú la quieres mucho, ¿no es así?

— Más que mi propia vida.

El hombre sonrió con calma. Quiere lo mejor para su hija, es lo que todo padre quiere. Lástima que el mío no fue así.

— ¿Gusta hablar con ella en este momento?

— No. Buscaré una manera de hablar con ella — dijo —. Agradezco tu preocupación por mi hija, Hawks. Créeme que no se me hubiera ocurrido alguien más para que esté apoyándola cuando más lo necesite. 

Si supiera el daño que le he hecho, me daría un puñetazo mientras que EraserHead y Present Mic me terminan desplumando.

— He tenido una incertidumbre — asentí —. Ese día que la vi llorando, ¿qué había pasado? Porque estaba contigo.

— No puedo mentirle a usted también — frunció el ceño —. Desde que nos conocimos, desde que éramos niños... La Comisión me pedía convivir con ella porque querían saber toda su vida para, en algún momento, si ella no quisiera trabajar con ellos en la Comisión, sacar a la luz toda esa información y hacerle más daño.

Me miraba serio. No estaba molesto, sino, decepcionado. Su mirada es la misma que ella me dio cuando descubrió la verdad por parte de senpai.

— Seguí así porque pensé que de esa manera podría protegerla. Eso me hicieron creer. Además, me habían condicionado que, si les ayudaba en ese aspecto, me darían permiso de estar con ella sin alguna restricción.

Suspiró con pesadez. Si aún tuviera Quirk ya me hubiese soltado tremendo puñetazo que me terminaría dislocando lo mandíbula.

— ¿Ella sabe? — asentí —. Bien.

— Me alejaré de ella si es lo que quiere — dije —. Entiendo que se encuentre molesto porque es su hija, le hice daño a su hija...

— Comprendo tus razones — interrumpió. Atento, lo miré —. La Comisión siempre ha sido la encargada de alejarte de ella, lo sé. Lo entiendo. Dime, ¿Saori te perdonó? — asentí —. Yo no puedo mandar en ella porque, además de que no sabe la verdad, Saori es mayor de edad y sabe lo que hace. Sólo te voy a pedir, que no vuelvas a hacerle daño de esa manera, o de lo contrario, te pediré que te alejes de ella antes de que Eraser y Mic se den cuenta de lo que le has hecho. Si aún tuviera Quirk también te daría una paliza por haberla hecho llorar — me encogí de hombros. Lo sabía pero no creí que me lo fuera a decir.

Llamaron a su celular, por lo que la conversación se dio por terminada. Tuvo que retirarse mientras que yo tenía que ir a comprar el té helado de Saori, sólo se despidió de mí y que esperaba verme pronto. Llegué a la agencia, pensativo con respecto a la conversación que tuve con All Might. Toda mi vida me he empeñado en hacer el bien, ayudar a los demás, principalmente, ser útil para los demás. Es por eso que cometí todas esas acciones a sus espaldas para, que la Comisión esté satisfecha con mi trabajo y para protegerla, pero esto es lo que no estoy haciendo. Siento que la perjudico cada vez más con mi presencia, con mis acciones y mis palabras. ¿Deberé alejarme de ella para que pueda vivir en paz? Creo que su vida era más tranquila cuando teníamos escasas llamadas y no cuando nos veíamos a diario y siempre trabajando con la Liga. Suspiré.