Sobran las Palabras [Destiel]

Fiesta XII

¡¡¡¡SÍII, UNA ACTUALIZACIÓN!!!! Como dije en los comentarios, realmente intentaré actualizar más seguido (bueno, no es tan difícil con todo lo que tardé entre los caps anteriores) porque se vienen capítulos angustiantes y no quiero dejarlos deprimidxs mucho tiempo uwu Ahora sí, el cap~

Dean se dirigió directamente a donde había dejado a Castiel por pedido de Jo. Estaba sonriendo con expectación, imaginándose esos ojos demasiado azules sobre él. Se preguntó si se habría quedado parado entre toda la gente, o se habría sentado aprovechando que ya no tenía alguien reteniéndolo. El pensamiento lo hizo reír. Seguía sonriendo cuando finalmente llegó, luego de esquivar gente. Pero no encontró a Castiel. No se preocupó, ya que aún estaba la posibilidad de que el chico se hubiese sentado para esperarlo más cómodamente. Sin embargo, no lo encontraba con la mirada. En el baño no estaba, él venía de allí. Para su suerte, a quiénes sí encontró fue a sus amigos. Benny, Crowley y Gabriel estaban allí parados, conversando entre ellos. Dean estaba tan concentrado en Castiel que no notó la seriedad con la que estaban hablando.

-¡Hey, chicos! ¿Vieron a Cas? Me iba a esperar aquí pero realmente no lo veo...

Sus amigos se voltearon rápidamente al oírlo. Fue entonces que el Winchester se percató de su actitud tan extrañamente tensa. Un silencio pesado cayó entre ellos, sin que Dean entendiese qué diablos estaba pasando. Sus amigos se observaban entre ellos con incomodidad.

-¿Todo...?

-Sí, lo vimos.-lo interrumpió Gabriel, sin poder contenerse.

-Oh, genial, ¿dónde está?-preguntó Dean con su mirada brillante.

-Se fue.

Dean rió levemente.

-Vamos, Crowley. En este rato pudieron pensar una broma mejor.

-Es verdad, Dean~no.

-¿Lo dicen en serio?-y la sonrisa estaba desapareciendo de su rostro. La preocupación era palpable en su tono.- ¿Se sentía mal...?

-Lo echamos.

La voz de Benny sonó seca y segura. Dean sabía que su amigo no bromeaba, no con ese tono de voz. Pero quiso creer que sí, porque no podía comprender lo que Benny le estaba explicando. No quería hacerlo.

-Deja de...

-Dean. Lo. Echamos.-repitió Benny marcando cada palabra.

Dean tomó una bocanada de aire que no soltó. Su mente intentaba procesar la información. Eran tan solo dos palabras, sin embargo, encerraban tantas cosas que sentía que su cerebro iba a explotar. Trató de respirar dos, tres veces, aunque le estaba costando. Soltó el aire contenido lentamente para no desmayarse.

-¿Qué?-fue lo único que pudo articular.

Sus tres amigos lo miraban fijamente, cierta tristeza escondida en sus ojos. Pero ninguno era el par de ojos azules que Dean ansiaba ver.

-Dean, él realmente debía irse. Sabemos que no quieres oír esto, pero debes confiar en nosotros.

La voz de Gabriel, más suave, llegaba a sus oídos de forma lejana. Se obligó a sí mismo a concentrarse, porque antes de caer en la desesperación necesitaba entender qué había pasado. Miraba a los tres alternativamente, esperando que alguien al fin le dijese todo, aunque era obvio que ninguno quería ser quien le diese las malas noticias.

-No entiendo.-dijo al fin Dean.

Hacía solo un rato estaba en esa misma pista de baile besando a Castiel, deshaciéndose en sus brazos como si solo existieran ellos dos en el mundo. Habían logrado superar sus miedos y la recompensa había sido maravillosa. Sabía que Castiel lo había disfrutado tanto como él, podía sentirlo en la forma en lo que lo abrazaba, lo besaba, lo acariciaba. No tenía dudas de ello. ¿Qué podía haber cambiado en tan poco tiempo, en su ausencia? Entonces Dean se dio cuenta. No le importaba qué mierda había pasado. Nada valía que echasen a Castiel de su casa. Y ni siquiera podía pensar en enojarse con sus amigos, pues cualquier reproche estaba enterrado por su preocupación por el oji azul, quien era su prioridad en ese momento.