Capitulo//11

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La palabra "embarazada" hacia eco en la cabeza de Zayn, ella había tomado la pastilla del día después. ¿Cómo había podido ocurrir? Amanda le miraba con temor, su rostro estaba serio y entonces el miedo que ella sentía, se estaba haciendo realidad.

—Zayn, dime algo. — pidió con temor.

—¿Embarazada? — ella asintió. —¿No habías tomado la pastilla?

—Si, la tomé. Es ahí donde no lo logro entender, mi abuela me dijo que nunca me fiara en una pastilla, que fallaban. — explicó. —¿Pero como voy a saberlo? Nunca había estado con un hombre, no sabía de qué eso fallaba. Creía que era muy  fiable. —exclamó. —Zayn, te juro que me tomé la pastilla.

—Amanda, te creo. — la calmó. —Pero también tengo que decirte algo sobre mi religión.

—¿No quieres tenerlo? ¿Me dirás que aborte? —él arrugó su ceño con asombro

—¿Que dices? No, escúchame. — ella asintió. —Amanda, en mi religión. Hay reglas que llevan existiendo miles de años, que han pasado de generación a generación y no se puede cambiar. Yo nunca pensé que me iba a ocurrir tan rápido, pero aquí estoy. —el camarero regreso con el pedido. —Amanda, yo jamás te diré que abortes, en mi país es un delito y no existe el aborto, sea o no buscado. Así que me haré cargo de ese bebé, porque ambos lo hicimos. — ella se relajó, él se iba a hacer cargo. —Pero también tiene que saber que, nos tenemos que casar. — Amanda por poco escupe el café.

—¿Qué has dicho? — dijo limpiando su boca. —¿Casarnos?

—Si, verás. Soy árabe Amanda, primero te quite la virginidad y luego hay un bebé dentro de ti, que hicimos ambos. Sabes que tenemos que tener una imagen frente a las cámaras y te comenté cómo lo llevó. — ella asintió. —Llamalo antiguo, lo que quieras, pero no dejaré que mi hijo nazca fuera del matrimonio. Como dije, esto viene de haces años atrás y he sido criado así.

—Zayn, pero yo no tengo idea de realeza, ni de bailes ni nada de eso. — dijo apenada. —Ni siquiera de ser una buena princesa.

—No haces falta que seas refinada, serás princesa, si. Si quieres podemos enseñarte, jamás te obligaré a nada. —ella mordió su labio. —Pero si tenemos que casarnos.

—Hace unos días, leí las leyes de los árabe. — él la miró con una sonrisa. —Sé que tenéis por costumbre, casaron cuatro veces.

—Si, siempre y cuando puedas mantenerlas, y sí, podemos casarnos con cuatro mujeres. —ella negó. —Ademas, para casarme por segunda vez, tenemos que tener la autorización de la primera esposa.

—Ya, ¿Y crees qué yo te voy a dejar qué te cases por segunda vez? No, Zayn. Yo no soy celosa, pero tampoco tonta. — exclamó. —Si te casas conmigo, no tendrás más mujeres.

—¿Crees qué me importa eso? No, Amanda. No soy de tener varias mujeres o novias. Soy fiel y si me caso contigo, serás la única con quien estaré casado y formar la familia. — respondió con seriedad. —Mi padre, sólo tiene una esposa y nunca quiso casarse por segunda vez.

—¿No te obligarían a casarte por segunda vez? — preguntó llevándose la taza de café a la boca.

—No, obligarme no, ya no soy un niño. Pero si me ofrecerían una segunda esposa, algo que yo siempre me negaré. — respondió. —Amanda, estás embarazada de mi hijo. Vale, fue un descuido, pero es mi hijo. No quiero que nazca fuera del matrimonio.

—Zayn, casi no nos conocemos. — exclamó. —¿Que vamos a decir a la gente que nos pregunte? ¿Que me dejaste embarazada y tuvimos que casarnos de penalti?

