Maratón 1/5
Zayn y Amanda, seguían en la casa de la señora Alba. Hablaban animadamente entre ellos, reían. Alba miraba a su nieta, veía en su rostro felicidad y amor, al igual que en el rostro del hombre.—Zayn, ¿Por qué no te quedas aquí a dormir? Puedes dormir con mi nieta. — Zayn, negó.
—Gracias, doña Alba, pero no quiero incomodar. Me quedaré en su hotel. — respondió con educación.
—Debes saber algo de mi, hijo. Si te quedas en mi hotel, no pagarás nada. Serás parte de la familia y eres el padre de mi bisnietos. — exclamó. —Y no acepto un no, soy muy cabezota.
Zayn miró Amanda cómo pidiéndole ayuda, pero ella solo levantó los hombros con una sonrisa.
—De acuerdo, doña Alba, me quedare aquí. — Alba sonrió. —Pero mañana, me gustaría que Amanda y yo fuéramos al médico, y de allí coger el jet e irnos a Arabia.
—¿Para conocer a tus padres? — habló ella y este asintió.
Zayn y Amanda, sentían sus cuerpos arder, deseaban sentirse de nuevo. Necesitaban tocarse y volver a tener sus cuerpos desnudos, sintiendo el calor de sus cuerpos, sudando.
Tenían que aguantar y esperar, intentaban que el calentón no les sobrepasaran.Zayn se disculpó con ellas y salió de la casa, dirigiéndose hacia el coche, donde estaba su escolta.
—Hassan, saca mi maleta, por favor. — ordenó.
Hassan obedeció, no le gustaba que esa mujer estuviera con su jefe. Aunque estuviera frente aquella casa, grande y de diseño, seguía desconfiando de ella.
Hassan, sacó la maleta del maletero, iba a llevarlo él, pero Zayn se ofreció.—Lo hago yo, Hassan, no te preocupes. Me quedaré aquí a dormir. — explicó y este solo asintió.
Amanda, no era de su agrado y no quería que su jefe se enamorara de ella, aunque rezaba para que no lo estuviera ya.
Zayn entró a la casa y Amanda fue delante para llevarle a su habitación, pasarían la noche juntos e incluso que también lo iban a hacer en Arabia.
Amanda estaba emocionada, iba a conocer Arabia, ella no lo conocía. Iba a estar en una ciudad nueva y con una cultura diferente a ella. Pero con él, iba al fin del mundo sin pensarlo dos veces.—Te enseñó mi dulce habitación. — dijo ella abriendo las puertas y dejándole pasar.
Zayn paso y vio una habitación grande, con una cama de matrimonio con sábanas de seda blancas y negras, dos mesitas de noche blancas de diseño.
Tenía un clóset con toda su ropa, armarios grandes del mismo color. Tenia un baño propio para ella.—Es grande. — dijo mirando hacia los lados y dejando su maleta al lado de la cama. —Tienes buen gusto, habibi.
—¿En Arabia dormiremos juntos? — este la miró y sonrió.
—No, en mi país es diferente. Hasta que no estás casado, no puedes compartir habitación con la mujer. — ella abrió sus ojos como platos. —Aunque estés embarazada, no estamos casados y mis padres en esos son muy estrictos.
—¿Hasta que no nos casemos, no compartiremos cama? — él se acercó a ella y la acercó a él.
—Eso es, pero eso no significa que no te iré a buscar por las noches como un ladrón. — la susurró. —Todas las noches, te buscaré para hacerte mía.
—Ya soy tuya, Zayn. — lo abrazó por el cuello.
Zayn la besó, devoró sus labios con ansia y desesperación. Ella era de él, él era de ella y eso nadie podía cambiarlo. Se iban casar, aunque fuera por el bebé, su matrimonio seria para toda la vida. Ya que en la cultura de Zayn, el divorcio, no existía. Bueno, dependiendo.
Pero ellos no pensaban en eso, ellos solo pensaban que iban a ser el uno para el otro, que el amor, iba estar presente. El respeto, la comunicación, la fidelidad. Ellos iban a formar una familia, estaban a la espera de un bebé.Zayn daba gracias a Dios por poner a Amanda en su vida, que ella fuera la madre de su primer hijo, entre otros.
—Zayn, mi abuela está abajo. — se alejó un poco de su boca.
—Te salvas porque está tu abuela abajo, pero está noche, no te me escapas. — advirtió darle otro beso.
—A sus órdenes, su Majestad. — hizo una reverencia con diversión.
Ambos salieron de la habitación, para estar otra ver con doña Alba, que estaba haciendo calceta. Ellos se miraron y este la guiñó un ojo, cogidos de la mano, se sentaron en el sofá.
—¿Vais a comer aquí o vais a salir? — ellos se miraron como buscando una respuesta de cada uno.
—Podemos ir a comer todos juntos. — respondió Zayn. —Asi nos vamos conociendo, ¿Qué me dice, doña Alba?
—Que te lo agradezco, pero podéis ir vosotros juntos, yo he quedado. — Dijo con una sonrisa. Ella no quería molestarles. Era jóvenes y tenían que pasar tiempo juntos. —Esta noche si queréis, podemos cenar aquí y charlamos un poco, ya que mi niña se va mañana y quiero despedirla como se merece.
Ellos no querían insistir, si ella había quedado, no podía cambiar sus planes.
Doña Alba se fue con sus amigas, dejando a la pareja solos en casa. Zayn estaba hablando por teléfono en su idioma natal, mientras ella se cambiaba de ropa, mientras le escuchaba hablar sin entender ni una palabra.
Le parecía sexy verle hablar en árabe, hablando seriamente. Ella quería aprender su idioma y saber más de su cultura. Ella tenia pensado ser una buena princesa, leer sobre la realeza y como ser una dama.Zayn colgó el teléfono y se acercó a ella soltando un suspiro.
—¿Todo bien? — preguntó ella mirándole.
—Si, sólo era un tema de mi primo. — ella asintió. —Al parecer le quieren casar por conveniencia, pero él se niega.
—Bueno, yo le entiendo. Yo tampoco estaría dispuesta a casarme solo por conveniencia. — exclamó.
—Amin, está enamorado de una mujer. Aunque ella no lo ame, él sigue amándola. — ella asintió. —Le hemos dicho que salga y conozca una mujer nueva, pero se niega, él quiere a su hermosa Jade.
—Pobre, no debería aferrarse a un amor no correspondido. Debería dejar que otra mujer lo ame como él se merece. — zayn la sonrió. .
—Dudo muchos que deje pasar a una mujer en su vida. — ella lo besó.
*************
Hola bellas, empezamos el maratón.
Queréis saber algo, ya que la historia a tenido un buen recibimiento, que haré una Saga con ella, con los primos de Zayn y su hermana Latifa.
Espero que os guste.
Empezamos.
Besos 😘
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Un Bebé Para El Príncipe 1° (Saga Realeza) EDITANDO
RomanceZayn Assim Asghar, un príncipe de Arabia Saudí. Un hombre familiar, honesto y que odia las mentiras. Tras un viaje a España, conocerá a una mujer. Sin saber que esa mujer, le iba a dar un giro inesperado a su vida. Ella disfruta, ríe, vive. Ella se...