La amada del Gran Caos [AiLu]

26. ¿Sospecha?

- Contigo hasta el Inframundo Lu.

La amada del Gran Caos posó sus manos en la cintura de su "mía" y la acercó a su cuerpo. Cerró los ojos y ambas se transportaron a Buenos Aires. Aparecieron en un callejón solitario en el centro de la ciudad.

- ¡Boluda, bienvenida a Argentina donde la parrillada es exquisita!. - Dijo animada la Diosa.

- ¡Madre mía, no me lo puedo creer!.

Lucia tomó la mano de Aida y caminaron unas pequeñas cuadras hasta llegar al restaurante.

- Señoritas, soy Emilio seré su Garzón en esta oportunidad ¿Qué desean servirse?.- Les dijo el mozo.

- Mm...- La futura Diosa leyó rápidamente la carta.- Mm...Queremos una parrillada doble mixta con ensalada de lechuga adicional, dos porciones de arroz y ¿Tenes vino "López"?.

- Si, López y Coralillo.

- Coralillo.- Miro a Aida.- El Merlot es exquisito Aiduski.- Le dijo.

- ¿Algo más?.

- ¡Helado de chocolate con galletas oreo!.- Pidió Aida.- Por favor.

- Anotado, la parrillada estará en 10. Si desean algo más me avisan. - Se dió la vuelta y caminó hacia la cocina.

- Em... Lu, no tomaré vino.

- ¿Qué? ¿Por qué?.- Preguntó extrañada.

- Em... tú sabes, por... por el bebé.- Se ruborizó por completo.- Por si acaso.

- No es necesario Aiduski, si estás embarazada de mí, el vino humano no le hará nada.

- No lo haré de todas formas, no correré riesgos Lu.

- Bueno, como quieras Aida Redru.

Pasado unos minutos, llegó la orden. Los sabores eran fantásticos y la carne estaba en su punto perfecto.
Comieron en silencio disfrutando de la cantidad de sabores que se relevaban ante la degustación.

Poco tiempo después, llamaron al hombre para pedir la cuenta, Lucia quería mostrarle varios lugares y no tenían mucho tiempo antes de que llegara la familia de Aida.

- ¿Les gusto la comida?.- preguntó animado el mozo.

- Estuvo re bueno.- Respondió Lucia.- Tenes que felicitarme al chef... los sabores uff... que kilombo che.

- ¡Vos sos de buenos aires, estoy casi seguro... que taquillera sos!.

- No bro, yo soy de Mar del Plata. Traje a mi novia que es de España para que probara la carne Argentina, vos sabes que es una de las mejores. Tomá.- Le entregó varios dólares.- Re buena la atención, hay para que los cambies a pesos argentinos o lo que vos quieras.- Se levantaron de la mesa.

- Hacen hermosa pareja, espero que regresen por aquí, encantado de atenderlas de nuevo.

- Muchas gracias tío.- Dijo Aida.- Regresaremos sin duda.

Salieron del restaurante y caminaron por la ciudad.

- Que guay como cambias de acentos Lu, parece tu lengua natal.

- Claro, vos sabes que yo manejo varios idiomas a la perfección. Este y el castellano son uno de los miles que existen en el cosmos. Es un kilombo, pero nada que hacerle, solo hecharle pa' delante y estamos flaca.

- ¡Ja! Pará boluda.

- Fuera de bromas Aiduski, Argentina es un país lindo. Visite varias ciudades de aquí y la gente es muy maja y bueno... la comida es ¡buah, tú, tú, tú! Una pasada, ¡una pasada, chaval!.