—No, diremos que éramos pareja en secreto y que hemos decidido casarnos. A mis padres no les puedo mentir, ellos ya sabían que no estaba todavía para el matrimonio y que no tenía pareja. Pero a la gente que me conoce poco y que casi nunca me ven, podemos decirles eso. — ella asintió.

—¿No tiene hermanos? — él negó.

—Soy hijo único, pero digamos que tengo a Latifa que es como una hermana para mí. — respondió. —Tengo primos, que son duques, marqueses, en fin...

—¿Cuando nos casariamos?

—Primero tendría que presentarte a mis padres, haces un reunión con la gente de la realeza, presentarte antes ellos y después viene el matrimonio. — Amanda mordió su labio. —Delante de la gente te propongo matrimonio y antes de que el vientre se te note, casarnos.

—¿A tus padres les daría igual que no fuera de la realeza? — preguntó nerviosa.

—No, mis padres son unas bellísimas personas, no miran a la gente por aspecto o estatus.  Además, a ti no te hace falta dinero, tienes de sobra y eres la futura dueña de los hoteles más famoso de Europa. — ambos sonrieron.

—De acuerdo, acepto casarme contigo. — Zayn acercó su silla para acercarse a ella y la besó.

—Gracias, Habibi. — la volvió a besar.

Cuando acabaron de tomar su desayuno, Zayn la llevó a casa de su abuela, la iban a dar la noticia de que se casaría. Su abuela era su vida, su única familia. Alejarse de ella, seria como quitarle un trozo de su alma.
Durante el camino, ambos hablaban. Hassan miraba a la joven con desconfianza, no la conocía y tal vez él creía que ella iba por el dinero del príncipe. Hassan no sabía que ella era la dueña de los hoteles Lombardo Los hoteles más famoso y elegantes de Europa.

Cuando llegaron, Hassan les abrió la puerta, ella salió y el agradeció con una sonrisa. Cogidos de la mano, ellos caminaron hasta la puerta de su casa. Amanda  sacó su llave y abrió, no se escuchaba nada, pero pronto se escuchó unos pasos. Ellos se giraron y vieron a su abuela.

—Hola, pareja. — saludo la mujer con una sonrisa. —Tu debes de ser Zayn. — él asiento. —Soy Alba, encantada. — Zayn, la dio dos besos.

—Igualmente, doña Alba. — la sonrió.

—Por fin tengo el placer de conocerte, mi nieta no paraba de hablar de ti. — ellos rieron. —¿Quieres tomar algo?

—No, doña Alba, ya hemos desayunado. — respondió amablemente.

—Abuela, queríamos hablar contigo. — la mujer asintió. —Vamos a sentarnos. —Bueno, Zayn ya sabe que estoy embarazada, de hecho viajó para que habláramos. — Alba asintió. —Estuvimos hablando y Zayn me propuso matrimonio.

—¿Te vas a casar? — preguntó. —Pero, ¿Como lo vais hacer? Digo, Zayn es un príncipe, os harán preguntas.

—Ya lo hemos hablado, doña Alba. Diremos que éramos una pareja que mantenía su relación en secreto. — la mujer sonrió. Ella quería que su nieta tuviera una familia, que no se quedará sola. Así que iba aceptar que ellos se casarán, al fin al cabo, iba a tener un bebé. —Hemos venido, porque queríamos su aprobación.

—Por mi la tenéis, pero me la cuidas,. Amanda es mi vida entera. — él asintió. —Dios, mi nieta se casa, por fin una boda.

Ellos rieron. Alba era mujer fuerte, pero ya era mayor y quería que antes de que le llegara la hora, su nieta tuviera un novio. Que no estuviera sola, sabía que Zayn la iba hacer feliz y con ellos podía estar tranquila.

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Hola, bellas, aqui tenéis otro capítulo, espero que os guste.

Decidme, ¿Queréis maratón? Os leo.

Besos desde España, nos leemos pronto

Un Bebé Para El Príncipe 1° (Saga Realeza) EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora