30. ¡Es hoy, es hoy! [Parte 2]

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Lucia posó su mano en mi cintura y me invitó a seguirla a su cuarto. Ese pequeño contacto envío miles de corrientes por todo mi cuerpo.

- ¿Así que este es el Palacio eh?.

- Este es Palacio Aiduski, mi hogar, mi mundo y no sabes lo feliz que estoy de que por fin lo conozcas.

Flipo con cada cosa. Hay miles de fuentes, estatuas, adornos florales con plantas muy brillantes y hermosas. Aun no veo a ningún otro Dios, quizás porque estamos caminando por un pasillo desolado.

- Amada mía, bienvenida a mis aposentos. Bueno, mejor dicho nuestro aposento.- Abre la puerta y joder, no me lo creo... su cuarto es 5 veces mi casa, tiene una fuente de mármol propia adornada al estilo animalista, hay una ventana que da al jardín, supongo y su cama es enorme ¿por que no hay de estas en la tierra chaval? Los regalos de mi familia están en una mesita de mármol que da al ventanal inmenso.- ¡¿Te gusta Aiduski?!.- Mi niña, su tono de voz refleja la alegría que está sintiendo y sus ojitos brillan más que el sol, sus labios rojos como el carmesí, su piel tan pulcra, su.... Uy.... Lo siento, comencé a divagar.

- Es perfecta Lu, propia de tu estilo. - Acorto la distancia entre ambas y me atrevo a abrazar su cuello mientras ella posa sus manos tímidamente en mi cintura.- Te amo bebé.

- Y yo a ti, te amo con toda mi existencia... amada de Eros.

- Su alteza.

- ¡Ah!, pero ¿Qué es eso?.- joder que susto, apareció una cosa, no se que es, pero parecen ¿duendes?.... Hay no se a que compararlo.

"Es la servidumbre de palacio, son seres sin Anima ni Animus, solo nos sirven amor".

- Ella es mi Okwami, tu futura reina. Debes prepararla para la presentación y mi ceremonia de nacimiento ¿Entendido?.

"¿Es como un Elfo doméstico, Lu?.

"Mm... algo así".

- Así será su majestad.- Hizo una reverencia y se comenzó a acercar a mi, que miedo tío.- Su alteza, cuando usted indique comenzamos.

- Ve amor, saben que hacer.

"No me harán nada, Lu".

"Están creados para servirnos, no te harán nada... confía en mí".

- Vale. Vamos ¿Cuál es su nombre?.

- No porto nombre su alteza. Puede llamarme como usted estime.

- ¡No la distraigas y cumple mi orden, servidumbre!.- Le dijo Lu con un tono autoritario, me dió penita por la persona.

- Lu, no le hables así. Fue mi culpa.

"Aiduski, no puedes contradecirme frente a estos seres ni el Olimpo, recuerda que soy su futura reina".

"Ya, perdón. Pero no la trates así, es mi culpa.

- Vamos, le sigo.- Le digo al ser.

Entré a una especie de "baño". Comenzaron a desvestirme, al principio me dio mucha vergüenza y timidez, pero luego todo eso desapareció, aunque jamás me habían vestido, no siendo grande al menos. Espero que sus servicios no incluya bañarme, me niego al completo eh.

Mm...La piel de ellos es parecida al pescado, que extraño... ¡madre mía! Esto parece una peli... ¡Mamá, Dobby me está vistiendo!.

Me colocaron un vestido blanco, un cinturón de plata en mi cintura y en mi cabeza una joya igualmente de plata, parecía una corona pequeña o algo así. Comenzaron a exfoliar miles de aromas exquisitos que nunca e olido en la tierra, que pasada.

La amada del Gran Caos [AiLu] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora